86 - El secreto de Todoroki

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Katara corrió por el pasillo de la escuela, confundida por el hecho de que no había nadie allí. Sus ojos se movían de un lado a otro mientras trataba de encontrar a alguien, abriendo las puertas de algunas de las aulas y encontrándolas vacías.

"¿ Dónde están todos?" Se dijo a sí misma, aumentando la velocidad mientras se abría paso por la escuela. "¡¿Hola?!" gritó, tratando de averiguar qué estaba pasando. Al abrir otra puerta, se sorprendió al encontrarla completamente a oscuras, sin poder ver nada dentro. A pesar de eso, sintió la necesidad de entrar, su respiración se aceleró mientras miraba alrededor de la habitación. "¿Qué es esto?"

-¿Katara ?

La voz familiar hizo que el corazón de Katara se acelerara y se giró mientras sus ojos se acostumbraban a la oscuridad para ver a Shoto de pie allí. "¡Shoto!", gritó mientras corría hacia él. "¿Qué está pasando? ¿Dónde están todos?"

" No lo sé", dijo mientras miraba a su alrededor, "yo tampoco puedo encontrarlos".

Los pasos repentinos desde un costado llamaron la atención de ambos, se giraron y sintieron que sus corazones saltaban cuando vieron las brillantes llamas azules iluminar la fría figura parada allí.

—Oh , ¿quieres que arruinen nuestro tiempo juntos? —Touya rió entre dientes, su siniestra sonrisa hizo que la sangre de Katara se helara—. He estado esperando verte una vez más.

—¡Katara , retrocede! —gritó Shoto, encendiendo sus propias llamas mientras se colocaba frente a ella—. ¡No la tocarás!

Katara se quedó mirando en estado de shock al verlo allí, mirando fijamente su cabello ahora blanco. Sintió que sudaba mientras miraba de un lado a otro a los dos usuarios de fuego, temerosa de decirle la verdad a Shoto. Fue a moverse hacia él, pero jadeó por el dolor agudo que le golpeaba la espalda. Sus ojos miraron hacia su pecho, aterrorizada al ver la pata de araña sobresaliendo de su pecho nuevamente.

KATARA!" gritó Shoto al ver lo que sucedió, pero no pudo moverse porque las llamas azules envolvieron las suyas. Katara ni siquiera pudo moverse cuando la pierna afilada la levantó, sus ojos temblorosos se giraron para ver los brillantes ojos amarillos del cazador a su lado.

—¿Pensabas que ya habías terminado de verme? Yo todavía no había terminado contigo —Iktomi se rió entre dientes mientras sus largos dedos agarraban su cuello—. Te estoy tomando como mi pago.

Katara solo pudo observar con horror cómo la boca del cazador se abría y dejaba al descubierto los afilados colmillos que goteaban veneno. No pudo gritar cuando Iktomi se lanzó hacia adelante, con los colmillos apuntando directamente a su garganta.

Katara se despertó de golpe, jadeando, se estiró y apretó el pecho, su mano temblorosa aferró la camiseta húmeda. La herida en su pecho parecía arder al tacto, frotando el lugar antes de que finalmente desapareciera. Luego se llevó la mano a la garganta y tragó saliva ante la sensación que percibió. Cerró los ojos y se secó el sudor de la cara, gruñendo de frustración antes de agarrarse la nuca. Respiró varias veces, dándose cuenta de que era solo una pesadilla.

"Solo un sueño..." murmuró, abriendo los ojos y acostumbrándose a la tenue luz. De repente, se sorprendió al ver que no estaba en su dormitorio, se dio cuenta de que estaba en la sala principal de los dormitorios de la clase. El repentino gemido desde atrás hizo que abriera los ojos de par en par y se dio la vuelta sorprendida para ver a Shoto durmiendo a su lado en el sofá. Al principio se sonrojó confundida, pero luego recordó haber pasado el rato con todos después de regresar a la escuela, y debió haberse quedado dormida en el sofá junto a él, lo que la hizo reír.

A Waterbending Quirk (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora