Capitulo 36 T2

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Mirando a la ventana como si quisiera buscar ayudad de ese pequeño cristal, pero solo podía ver su reflejo en ella. Las cosas que lo rodeaban estaban muy silenciosas, dio un paso atrás y dándose la vuelta mirando todo lo que le rodeaba en ese momento.

Cayo al suelo rendido con lágrimas brotando de su ojos, con una sensación de dolor y angustia que lo albergaba y un dolor en el pecho. Yoongi estaba en uno de sus peores momentos, no entendía como las cosas se volvieron así de repente.

TOC TOC TOC —Yoongi amor ¿Estás aquí?— pregunto su ahora prometida.

Yoongi retomo su postura se aproximó a un espejo de la habitación y con unos pañitos húmedos se limpio la cara borrando todo rastro de lágrimas.

—¿Amor?

—SI estoy aquí, puedes entrar— Yoongi miro su reflejo en el espejo y vio que sus ojos estaban rojos e hinchados.

—Yoongi te eh estado buscando por todos lados— corrió a abrazarlo.

El pelinegro envolvió sus brazos en la cintura de Monick —Estaba cansado y vine a descansar un poco.

La peli plateada se separó de Yoongi pero vio su cara —¿Qué paso amor, por que tus ojos estaba hinchados?— pregunto acariciando las mejillas de su prometido.

—Me dormí y desperté así— se excusó.

—Bueno, vámonos ya es muy tarde quiero ir a nuestro departamento— jalo a Yoongi hasta la salida, se despidieron de sus padres y se fueron a su casa. Al llegar se durmieron rápido por lo cansado que estaban.

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Había pasado como 2 meses, los preparativos para la boda también estaba en curso, Monick y sus padres al igual que el padre de Yoongi estaban ayudando, en cambio Yoongi siempre se excusaba con reuniones en la empresa, entrevistas o algunos asuntos importantes, Monick era la que escogida todo, ella quería que el estuviera con ella para elegir juntos, pero no se pudo.

—Solo Falta tu vestido de novia hija— su madre aplaudía con euforia.

—Si, vamos nos deben de estar esperando— se refirió a confeccionista que haría su vestido.

Ambas mujeres se dirigieron al lugar.

Ese mismo dia en Corea del sur en el Aeropuerto.

—Los vamos a extrañar mucho chicos— Decía Jin.

—Cuídense, no se olviden de llamarnos cuando lleguen— Nam les mostraba su apoyo.

—No— lloriqueaba Hoseok —No me dejen por favor— suplicaba con unas cuantas lágrimas en sus ojos.

Tae se aproximó al Hoseok para darle un abrazo —Hobi prometo llamarte diario— le sonrió.

Momo y los demás veía la escena enternecidos, pues Hoseok siempre era sentimental con las partidas y al verlo tan vulnerable les daba un poco de ternura y lastima.

—Hobi, te comprare algo carísimo cuando regresemos— Jimin se acercó para igual abrazarlos.

Ese dia Tae y Jimin iban a volar hasta Los Ángeles, Tae había sido invitado por una marca de ropa muy famosa para que pudiera hacer una colaboración de un nuevo diseño, Jimin tenía que ir para firmar los contratos con la empresa MMT, porque con esa empresa y con la de su padre hará su debut.

Después de las despedidas ambos abordaron su vuelo, los chicos al ver despegar el avión se sintieron felices, porque sus amigos estaban cumpliendo muchas cosas que se propusieron hacer.

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Después de un largo viaje, llegaron, ambos apreciaban por la ventanilla del avión la hermosa ciudad de Los Ángeles con sus luces muy iluminadas y edificios que brillaban en la oscuridad de la noche.

—Nuestro hotel está un poco lejos, tomemos un taxi— Jimin estaba revisando el GPS de su móvil y viendo cual era la mejor compañía de taxis debido a que tenían que tener cuidado.

—Listo, esperemos un momento hasta que venga— Jimin se sentó un uno de los asientos de la parada de autobús.

En un momentos silencioso pero cómodo ambos esperaban, pero Jimin decidió romper esa burbuja de silencio.

—Tae, cuando tu nombre sea publicado estoy seguro que serás muy famoso y los reporteros no de dejaran solo— dijo Jimin pegándole un pequeño golpe en el brazo del castaño sin causarle ningún daño.

—¿SI? Bueno pues tú serás tan reconocido por el mundo por tus estupendos pasos de baile y dejaras sin trabajo a muchos bailarines— Carcajeo Tae.

Ambos se empezaron a reír de sus comentarios hasta que.

—Tae— llamo Jimin poniéndose serio, Tae lo miro —¿Si es que alguna vez encuentras a Yoongi que le dirías?— pregunto.

Tae bajo la mirada un poco triste, pues al tratarse de Yoongi las cosas para el siempre eran algo tristes.

—Me gustaría disculparme por no haber podrió cumplir mi promesa de estar siempre juntos,….. También me gustaría agradecerle por todo lo que hizo por mí.

Jimin miro la expresión que hizo Tae y era de alguien muy deprimido y triste.
—¿Lo amas?— pregunto Jimin, la cual sorprendió a Tae.

—No lo sé….— Silencio —me gustaría verlo para ver si es que me siento de esa forma— Tae puso su mano en su pecho apretando un poco su chaqueta —Cuando me enamore otras vez, con Yoongi las cosas eran diferentes ya no me sentía como cuando nos conocíamos, en cambio con Jeon eran sentimientos similares a los que sentía con Yoongi.

El castañito agacho la cabeza avergonzado —Si es que lo veo también me gustaría entender que es lo que siento ahora por el— Tae esbozo una sonrisa.

—Tae espero que sea así—  Dijo Jimin.

Cuando Jimin paso momentos junto a Yoongi durante su trabajo en la empresa pudo conocerlo mucho más, pero en el pelirrubio sus sentimientos también cambiario, cuando regreso con Jungkook se sintió diferente como si los sentimientos que hubiera sentido por el azabache se hubieran desaparecido pero no quería admitirlo.

La partida de Yoongi lo deprimió mucho, cuando desapareció igual que los demás lo intento buscar pero no tuvo éxito, en ese tiempo hasta ahora un sentimiento nuevo empezó a surgir que lo hacía confundir y tenía miedo que cuando Tae se encuentre con Yoongi, ambos volvieran a salir juntos y que ambos se amen como la primera vez.

Después de eso ninguno volvió a hablar llego el taxi y fueron a su departamento donde se Hospedarían.



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