Resultados.

47 10 13
                                    

***

Kirishima inmovilizó al demonio y, rápidamente, abrió un portal que lo conectaba con los calabozos pertenecientes a su familia para que pudiera ser interrogado.

Al llegar encontró a oficiales encargados de la investigación para informarles de la situación.

-He capturado a este demonio que estaba vendiendo ilegalmente autorizaciones para traspasar al mundo humano.

-Entendido. Nosotros nos encargaremos de él.

-De acuerdo. Vuelvo al trabajo.-Respondió el pelirrojo abriendo un nuevo portal para poder volver al trabajo.

El príncipe demonio retomó la investigación sobre la zona y, en principio, no vio nada inusual.

"Seguro que habrá más vendedores por aquí. De eso no hay duda."-Pensó explorando parte de la zona que le quedaba.

Y mientras él se mantenía alerta por el lugar sin mayor complicación, Katsuki luchaba sin descanso contra demonios que habían detectado su parte humana.

-¡Es un híbrido!

-¡Hay que matarlo!

"Casi no doy a basto con estos bastardos."-Pensó contraatacando.

-¡Muere, bastardo!-Exclamó golpeando a uno de ellos con una explosión.

Pudo derribar a varios de aquel impacto pero no con todos.

"¡No paran de aparecer! ¡Así no avanzo una mierda!"-Pensó frustrado al ser incapaz de salir de aquella situación.

Bakugou sabía que no podía continuar así, por lo que intentó una estratagema para librarse de aquellos demonios.

"Tengo que encontrar un señuelo."

Miró a su alrededor y, como no encontró nada con lo que distraerlos, decidió que se arriesgarse e irse por un callejón escondido que había.

"Creo que ya sé qué podría hacer para escapar por el callejón."

Al rubio cenizo se le ocurrió agarrar a un par de demonios, los que le parecieron más débiles y los lanzó contra el grupo de enemigos.

-¡Aaah...!-Gritaron al recibir el impacto.

Katsuki aprovechó el caos y huyó hacia el callejón para poder continuar con su cometido.

"¡Lo logré!"

El híbrido de demonio logró librarse de sus atacantes con éxito y siguió su camino.

-Ahí parece haber alguien sospechoso.-Dijo para sí mismo.

Se acercó poco a poco hasta que vio a una joven demonio acercarse a otro, ellos parecían estar discutiendo sobre algo y luego desaparecieron.

Katsuki no dudó ni por un segundo en seguirlos hasta una calle que estaba más oculta de lo que era habitual y eso incrementó sus sospechas.

"¿A qué habrán venido aquí?"-Pensó escondido.

Entonces vio que la joven demonio se empezó a sacar unos papeles que el otro miraba con sumo interés.

"Es una venta ilegal. Tengo que ir a por ellos."

Bakugou se acercó sigilosamente y, en cuanto estuvo lo suficientemente próximo a ellos, los atacó.

-¡No puede ser!-Gritó ella.

El híbrido de demonio los atacó a base de explosiones hasta dejarlos inconscientes.

"Ahora los tengo que inmovilizar con lo que me dio Eijirou."

Acto seguido, ató las piernas y muñecas de los dos.

"He visto a Eijirou abrir portales, ¿yo también podré?"

No estaba seguro pero lo intentó recordando lo que su novio hacía.

Al principio no surtió efecto lo que hacía, cosa que lo frustró, sin embargo, gracias a su tenacidad; lo consiguió.

"Ahora tengo que llevarlos a las mazmorras castillo."-Pensó sin saber que no era allí donde debía llevarlo.

Bakugou llegó al castillo y los guardias que se encontraban allí se sorprendieron al verlo.

-¿Qué hace aquí, Bakugou?-Cuestionó uno de ellos al verlo.

-He traído a estos idiotas que estaban tratando de vender autorizaciones.

-Está bien... Sin embargo, aquí no se traen a estos sospechosos, eso es más bien en el edificio de los agentes demoníacos.-Pero no pasa nada, nosotros los trasladaremos allí.

-De acuerdo, gracias. Vuelvo a seguir con la investigación.-Dijo abriendo un portal para volver a su zona designada.

***

Más tarde, cuando por fin Katsuki y Eijirou hubieron detenido a varios vendedores de autorizaciones, se reunieron con el padre del pelirrojo para informarle del resultado de su exploración. Haciéndolo ya en su forma humana.

-Yo he podido solamente detener a cuatro porque en mi zona no hubo muchos vendedores ilegales.-Comentó el joven de dientes afilados.-Sin embargo he podido reunir información bastante interesante que he registrado en el informe.

-Sí, lo he leído.-Has hecho un buen trabajo. Estoy orgulloso de ti.-Le dijo su padre.

El príncipe demonio sonrió contento por las palabras de su padre y luego miró a su novio.

-¿Y qué hay de ti, Katsuki? ¿Cómo te ha ido?

-Pues... Yo he detenido a unos cuantos vendedores, han sido en torno a ocho.-He descubierto algunas cosas inusuales como calles que parecían casi totalmente ocultas, como si estuvieran bajo algún hechizo ilusorio o algo parecido.

-Mm... Interesante.-Le dijo su suegro.-Tú fuiste a la zona sur, ¿no es así?

-Sí, esa misma.

-Bien. Tendré muy en cuenta lo que me has dicho, al igual que lo que has escrito en el informe, que está muy bien redactado, por cierto.

El rubio cenizo sonrió y le contestó:

-Gracias, suegro.

Después de sus comentarios, no dijeron mucho más y, al acabar, el rey del infierno les dijo:

-Mañana venid aquí a la misma hora que hoy y seguiremos con la investigación. Aunque será un poco distinto a lo que habéis hecho hoy.

Ambos jóvenes asintieron y salieron del despacho de Daiki.

-¿Cansado, Katsuki?-Le preguntó Kirishima pasándole un brazo por encima de los hombros.

-Un poco. ¿Y tú?

-Sí, yo también un poco.-¿Sabes? Creo que pediré que nos hagan un masaje, ¿te parece bien?

-Mmm... Sí, me parece bien.

Se sonrieron entre sí y juntos se dirigieron al dormitorio de Eijirou para prepararse para el masaje en cuestión.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!

El demonio que se enamoró de un humano.[Kiribaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora