El demonio que se enamoró de un humano.[Kiribaku]

Misión en el infierno.

***

Rápidamente, los jóvenes fueron al dormitorio de Kirishima para cambiarse a una ropa más adecuada que la del mundo humano,ya que para infiltrarse debían evitar atraer la atención.

—Ponte esta ropa, Katsuki.—Dijo entregándole una vestimenta tradicional que Bakugou había visto en ilustraciones mitológicas sobre demonios que anteriormente le habían enseñado en la escuela.

"La otra vez que viene no vi esta ropa, ¿por qué ahora nos tenemos que poner algo así."—Pensó Bakugou con la ropa en las manos.

—¿Sucede algo, Katsuki?

En ese instante, el híbrido de demonio salió de su ensoñación y le contestó:

—No es nada, sólo me preguntaba por qué razón nos tenemos que poner esta ropa.

—Oh, eso es debido a que iremos a una zona más tradicional a explorar antes de iniciar oficialmente mañana nuestra investigación. Así que es preferible que nos vistamos de esta manera.

—Está bien, lo entiendo.—Dijo comenzando a vestirse a la par que su novio.

Fueron rápidos al momento de ponerse la ropa y luego adquirieron su forma demoníaca. A continuación, Eijirou abrió un portal para traspasarlo.

Una vez que pasaron tras el portal, llegaron a la zona y Katsuki quedó impresionado.

"Es como estar en Japón durante la edad media. Aunque sin personas, claro."

—Katsuki, vamos. No te quedes ahí parado.

—Ah, sí. Voy.

Juntos iniciaron un recorrido por la zona sin levantar sospechas del motivo por el que se encontraban allí.

—¡Hijo de puta! ¡Devuélveme mi alma!—Le recriminó un demonio a otro.

—No, yo no hago devoluciones.—Si no has quedado satisfecho con el trato, te jodes.

—¡Esto no va a quedar así!

Entonces, el demonio enfurecido empezó a atacar a otro, iniciándose así una gran pelea.

"Será mejor que nos alejemos de aquí."—Pensó el rubio cenizo alejándose.

Eijirou hizo lo mismo y se adentraron aun más en la zona, cual poco a poco se volvía más hostil y peligrosa.

—¡Intrusos! ¡Este es nuestro territorio!

—¡Vamos a matarlos!

Varios demonios se lanzaron para atacarlos y no tuvieron otra alternativa que pelear.

"Mierda. No he podido entrenar mucho para perfeccionar mis poderes demoníacos pero no me quedaré de brazos cruzados."

El híbrido de demonio no dudó en contraatacar haciendo uso de sus garras mas esto no era suficiente.

"¡Katsuki!"—Pensó el príncipe demonio preocupado.

Iba a correr para ayudarlo pero, sin saber cómo, Bakugou descubrió que podía hacer explosiones con sus manos; defendiéndose así de los demonios que lo atacaban.

"¡Ese es mi Katsuki!"—Pensó orgulloso concentrándose de nuevo en su pelea.

Los dos pudieron vencer a los demonios y, aunque otros iban en camino, decidieron huir al verse superados en poder por ellos.

—Eso fue intenso. Has estado genial, mi Katsuki.—Dijo dándole un beso en la sien.

El rubio cenizo se giró y le respondió:

—Sí, eso estuvo bien. Ni siquiera sabía que podía hacer esto... ¿Cómo es posible?

—Mm... Tal vez se dio una condición o varias que antes no surgieron, ¿has notado algo diferente?

—Ahora que lo dices, en un momento de alta tensión, sentí mis manos sudar como nunca antes.

—Así que el detonante fue por un sudor especial. Interesante.—Luego nos informaremos más a fondo. Sigamos.

Katsuki asintió y continuaron su caminata.

***

Durante el tiempo en el que anduvieron por la zona, ellos pudieron ser testigos de algunos trapicheos, sin ser vistos obviamente, que se realizaban con las autorizaciones de paso al mundo humano.

"Hemos visto cuatro ventas ilegales de autorizaciones y solamente llevamos unos quince minutos aquí. Esto es grave."—Pensó Eijirou preocupado.

Se adentraron hasta el último rincón de la zona y, cuando ya sintieron que habían visto suficiente, el demonio consideró que era momento de volver al castillo.

—Es preocupante esto, tenemos que avisar a tus padres.

—Sí. Además, extraeré mis recuerdos de los momentos en los que he visto a esos demonios para que puedan ser identificados y se lo enviaré a mis padres.

Bakugou se sorprendió y le preguntó:

—¿Puedes hacer eso?

—Sí, todos los demonios podemos.—Seguramente tú también podrás hacerlo algún día. Yo te enseñaré.

—Vale. Cuando resolvamos esta mierda.

—Sí, cuando todo se calme.

Una vez más, el pelirrojo abrió un portal mágico para volver al castillo sin ser interceptados.

Extrajo sus recuerdos y se los entregó a sus padres. Después se dispuso a relajarse en el cuarto con su amado.

—¿Qué te ha parecido tu primera experiencia en una comunidad de demonios?—Le preguntó Eijirou en su forma humana y estando ya en sus aposentos con la compañía de su novio.

—La verdad es que me ha sorprendido la apariencia de algunos demonios. No son tan aterradores como imaginaba.—Tú en cambio sí lo eres. La primera vez que te vi con tu forma demoníaca me asusté un poco.

—¿Ah, sí?—Creía que te excitaba.

—Eso me pasó luego, cuando me fijé mejor y vi lo jodidamente sexy que estabas así.

El joven de dientes afiliados se mordió los labios sensualmente y le respondió:

—¿Eso quiere decir que te has excitado al verme hoy en mi forma demoníaca?

—Tal vez un poco. ¿Vas a hacer algo al respecto, Ei~?

—Obvio. Como buen novio que soy~

Eijirou no se demoró y comenzó a besarlo.

"Quiero coger."—Pensó Katsuki durante el beso mientras era tumbado en el suelo por su novio.

Los dos se estaban acariciando, tocando y marcándose mutuamente hasta que a Bakugou se le ocurrió una idea.

—Ei... Házmelo contra la pared.—Dijo con tono jadeante al separarse del beso.

Kirishima sonrió excitado y le contestó:

—Enseguida~

Acto seguido, levantó a Katsuki del suelo y éste se colocó como quiso contra la pared. Listo para ser preparado y penetrado.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!