44.2 ── Contraste

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❛ Si tuviera el coraje de pararme frente a ti,
¿Todo sería diferente ahora? ❜

⭐️ Capítulo largo ⭐️

⭐️ Capítulo largo ⭐️

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Parte 2.

——— SUNGHOON

Las risas y el ambiente de la feria resonaban en el aire, pero a mí me sonaban como un ruido lejano, casi molesto.

Chanmi estaba a mi lado, hablando sin parar sobre la última película que había visto o algún nuevo café que había descubierto, pero sus palabras se desvanecían en mi mente como el humo de una fogata: No tenía la energía para concentrarme en nada de lo que decía.

Mi atención estaba atrapada en otro lugar, o mejor dicho, en otras personas, ya que a pocos metros de distancia, entre la multitud, Nari y Niki caminaban juntos.

Vi cómo ella se reía de algo que él había dicho, y la forma en que sus ojos brillaban me hizo sentir un nudo en el estómago. Era una risa genuina, la clase de risa que hacía que su rostro se iluminara de una manera especial.

Las luces doradas que se reflejaban en el cabello de Nari la hacían parecer casi etérea, como si no perteneciera a este lugar, o mejor, como si no perteneciera a mi mundo. Niki estaba tan cerca de ella, lo suficiente como para que sus brazos se rozaran. Y cada vez que ella lo miraba, sentía una punzada en el pecho, como si alguien estuviera apretando un tornillo en mi corazón, dándole vueltas, un poco más con cada mirada que se intercambiaban.

—¿Te gustaría subir a la rueda de la fortuna? —la voz de Chanmi volvió a irrumpir en mis pensamientos. Me volví hacia ella, tratando de mantener una expresión neutral, pero era difícil cuando todo en mí se sentía al borde de estallar.

—Tal vez más tarde. —respondí, sin mucha convicción.

Chanmi me observó por un momento, como si intentara descifrar algo en mi expresión, pero finalmente solo asintió y sugirió que fuéramos a jugar en alguna caseta de tiro. No me importaba, podía haberme sugerido cualquier cosa que no requiriera hablar mucho y habría aceptado sin dudar. Pero incluso mientras caminábamos hacia la caseta, mi mente seguía regresando a la misma imagen: Nari y el otro, caminando juntos, riendo, compartiendo ese espacio que, en mi cabeza, se suponía que era nuestro.

Traté de no mirarlos conforme caminaba, de ignorar la forma en que su cercanía me hacía sentir como si el suelo bajo mis pies fuera inestable. Pero no importaba cuánto lo intentara, la imagen estaba grabada en mis retinas.

Mientras Chanmi intentaba derribar los blancos en la caseta, la miré de reojo: sabía que ella no era el problema. No era su culpa que mi mente estuviera en otro lugar, pero aún así, no podía evitar sentirme atrapado; como si estuviera viviendo una realidad que no quería, una en la que no podía hacer nada más que observar desde lejos mientras la persona que realmente me importaba estaba con alguien más.

Curious Around You ━━ Ni-ki & SunghoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora