Lucas sirvió la pasta en dos platos y se sentó frente a ti en la pequeña mesa de su comedor. La comida estaba sencilla pero deliciosa, y agradeciste poder centrarte en algo tan básico como comer. Lucas hablaba sin parar, llenando el espacio con anécdotas y comentarios ligeros que lograron sacarte algunas sonrisas.
- Entonces, te lo imaginas? Yo, intentando cantar con esa voz que ni en la ducha suena bien. - Lucas fingió una mueca de horror. - Todo el mundo mirando como si fuera una broma del destino.
- Seguro no es para tanto. - Te reíste, agitando el tenedor en su dirección. - Peor sería que te hubieras caído en el escenario.
- Toco madera. - Dijo, golpeando la mesa con los nudillos. - Ya bastante tengo con acordarme de no pisar los cables.
La conversación siguió fluyendo, y aunque no lo hubieras admitido en voz alta, estabas agradecida de haber venido. Te sentías un poco más ligera, como si la presencia de Lucas absorbiera parte de la pesadez que llevabas dentro.
Cuando terminasteis de cenar, él insistió en que no tocaras nada.
- Invitada especial no lava platos. Ve al sofá, relájate.
Te recostaste en el sofá mientras él recogía, y, por un momento, dejaste que tu mente vagara. Pensaste en Kiki y su reacción, en Ruslana... pero antes de que pudieras sumergirte demasiado en esos pensamientos, Lucas se dejó caer en el sillón frente a ti.
- Bueno, te sientes mejor? - preguntó con una sonrisa ladeada.
- Un poco, sí. - Admitiste con sinceridad. - Gracias por esto, Lucas.
- Siempre que lo necesites. Aunque no te acostumbres, eh? Porque no sé cocinar mucho más que pasta.
Ambos reísteis, y el ambiente volvió a relajarse.
- Sabes? Creo que deberíamos hacer esto más seguido. - Sugirió, jugueteando con un cojín. - Así, para asegurarnos de que no te hundes en tu propio drama.
- Mi drama? - preguntaste con una ceja levantada, aunque su tono ligero te sacó una sonrisa.
- Bueno, todos tenemos nuestros dramas. Pero lo importante es rodearse de gente que lo haga más llevadero, no?
Le miraste por un instante, agradeciendo en silencio su manera de ver las cosas. Lucas no juzgaba ni preguntaba demasiado, simplemente estaba ahí.
Al final, decidiste quedarte un rato más antes de volver a casa. Pero mientras te levantabas para despedirte, sentiste el peso de la realidad regresando. Fuera del pequeño refugio que Lucas te había ofrecido esa noche, la vida seguía igual de complicada.
Cuando llegaste a casa, Kiki estaba en el salón con los brazos cruzados, claramente esperándote.
- Lo has pasado bien con Lucas? - preguntó en un tono que mezclaba sarcasmo y reproche.
Suspiraste, quitándote el abrigo antes de responder.
- Kiki, no quiero discutir.
- No es discutir, Tn. Es que no entiendo qué estás haciendo. - Dijo, poniéndose en pie. - Intentas olvidarte de Ruslana saliendo con Lucas ahora?
- No estoy "saliendo" con Lucas. Solo fuimos a cenar.
- Ya, claro. - Su tono escéptico te hizo fruncir el ceño.
- Mira, no necesito justificarme. Estoy intentando estar bien, y Lucas me hizo sentir mejor. Fin de la historia.
Kiki te observó por un momento antes de suspirar y suavizar su expresión.
- Lo siento. Solo... no quiero que te hagas daño.
- No lo haré. - Le aseguraste, aunque no estabas tan segura de ello.

ESTÁS LEYENDO
RUSLANA Y TN OT2023 | LO MEJOR QUE ME HA PASADO NUNCA
FanfictionTn y Chiara son compañeras de piso después de que tn decidiera ir a Barcelona para estudiar psicología por llevarle la contraria a su padre, un abogado zaragozano de gran éxito.