RUSLANA Y TN OT2023 | LO MEJOR QUE ME HA PASADO NUNCA

concierto zgz pt 8 (X FIN se van de zgz)

El día siguiente llegó con el caos habitual que precedía a un concierto. El backstage estaba lleno de miembros del equipo corriendo de un lado a otro, cargando con cables, instrumentos y maquillaje. Tú estabas, como siempre, en medio de todo, asegurándote de que cada detalle estuviera perfecto.

Pasaste la tarde entre planchas, brochas y una montaña de prendas que debían estar listas a tiempo. Concentrarte en el trabajo te ayudaba a no pensar demasiado en lo ocurrido la noche anterior, pero no podías evitar buscar a Ruslana con la mirada cada vez que cruzabas una sala.

Finalmente, llegó la hora de que todos se prepararan para subir al escenario. Los camerinos estaban llenos de nervios, risas y los últimos ajustes. Antes de que el grupo saliera, decidiste acercarte a Ruslana. Estaba jugando con una guitarra, bastante distraída.

- Sigues enfadada conmigo? - preguntaste en un tono bajo, procurando que los demás no escucharan.

Ruslana levantó la mirada al escucharte. Sus ojos, que la noche anterior parecían fríos, ahora brillaban con algo más cálido. Negó con la cabeza lentamente, dejando la guitarra a un lado.

- No, no estoy enfadada - respondió con suavidad mientras se acercaba a ti y te rodeaba con los brazos. La calidez de su abrazo te hizo soltar un suspiro que ni sabías que estabas conteniendo - Odio estar enfadada contigo. No soy capaz de estarlo. Pero... no me gusta la idea de que haya otra persona contigo. Me pone de los nervios.

Te quedaste unos segundos en silencio, sintiendo cómo el nudo en tu pecho empezaba a deshacerse. La rodeaste con tus brazos, abrazándola con fuerza, y apoyaste la cabeza en su hombro.

- No tienes por qué preocuparte - le dijiste, separándote un poco para mirarla a los ojos. Luego, le diste un beso suave, apenas un roce que era más una promesa que una caricia - No me interesa nadie más. Voy a pasar de cualquier otra persona sea quien sea.

Ruslana te miró con una mezcla de alivio y ternura.

- Ve a romperla ahí fuera - dijiste, sonriendo.

- Solo si me prometes que estarás ahí viéndome.

- Siempre. Lo sabes.

Al otro lado del camerino, Salma charlaba con Denna y Violeta, aunque su atención estaba fija en un punto más allá de la conversación: tú y Ruslana. Cada beso, cada roce, cada sonrisa que compartías con Rus parecía aumentar la tensión en su mandíbula. Cuando Ruslana te acarició el cabello mientras te susurraba algo que te hizo reír, Salma dejó escapar un suspiro cargado de amargura.

- Quién fuera Ruslana ahora mismo - comentó en voz baja, aunque lo suficientemente alto para que Denna y Violeta la escucharan.

Ambas se giraron hacia ella, intercambiando miradas rápidas de preocupación.

- Salma, relájate. No deberías meterte en esto - dijo Violeta, cruzándose de brazos como si quisiera ponerle un límite desde el primer momento.

- Tranquilas, no voy a hacer que Tn le sea infiel a Ruslana - respondió Salma con un tono que intentaba ser casual, aunque no lo logró del todo. Luego, levantó la barbilla con aire de superioridad - Pero sé que Tn acabará dejándola por mí algún día.

Denna parpadeó, incrédula, antes de soltar una risa breve y seca.

- De qué conoces tú a Tn para que digas eso?

Salma se encogió de hombros, ignorando el tono crítico de Denna.

- No la conozco... todavía. Pero el otro día la vi arreglando un vestido y maquillando a alguien, y llevaba una ropa que le quedaba genial. Un pantalón ajustado, un top negro... Dios, qué cuerpazo tiene. Fue imposible no fijarme.