-¿Olivia? ¿Puedo pasar?
-Sí. –Dije sacando la cabeza de debajo de la almohada. –¿Ya se fue la fiera de tu novia?
-No, venía a eso. –Abrió la puerta y por ella se asomó Katherine para ponerse a su lado dándole la mano.
-Yo... Creo que te debo una disculpa, Olivia. Si te digo la verdad, no me acordaba de ti y...
-Sí, claro. –Me di la vuelta para darles la espalda. –Si tanto te importa mi perdón, estás perdonada.
-¡Gracias! –Rodé los ojos al oírla emocionada.
-¿Ahora pueden dejarme sola? –Unos pasos se escucharon alejarse antes de que la puerta se cerrara haciéndome suspirar. –Fue un error quedarme...
-No lo fue. –Di un brinco al oír su voz.
-¿Qué haces aquí?
-No fue un error el que te quedaras, Livvy. Estás pagándome la habitación.
-Pero nunca debí quedarme en tu habitación y menos en la misma cama.
-Yo no sabía que Kate iba a venir hoy. Quería darme una sorpresa.
-Y la sorpresa se la llevó ella. –Lo miré mientras que él se sentaba en mi cama. –Lo mejor es que me vaya, Dyl...
-No, no vas a irte de esta casa, Olivia. Dijimos que te irías cuando Elyssa llegara.
-Pero Katherine...
-Sabes que Katherine no vive aquí.
-Pero para ella va a ser incómodo...
-Solo somos amigos, Liv. No es como si nos hayamos acostado.
-Lo sé, pero quizás ella no...
-No sigas pensando en eso ¿sí? Ésta es mi casa y yo hago con ella lo que quiera. –Me sonrió abiertamente. –Sonríe.
-Oh, no. Ni se te ocurra... –Dije viendo cuáles eran sus claras intenciones.
-Se lo prometí a la asistenta social. –Sonrió traviesamente antes de empezar a hacerme cosquillas.
-¡Dylan! –Empecé a removerme mientras reía sin parar. –¡Ya estoy sonriendo!
-Así estás mejor. –Ahora el que sonrió fue él para dejar un beso en mi mejilla antes de levantarse de la cama y salir de la habitación.
-No me mires así. –Dije girándome a Charlotte que me miraba como si quisiera decirme algo inapropiado. –Creo que Dylan va a ser un gran padre para Elyssa.
☼☼☼
-No seas mala, Ely. Deja a Charlotte.
-¡Pero mira como intenta salir! –La niña aplaudió mientras seguía viendo como la gata intentaba salir de la bolsa de plástico.
-No está bien, Ely. Puede asfixiarse.
-Está bien, mami. –Sacó a Charlotte de la bolsa y la gata se sacudió algo despeinada. –Ya no te lo haré más, Charl.
-Uh, ese gato pulgoso...
Dios, otra vez ese sueño. Ni siquiera tenemos aún a la bebé y ya estoy imaginando como será de mayor...
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¿Me adoptas?
Fiction générale¿Qué pasaría si una madrugada te encontraras con un bebé en la calle? ¿Y si ese bebé tiene una nota en la cual dice "adóptame"? Olivia White era una chica de veintitrés años que adoraba a los animales y estaba totalmente en contra del maltrato anim...