~25 DE JULIO~
-Dios, ¡esto no me sale bien!
-Si no te quejaras tanto, podrías hacerlo mejor...
-¿Perdón? ¿Insinúas que...
-Ay, por favor. No discutáis ahora. –Dijo Sofía con pesadez mientras que Amelia me miraba ofendida. –Me hacéis recordar a cuando Dylan trabajaba aquí y siempre peleaba con Olivia.
-¡Pues que no me llame gandula!
-Pero si yo no te he llamado así... –Dije mirándola incrédula. ¿Pero qué decía esta chica poniendo palabras en mi boca que yo no había dicho?
-¿Es que nunca os vais a llevar bien? –Tanto Amelia como yo miramos mal a Sofía. –¡Guau, vale! Ya no digo nada más... –Volví mi vista a la pantalla del ordenador ignorándolas a ambas. Vaya, ya me había puesto de mal humor...
De pronto, mi móvil comenzó a sonar sobre la mesa haciéndome fruncir el ceño. ¿Y esto ahora?
-No puedes usar el móvil en horario de trabajo... –Canturreó Amelia haciéndome apretar los dientes antes de que respondiera a la llamada ignorándola.
-¿Diga?
-¿Olivia? Soy Naylín, la profesora de Elyssa.
-¡Ah, sí! Hola, Naylín. –Respondí recordando a la profesora de la escuela de verano. –¿Le pasó algo a Elyssa?
-No quiero asustarte, pero la niña se cayó en el recreo y dice que le duele los dedos. Probablemente se los haya doblado a la hora de caer al suelo.
-¡Oh! Voy para allá enseguida.
-Está bien. Aquí la esperamos.
-Sí, gracias. –Colgué para ponerme de pie rápidamente.
-¿Qué pasa, Olivia?
-Elyssa se cayó en el patio y tengo que llevarla a urgencias. –Guardé algunas cosas en mi bolso antes de colgármelo al hombro. –¿Puedes decirle a Dylan que tuve que irme? Y que no se preocupe por Elyssa, que lo llamaré en cuanto esté en el hospital.
-Por supuesto. Ten cuidado. –Dijo Sofía antes de que me dirigiera hacia el ascensor a toda prisa. Espero que no fuera algo más serio que un esguince...
☼☼☼
-Puede tomarse medio analgésico si le sigue doliendo dentro de unas horas.
-¿Y ya está? –Pregunté mirando al doctor.
-Sí, pide cita con su pediatra o doctor de cabecera para dentro de dos semanas y ya le dirán si tiene los deditos curados. –Dijo el doctor sonriéndole a Elyssa. –Bueno, ahora a cuidarse, jovencita. –El doctor le entregó unos cuantos caramelos antes de despedirnos para dirigirnos al coche donde mi móvil comenzó a sonar.
-Mira, Ely. Cógelo tú, es papá. –Le pasé el móvil antes de quitarle el seguro al coche para abrirle la puerta a la niña y ayudarla a ponerse el cinturón de seguridad. Rodeé el coche al terminar para subirme al asiento del piloto mientras que oía Ely.
ESTÁS LEYENDO
¿Me adoptas?
General Fiction¿Qué pasaría si una madrugada te encontraras con un bebé en la calle? ¿Y si ese bebé tiene una nota en la cual dice "adóptame"? Olivia White era una chica de veintitrés años que adoraba a los animales y estaba totalmente en contra del maltrato anim...