Identidad Ross Lynch [TERMINADA]

Capítulo 5. Solo confio en ti

-¿Qué? -Preguntó Brayan asombrado-, ¿Estás loco? Dime qué es eso Ross, dime que te volviste loco.

-¿Loco? ¿Por qué? -Preguntó Ross confundido.

-¿Cómo qué por qué? Ross, ¿Vengar a tus padres? Eso es la peor decisión que has podido tomar en tu vida, ¿Ser un detective? Tú no sabes nada acerca de eso -afirmó Brayan. Era cierto, Ross nunca había aprendido nada de sus padres, esa carrera de investigar a otros y aprender a pelear, no le llamaba la atención. Pero ahora, era distinto, y él y Brayan lo sabían, todo era distinto.

-Brayan, mis padres se merecen que vengue su muerte. Esto no puede quedar impune. Los vengaré, vengaré a mis padres, acabaré con sus enemigos.

-¿Qué? Y luego dice que no estás loco. Mira Ross, tú no sabes quienes son esas personas, pero si sabes que pueden acabar contigo con solo abrir la boca, eres un chico, solo eso. Además, ¿Acaso no viste como dejaron a tus padres? -Preguntó Brayan. Ross sintió como si le hubieran lanzado una flecha al corazón. Bajó la cabeza a modo de recordarlo.

-Claro que lo vi -levantó el rostro y una mirada de odio se posó en sus ojos -. Lo vi, y mi mente lo tiene a cada segundo, me lo recuerda siempre, siempre lo tengo presente -dijo Ross.

-Brayan colocó una mirada de disculpa-. Siento haberte dicho eso Ross, perdóname, pero no quiero que mueras, quiero que sigas vivo. Y si te digo todo esto, es porque no quiero que acabes como tus padres o tal vez peor.

-Lo sé Brayan, pero eso no pasará.

-¿Cómo estás seguro de eso? -Preguntó Brayan.

-No lo sé -respondió Ross, y no lo sabía. Suponía muchas cosas y entre ellas, era el hecho de seguir viviendo para cumplir la nueva meta que se proponía-. No sé como estoy seguro, pero lo estoy y eso me basta.

-No importa que intente detenerte, ¿verdad? Aún así, irás y vengarás a tus padres, ¿cierto? -Ross sonrió ante sus preguntas. Se levantó de la cama y encendió la luz. Ahora los dos amigos se miraban frente a frente.

-Así es -respondió Ross, volviéndose a sentar-. Brayan, no quiero que veas esto como un capricho mío, ¿sí? Quiero que lo veas como el chico que intentó honrar la memoria de tus padres. La memoria de unos seres que ayudaron a este maldito país de mierda y que esa gente, no hizo nada a pesar de todo lo que ellos hicieron por esas personas. Ni siquiera corroboraron a ver si en verdad el motor de ese avión había explotado por "accidente". Y yo, Ross Lynch quise hacerme cargo de todo porque si no, esto se quedaría así, y tal vez hoy, mañana o pasado mañana, o en un mes, lo que sea, tu amigo, el rubio este muerto. Quiero que lo veas así -dijo Ross y Brayan guardó silencio. Todo lo que decía Ross era cierto, no podía negarlo, pero tampoco podía negar que la idea de su amigo era totalmente descabellada, aunque igual, lo apoyaría en todo.

-Está bien Ross -dijo Brayan-, te apoyo, te apoyo en todo lo que dices y aunque no quiera, también te apoyaré en tu loca idea, ¿Contento?

-Sabía que aceptarías -dijo Ross y lo abrazó. Brayan le correspondió.

-Quiero que me ayudes Brayan. Recuerda, eres la única persona en la que confío, solo confío en ti, y en más nadie.

-Bien, ¿Y en qué puedo ayudarte? -Preguntó.

-Hay que ir a mi casa -dijo Ross-. Ahí verás.

-Pero Ross, estamos en tu casa -dijo Brayan.

-Por Dios Brayan, no seas tonto -dijo Ross riendo por el comentario de su amigo-. ¿Sabes? A veces pienso que estás algo retrasadito, pero prefiero no decir nada.

-¡Ross! -dijo Brayan y el rubio sonrió a modo de disculpa.

-Lo siento. Hay que ir a mi otra casa.