Overcome. JR y tú

Capítulo 8

—Entonces, ¿Te irás a Seúl?— le preguntó su mamá a _____.
—Sí, mamá. Me han ofrecido el trabajo allá, y me pagaran bien— respondió sonriendo—, les mandaré dinero. Cuando tenga suficiente para comprar una casa, podremos vivir juntos de nuevo— sonrió—. Pero ahora, me han ofrecido sólo un pequeño departamento y creo que ya es mucho, ¿no creen?
—Ay mi niña, te extrañaremos mucho— dijo con una sonrisa pero con la mirada triste.
—No te pongas así, mamá, tú sabes que tan difícil es conseguir trabajo recién salido de la Universidad y más siendo extranjero.
—Hija— hablo su papá, ella lo miro fijamente—, enorgullecenos, siempre lo haz hecho y siempre lo estaremos.
—Sí— asintió sonriendo—. Los amo.
Se abrazaron con fuerzas, como si fuera el último. Aunque realmente lo era. Difícilmente podrían volver a verse.
Le dolía separarse de sus papás, ellos eran las únicas personas que la han cuidado y apoyado siempre, incondicionalmente.
Sería un difícil comienzo, de eso estaba segura.
Los miro con una sonrisa por última vez. Tomó su maleta y salió por la puerta de su casa, suspiro y se giró para ver a sus papás, levantó la mano despidiéndose, ellos repitieron la acción.
Luego fue hasta el taxi, el conductor metió su maleta en la parte trasera y ______ se subió.
El conductor tomó su lugar y manejo hasta el aeropuerto.
—¿Cuánto va a ser?— le preguntó cuando llegaron.
—Nada, señorita. El hospital lo ha pagado— le explicó con una sonrisa.
Le sorprendió que el Hospital haya pagado su transporte. Era increíble.
Se bajó del taxi, saco su maleta y entró al aeropuerto.
Abordó el avión.
No queria irse. No queria dejar lo único que conocía, no queria abandonar su hogar. Pero una oportunidad como esa no volvería a repetirse.
Trató de convencerse de que todo estaría bien, para tranquilizarse.
Conectó sus auriculares al teléfono y se puso a escuchar musica durante el vuelo.

Despertó con el movimiento del avión, ya estaban aterrizando. Ella miró por la ventana. Confirmó que ya no estaba en su casa.
Bajo con los demás pasajeros del avión y fue directo a buscar su maleta. Al tenerla, camino mirando a todas las personas, era obvio que nadie estaba esperando por ella. Se encogió de hombros y camino para salir del aeropuerto.
Al pasear su mirada mientras caminaba observó a alguien con un cartel en las manos, en el estaba escrito su nombre.
Camino hacia la persona que lo sostenía.
El chico pronunció su nombre preguntándole.
—Sí, soy yo— respondió algo confundida.
—Oh, que bien— suspiro bajando el cartel—, por un momento crei que no llegarías o que te habías ido— repuso riendo. ______ sonrió tímidamente, aunque la risa de aquel chico era muy contagiosa—. Oh, que distraído, mi nombre es Dongwoo.
—¿Dongwoo? ¿Cómo el de Infinite?— preguntó ______ con brillo en sus ojos, incluso ese chico tenía un leve parecido al Idol.
—Sí— respondió—. No eres la primera en decírmelo. Y por lo que veo te gusta Infinite, ¿no?
—¡Sí!— dijo sin medir su emoción.
—Tranquila— dijo riéndose—. Tal vez los veas.
—¿En serio?
Él asintió.
—Es Seúl, ellos siempre estan por aqui— dijo con una sonrisa.
—Ojalá pueda verlos algun día.
—Ya verás— respondió sonriendo—. Bueno, se supone que debo de llevarte a tu departamento— rio.
—Se supone— observó bromeando.
—Vamos, niña— le dijo despeinandola cariñosamente. Por un momento vio a Jong en el lugar de Dongwoo. _____ dirigio su mirada al suelo sumida en su ilusión. El nudo en su garganta volvió y sus ojos se cristalizaron.
—¿_____?— preguntó Dongwoo mirándola— Lo siento, perdoname, no te dire niña o te despeinare, lo siento, no era mi intención.
—No te preocupes, no es tu culpa— respondio pasando sus dedos por sus ojos para ahuyentar las lágrimas—. Sólo recordé algo que me duele.
—No estes triste, ¿Quieres hablarlo?
—No, gracias— dijo sonriendo.
—No insistire, por hoy. Pero, ¿sabes? Te acabo de conocer y me agradas. Sólo quiero que sepas que puedes confiar en mí.
—Gracias Dongwoo.
—De nada.

Después la llevo hasta su auto, él metió la maleta en la parte de atrás del auto, despues le indicó a _______ que subiera del lado del copiloto, le abrió la puerta y cuando estuvo dentro la cerró.
Dongwoo rodeó el auto y subió del lado del conductor. Mientras manejaba puso la radio y hablaron para conocerse mejor.
Cuando llegaron, la ayudó a subir su maleta.
—Si necesitas algo estaré en el departamento de en frente— le dijo en la puerta de su casa—. Por cierto, seré como tu "chofer". Aunque tambien trabajaré contigo.
—¿En serio?
—Sí. Sólo que tú, si no me equivoco, estarás en los consultorios de dermatología, y yo estare en pediatría.
—¿Eres pediatra?
—Sí. Amo a los niños, y me gusta trabajar con ellos— respondió sonriendo. ______ le sonrió de igual manera—. Pero ya te dejo para que descanses, mañana inicias, ¿no?
—Sí.
—Vendré a despertarte para irnos— le avisó—. Buenas noches, ______.
—Buenas noches, Dongwoo.