Beautiful Pain

Extra 1

El nacimiento de los mellizos

[Kelly]

Él está aprendiendo a ser un buen padre, sé que quiere darle todo el amor, comprensión y tiempo que le negó su propio padre durante toda su vida. Sé que aún conserva cicatrices de su pasado, esas heridas jamás se irán, pero aun así él está dando lo mejor para salir adelante y cambiar. Para mí Keith es perfecto, lo amo con todos sus defectos incluidos, mi vida sin él o mis hijos no tendría ningún sentido.

Él siempre logra que mis preocupaciones e inseguridades no tengan sentido.

—Pedacito de cielo, ¿En qué piensas tanto?—la voz de Keith me hizo volver a la realidad.

—¿Cuántas veces te he dicho que no entres por la maldita ventana de la habitación?—me queje llevándome la mano al pecho—¿No puedes entrar por la puerta, como una persona normal?

—Sabes que lo normal aburre, y me gusta entrar por la ventana porque me trae muy buenos recuerdos—sonrió—lo siento si te asuste—beso mi mejilla y se sentó a mi lado en la cama.

—Estaba pensando en lo mucho que mi vida cambió desde que te conocí.

—¿Así?, Estabas pensando en mí mientras no estaba, qué tierna eres mi amor.

—¿Alguna vez has pensado como hubiera sido nuestra vida si no nos hubiéramos conocido?

—Tú serias una reconocida y famosa doctora, soltera y sin hijos, mientras que yo estaría preso, muerto, o siendo infeliz bajo el control de mi padre.

—¿Por qué piensas que estaría soltera y sin hijos—fruncí el ceño.

—Porque seguirías amando a tu mejor amigo, lo que no te hubiera permitido disfrutar de tu vida, hubieras sufrido viendo como se casaba con otra y formaba una familia. Además, tu trauma con los hombres no te hubiera permitido avanzar.

—Tienes razón, es una posibilidad, ya que siempre fui demasiado cobarde para confesarme, y ese error que casi me cuesta la vida llamado Peter, pero al menos sería famosa y millonaria, ¿Tan miserable hubiera sido tu vida si nunca hubieras enfrentado a tu padre?

—Si te soy sincero, sí, porque vivía en una espantosa pesadilla antes de conocerte, no tienes idea de cómo era vivir bajo el control de mi padre, si no te hubiera conocido estaría casado con alguna mujer que él hubiera elegido, viviendo una vida infeliz que nunca quise, sería igual o peor que el como líder.

—Tú nunca serás como tu padre, tú eres mejor, nunca serás como él, sé que tu vida fue difícil, pero ahora solo tenemos que pensar en nuestro futuro juntos, tenemos una hermosa familia, tú serás siempre un buen padre y un excelente esposo, y el mejor líder que la manada de lobos grises puede tener en toda la historia de Greenwich.

—Irónicamente, mi vida peligra más en tus manos, que en la de mis enemigos, porque eres la única que puede lastimarme, la única que puede matarme, sin ti pedacito de cielo, no hay nada, no tengo ninguna razón para seguir existiendo, siempre voy a estar agradecido con la diosa luna por ponerte en mi camino.

—Te amo, nunca más vas a estar solo, jamás permitir que vuelvas a caer, yo también estoy muy agradecida de haberte conocido.

—Yo te amo mucho más pedacito de cielo, eres todo lo que está bien para mí—me beso—¿Cómo se han portado nuestros hijos hoy?—Coloco su gran mano sobre mi vientre de nueve meses.

—Bien, ya no puedo hacer nada sin cansarme, los días de espera se me han hecho eternos— suspiré—¿Cómo estuvo el entrenamiento de hoy?

—Bastante bien, los cachorros jóvenes de la manada serán unos excelentes guerreros cuando sean grandes, Kailan tiene mucho potencial, va a ser mucho más fuerte que yo, será el siguiente líder, así que debe aprender bien, hoy logro darme un golpe en el entrenamiento, me sentí muy orgulloso de mi cachorro—sonrió.

Los ojos se le iluminaron al hablar de nuestro hijo, y pude notar claramente lo orgulloso que se siente como padre.

—Supongo que mi hijo no sale herido en cada entrenamiento, ¿Verdad?—lo mire sería.

—Jamás permitiría que se hiciera daño, y él no se deja lastimar por otros lobos, no te preocupes, todo está bien, es parte de su crecimiento como lobo, se convertirá en un buen alfa en el futuro—me besa.

Mi esposo se recuesta a mi lado en la cama, me abraza por la cintura y coloca sus manos alrededor de mi vientre.

—Kailan será un mejor líder que yo, porque él jamás será como su padre, crecerá en una buena familia y tendrá a sus dos padres, ninguno de nuestros hijos hará las mismas cosas que yo, porque ellos no van a sufrir.

Se me rompe el corazón cuando Keith dice cosas como estas, es decir, se nota demasiado todo lo que sufrió cuando era un niño, solamente me dan ganas de cuidarlo y hacerlo feliz, para borrar toda la amargura y dolor de su pasado.

—No, ni Kailan, ni los mellizos harán las mismas cosas que tú, porque ellos van a crecer con mucho amor, y nosotros siempre estaremos con ellos para apoyarlos, nuestros hijos no serán como nosotros Keith, sus padres si van a estar presentes en su vida y no nos vamos a perder ni un solo segundo de su crecimiento.

—Sabes que como padres somos un desastre¿No?—él suelta una carcajada.

—Bueno, de los desastres se aprende, ¿No? ¿Crees que fue fácil cuidar a Kailan sola?, pues no, ese niño resultó ser peor que tú—me reí también—Estamos haciendo lo mejor que podemos, y lo estamos haciendo juntos es lo que importa, nadie nace siendo padre, es algo que debemos aprender con el tiempo—lo bese.