♡Capítulo 21♡

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.CAPITULO 21.


Jesica: Sí, soy yo.
Bill: ¿Qué...
Jesica: Bill, por favor, no me cuelgues.
Bill: ¿Qué quieres?
Jesica: Tengo miedo. Ayúdame, por favor.
Bill: ¿En serio fui al primero en el que pensaste para ayudarte?
Jesica: Escucha, estoy en problemas...
Bill: ¿Qué tipo...? ¡¿Qué quieres que yo haga?!
Jesica: Solo... Solo que vengas por mí.
Bill: ¡¿Qué?! ¡¿Por qué?!
Jesica: Estoy en un callejón cerca de tu edificio, hay... Hay unos tipos armados que me siguen hace dos cuadras... Tengo miedo...
Bill: No, ¿Por qué yo?
Jesica: Porque te necesito y eres lo único que me queda aquí.
Bill: No, Jesica, ni siquiera yo.
Jesica: Lo sé. Por favor, solo ven por mí.
Bill: No. Olvídalo.
Jesica: ¡Por favor!
Bill: No, llama a alguien más.
Jesica: ¿Tienes el corazón para colgar el teléfono y no ayudarme?
Bill:.. Maldita sea.
Jesica: No haré nada, te lo juro. Solo quiero que me ayudes.
Bill(suspirando): ¿Dónde exactamente?...
~*~
Justo después de que la misma Jesica apareciera y lo volviera a llamar. Le dijo la dirección exacta en donde se encontraba.
Bill condujo veloz hacía ella. Estaba nervioso ¿Cómo sería volver a verla? No confiaba plenamente en que no intentaría nada.
Al llegar al lugar, apago el auto, todo estaba muy oscuro como para reconocer a algo o alguien. Bill entrecerró los ojos mientras abría la puerta del auto y salía de este. Encendió las luces delanteras, aun sin salirse por completo y fijo u mirada al frente; allí estaba ella.
Su largo cabello rubio y su casi exagerado maquillaje. Se acercó sigilosa a Bill. El la miro por segundos, después, desvió la mirada a la izquierda.
Jesica(bajo): Gracias por venir.
Bill: Sube al auto.
Esta obedeció y subió. Encendió el auto y volvieron a la carretera.
Bill: ¿A dónde quieres que te lleve?
Jesica: Pensaba pedirte que me dejaras pasar la noche en tu casa...
Bill la miro con el ceño fruncido. Pensó en lo cínico que era pedirle eso.
Jesica(riendo): Solo bromeaba, caray. No tienes por qué estar tan molesto.
Bill alzo las cejas y volvió su mirada al frente.
Bill: ¿A no?
Jesica: Escucha, lo que pasó ya es historia. Sucedió tal vez porque tenía que suceder, no volverá a pasar.
Bill: Bien, porque esto solo es un favor.
Jesica: Y te lo agradezco mucho, pero no quiero estar mal contigo. Vamos, seamos adultos.
Bill: ¿Desde cuando eres adulta?
Jesica bufo.
Jesica: ¿Lo ves? ¿Ves cómo actúas de ridículo? Mírame al hablarme.
Lo tomo de la barbilla y lo hizo voltear completamente a mirarla, perdiendo de vista la carretera.
Compartieron miradas por casi 5 segundos, no falto mucho... Jesica se abalanzo hacia él o sus labios hacía los de Bill.
Lo beso, Bill frunció el ceño, soltó el volante y la tomo de la barbilla al igual, solo que el hizo que se separaran.
Bill: ¡Jesica, mierda!
Jesica: Bill, es que...
Bill: ¡Nada, no me importa! ¡No quiero volver a hacer algo así, déjalo ya, carajo!
Jesica: ¡BILL VAMOS A...!
No la dejo terminar cuando el sintió que sus oídos se tapaban gracia a un fuerte claxon que sonó. En menos de pocos segundos, sucedió y lo único que Bill pudo ver fue las luces de un tráiler pasar e encandilar su mirada...
-Tiempo después con (Tu nombre)-
Recién iba amaneciendo en Alemania, el día pintaba un poco soleado y nublado, algo de los dos. Parecía agradable.
Ayudaba a Fátima a servir el desayuno, mientras Georg y Will miraban la televisión sentados en esta.
Georg: ¿Cómo amaneciste, (Tu nombre)?
Tu: Estoy bien, gracias. (Sonrisa)
Fátima: ¿Tienes ya la fecha para regresar a L.A?
Tu: Pues no, aun no, pero espero que sea en estos días.
Will: ¡Si, que sea pronto!
Fátima: Hum, parece que extraña mucho a su papá.
Tu: Demasiado.
Georg: Pero, ¿Volverán, no?
Tu: No quiero hablar de eso. Mejor, vamos a desayunar.
Una vez que Fátima y (Tu nombre) terminaron de poner toda la mesa y servir la comida, ellas mismas tomaron un asiento y todos comenzaron a comer, tranquilamente.
Después de unos minutos, una llamada interrumpió el desayuno de (Tu nombre).
Se levantó de la mesa, y se alejó unos pasos, contestando. No se fijó de quien era.
-Conversación-
Tu: ¿Hola?
Xx: (Tu nombre), es Tom.
Tu: Ah, ¿Que sucede, Tom?
Tom: Antes de decírtelo tengo que hacerte saber que todo va bien y no tienes que preocuparte mucho...
Tu: ¿Qué...?
Tom: Y, que nadie más escuche.
Tu: Nadie más lo hace, Tom. ¿Qué sucede? Me estas espantando.
Tom: Bill tuvo un accidente.
-Ella sintió como su corazón se detenía por un tiempo-
Tom: (Tu nombre), está bien. Ahora está siendo atendido, no sabemos nada aun pero no te preocupes, te mantendré informada de todo, lo prometo.
Tu: ¿Cu... Cuando sucedió, Tom? ¿Cómo? ¿Está bien?
Tom: Fue ayer, un tráiler lo choco. Tengo que ser sincero y me asusta pero cuando lo trajeron, no se veía nada bien.
Tu: Voy a tomar un vuelo ahora mismo.
Tom: No, (Tu nombre), no tienes que hacerlo. Tranquilízate, te mantendremos informada.
Tu: No, voy a regresar. Gracias... Por llamarme.
Tom: (Tu nombre)...
-Fin de conversación-
Tomo el teléfono y lo mantuvo en manos. Paso saliva, su corazón había pasado de casi dejar de latir a latir muy veloz. Ese nudo tan común se volvió a formar en su garganta, y sus ojos se llenaron de lágrimas.
Tomo un bocado de aire y lo dejo escapar antes de voltear.
Todos la miraron, intento actuar de lo más normal.
Georg: ¿Sucede algo? ¿Quién era?
Tu: Ah... Era Tiff, solo para... Saludar. Eh, tío, ¿Puedo... Hablarte en privado?
El asintió, se levantó de la mesa y se acercó a ella. Los dos salieron de la cocina.
Georg: ¿Todo bien?... Demonios, te ves más pálida de lo normal, (Tu nombre).
Tu: Bill tuvo un accidente.
Abrió los ojos de par en par.
Georg: Vaya, ¿Como esta?
Tu(negando): No lo saben aún. Tengo que regresar ahora mismo.
Georg: Tranquila.
Tomo sus hombros.
Georg: Todo va a estar bien.
Tu: Tal vez pero tengo que hacerlo. Voy a comprar dos boletos para un vuelo a L.A lo más pronto posible.
Georg: ¿Llevaras a Will? ¿No crees que es un poco intenso para él?
Tu: ¿Qué le voy a decir? No puedo dejarlo. Tiene que saberlo.
Georg: Podría ocultárselo por un tiempo.
Tu: Bill se no se veía nada bien. El sol no se puede tapar con un dedo, él tiene que saberlo. Se lo diré en cuanto estemos allá.
Georg suspiro.
Georg: No me gustaría que viajara así, (Tu nombre)...
Tu: Es Bill, Georg.
Georg: Lo sé, sé que es Bill. Te entiendo... Iré con Fátima a comprar los boletos. Mientras tanto, intenta explicarle algo a Will y empaquen.
Tu: Gracias, tío.
Él le dio un tierno abrazo y un beso en la mejilla.
Los dos regresaron de vuelta a la cocina.
Georg: Fáti, cariño. ¿Me acompañas?
Fátima: ¿A dónde, amor?
Georg: Ven, te necesito.
Fátima: Esta bien.
Se marcharon. (Tu nombre) se acercó a Will y se puso de cuclillas frente a él.
Tu: Amor, vamos a regresar a L.A ahora mismo.
Will: ¡¿De verdad?!
Tu: Sí, ve anda a hacer tus maletas. Hablaremos en el vuelo.
Will no lo pensó dos veces, subió e inicio sus maletas con una inmensa sonrisa.
(Tu nombre) hizo lo mismo, solo que ella estaba muy preocupada.
Al cabo de casi una hora, Georg y Fátima llegaron con los boletos en manos.
Georg: El siguiente vuelo es en una hora.
Se acercó y le entrego a (Tu nombre) los boletos.
Tu: Eso es mucho, pero está bien. Gracias, a los dos.
Fátima se acercó a ella y le rodeo los hombros.
Fátima: Geo me dijo la razón. No te preocupes, cariño. Todo saldrá bien, ya veras.
Tu: Eso espero de verdad.

Después de esperar el tiempo acordado, Will y (Tu nombre) ya se habían despedido de Fátima y Georg. En ese momento, ya se encontraban en el avión de vuelta a L.A.
(Tu nombre) no podía dejar de pensar en lo que estaba sucediendo, cada minuto revisaba su teléfono, esperando noticias de parte de Tom.
Por poco olvidaba que le tenía que decir a Will. Lo miro de reojo en el asiento justo a su lado, en la ventanilla.
Tenía un gesto de emoción, prefirió no decirle nada. Era cierto que el sol no se tapaba con un solo dedo pero podía enterarse en cuanto llegarán.

Justo después de unas largas horas de viaje, por fin habían llegado. Era tarde, el sol ya se había ocultado, y casi oscurecía, no faltaba mucho.
Al pisar dentro del aeropuerto con sus maletas, (Tu nombre) recibió una llamada. Dejo todo su equipaje y tomo a Will de la mano. Era Tom, en seguida respondió.
-Conversación-
Tu: Tom, ¿Qué pasa?
Tom: Hay noticias... ¿Dónde estás?
-Se paralizo por unos segundos-...  

EDITANDO | Sexo, Pudor y Lagrimas (Bill Kaulitz y Tú).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora