Capitulo 23

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¿Qué mierda invento? No soy buena mintiendo pero últimamente lo he hecho y al parecer Noah se lo ha creído. Él confía ciegamente en mí y yo lo traiciono de la peor manera.
-¿Qué pasa con el viaje? -pregunta confundido.
-Es que... -alargo las palabras para no sonar nerviosa pero es inútil.
-No me digas que ya no quieres ir a España. Cariño, hemos planeado este viaje desde que éramos novios. ¿ A qué lugar quieres ir ahora? -el tono de Noah me da ganas de llorar, este viaje ha sido un sueño de ambos pero ahora solo es de él.
-No, no es eso. -digo rápidamente para que no piense que quiero viajar a otro lado, es lo que menos quiero ahora-. Lo qué pasa es que tengo demasiado trabajo en la empresa y no quiero dejar mis labores con nadie, es mi trabajo y tengo que hacerlo yo misma. -digo nerviosa pero convincente.
-Eso no decías hace un tiempo -dice Noah con tono decepcionado.- Dime la verdad Allie, por qué no quieres ir conmigo a España, si a ti te gusta viajar tanto como a mí.
-No lo sé. -digo mirando abajo, incapaz de mirarlo a los ojos-. De verdad lo siento mucho Noah, pero no quiero ir a España. -estoy a punto de llorar, el rostro de Noah me da mucha pena y a la vez rabia, rabia por qué soy yo la culpable de su tristeza; pero es lo mejor, voy a hacerle daño a Noah y quiero evitarlo para que no sufra como lo está haciendo ahora.
-No lo entiendo Allie, antes contabas los días para irnos a España juntos, conocer Barcelona era nuestro sueño pero ahora estás renunciando sin saber por qué. -dice Noah desesperado y yo ya no puedo contener las lágrimas y lloro.
-Lo siento, en serio. Sé que esto te toma por sorpresa pero yo ya deseo ir de viaje a España. -levanto la cara y lo miro. Tiene el rostro desencajado y los ojos llorosos. Me duele verlo así, el alma se me cae a los pies por hacerle daño al hombre más bueno del mundo.
-Noah, yo no quiero que renuncies a este viaje por mi, sé que mueres por ir a Barcelona, y yo no quiero ser un impedimento. -digo para dejar de ver ese rostro triste de Noah, mi Noah.
-Yo no pienso ir a ningún lado sin ti. Aún no entiendo por qué no quieres viajar conmigo a España, pero tal vez podamos viajar en un futuro, quiero tenerte a mi lado cada vez que viaje y si por ahora no quieres salir de Seattle te comprenderé. -dice Noah tomándome de las manos y mirándome fijamente a los ojos. Este hombre es el más maravilloso del mundo, jamás pensé que aceptaría que no viaje, estoy muy sorprendida por su reacción aunque sé que le duele que no nos vayamos de luna de miel.
Lo abrazo con fuerza en señal de agradecimiento, es difícil para ambos esta situación pero Noah lo ha tomado demasiado bien.
No lo merezco, no merezco a un hombre como él, pero lamentablemente soy incapaz de contarle toda la verdad a Noah.
-Te quiero mucho Allie y siempre estaré contigo. -dice acariciandome la mejilla y yo solo sonrió, no tengo palabras para aquello que ha dicho, yo también lo quiero pero ya no como antes.

Cuando me despierto, Noah está aún a mi lado, es extraño ya que él siempre se va antes que yo. Miro la hora y son las 7am, muevo un poco a Noah para que despierte y él abre lentamente los ojos.
-Noah, ya son las 7. Deberías ya estar saliendo para la empresa.
-Cariño, soy el jefe, puedo llegar la hora que quiero. -lo que ha dicho Noah me hace reír, él nunca se ha aprovechado de su nombre para hacer lo que quiere en la empresa pero me sorprende que esta vez lo haga.
-Y ¿desde cuando piensa así señor Miller? -digo divertida.
-Desde que mi querida esposa canceló nuestra luna de miel.
Escuchar eso me quita la sonrisa de los labios y me vuelvo a sentir fatal.
-Perdón cariño, no quise decir eso. Creo que aún sigo dormido. Perdón. -dice Noah abrazándome y acariciandome el cabello.
-No debes pedir perdón cuando soy yo la que tengo que hacerlo.
-Ya olvidemos ese tema ¿si? -dice mirándome a los ojos-. Vamos a alistarnos para ir a trabajar.
Asiento y le doy un beso en la mejilla a Noah.
Cuando llegamos a empresa, Noah me agarra de la mano para entrar a Miller, yo me sorprendo que haga eso e ingresamos. Todos los empleados nos saludan y cuando llegamos a mi oficina veo a Chad, nos mira con enfado.
Sé que le molesta que Noah muestre afecto hacia mi cuando él está presente pero es algo que yo no puedo evitar, es mi esposo y está en su derecho.
-Te invito a cenar esta noche. -dice Noah cuando entramos a mi oficina.
-Si claro -digo y quiero que Noah se vaya para hablar con Chad.
-Te veo luego entonces. Te quiero. -se despide Noah con un beso.
-Yo también.
Espero que Chad entre después que Noah salga pero no lo hace. Pasan varios minutos y nada, me está desesperando y decido salir a llamarlo.
Lo veo conversando muy cariñoso con Ericka en su despacho y empiezo a sentir un resentimiento hacia ella.
<<No estoy celosa. No estoy celosa>> me digo a mí misma.
-Chad, puedes venir a mi oficina -digo interrumpiendo cuando Ericka le va a decir algo.
Vuelvo a mi oficina y espero a que entre.
-Buenos días señora Miller. Tiene junta con él área de contabilidad dentro de media hora. -dice Chad evitando mirarme y con un tono irónico.
-¿Qué te pasa? -pregunto molesta por el tono que ha utilizado.
-¿A mi? Nada, señora Miller. -sigue utilizando ese tono y me empiezo a molestar aún más.
-Puedes dejar de utilizar ese tono conmigo. -digo levantándome de la silla y acercándome a él-. Si te ha molestado que Noah y yo lleguemos juntos pues dilo pero deja de hablarme así.
-Sabes que me enfurece verte cerca de él. -dice lanzando la carpeta de documentos en la mesa.
-Lo sé. Pero es mi esposo Chad, ya te lo he dicho varias veces. -digo cruzando los brazos.
-Y yo ya te he dicho que eres mía aunque estés casada con ese idiota. -se acerca a mí y me besa efusivamente, me besa con pasión y con posesión. Me encanta escuchar decir que soy de él, hace que sienta una corriente por todo mi cuerpo. Chad empieza a bajar sus besos hasta mi cuello y yo gimo por el placer que me dan sus besos.
-¿Hablaste acerca del viaje con él? -pregunta Chad mordiéndome ligeramente el cuello.
-Si. -jadeo y empezamos a caminar hacia atrás hasta llegar al escritorio.
-¿Te vas a quedar verdad? No te vas a ir con él
-Me quedo. -digo con mi voz excitada y veo que una sonrisa espectacular en el rostro de Chad.
Me levanta la falda me quita las bragas, yo desabotono su pantalón y le bajo la cremallera, él se baja el bóxer y coloca su miembro junto a mi zona más sensible.
-Eres mía, solo mía. -dice jadeando y entra en mi, yo gimo ligeramente evitando que escuchen afuera, él sale y vuelve a entrar, repite esa acción varías veces hasta que me lleva al climax. Gimo su nombre y él me chupa el cuello.
El teléfono de la oficina empieza a sonar y eso hace que vuelva a realidad, Chad empieza a vestirse y yo recojo mi ropa interior.
-Señora Miller, él área de contabilidad ya se encuentran en la sala de junta -dice Ericka y yo solo pronunció un <<está bien>> para retomar el aire.
-Nos vemos esta noche. -dice Chad rodeándome con sus brazos la cintura.
-Está noche no puedo. Iré a cenar con Noah. -digo nerviosa ante la reacción que tenga Chad.
-Está bien -dice neutro y me suelta . Camina hacia la puerta y ni siquiera voltea a verme antes de salir de mi oficina.

Un Placer Haberte ConocidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora