Un Placer Haberte Conocido

Capitulo 74

-Jamás pensé pasar un cumpleaños tan perfecto -confiesa Chad.- Desde niño, celebrar el día de mi nacimiento nunca fue lo mejor. Tener un padre que trabaja todo el día, que no le interesas en lo más mínimo y que aparte le es infiel a su mujer es algo que te jode la vida para siempre. Mi madre intentaba que cada cumpleaños sea especial pero nunca lo lograba -continúa y me toma de las manos al otro lado de la mesa-. Gracias por todo esto Allie, en serio.
-No tienes que agradecerme nada. Eres un hombre que merece ser feliz y sobre todo el día de su cumpleaños.
Me levanto de la silla y camino hasta él para abrazarlo. Sus brazos se han convertido en mi lugar favorito y no hay sensación más maravillosa que sentir su alegría y mi alegría unida.
Nos separamos y Chad me empieza a besar. Quiero estar con él, necesito estar con él. Hago que el beso se intensifique y se vuelva más pasional.
Sus besos empiezan a bajar por mi cuello. Con sus manos toma mis pechos por encima de mi blusa color blanco y los presiona mientras yo le quito el gorro de lana y la casaca de cuero.
Chad comienza a desabotonar mi blusa y me lo quita de un tirón, yo deslizo mis manos por su camiseta ploma para quitárselo.
Chad baja los tirantes de mi brasier de encaje negro y empieza a dar besitos por todo mi hombro.
Desabrocha el bra y este cae al suelo. Sus caricias suben por mis muslos y me obliga a colocar mis piernas alrededor de su cintura.
Comienza a caminar hacia el pasillo para luego terminar en su dormitorio.
Chad terminó de desnudarme y yo a él. Se introduzco profundamente en mí y las sensaciones que me hacía sentir eran las mejores. Era tocar el mismísimo cielo.
-Te quiero -pronunció Chad entre jadeos mientras se enterraba en mí. Yo lo miré fijamente a los ojos sorprendida sin creer lo que había dicho-. Te quiero -volvió a decir confirmándome que todo lo que salía de su boca era real.
Yo sonreí más que contenta y lo besé. Chad entraba y salía de mí y no dejaba de besar mi cuello.
-Te quiero -contesté y terminé gritando su nombre al llegar a un desgarrador clímax.

-¿Es enserio lo que dijiste? -pregunté tumbada a su lado acariciando su torso desnudo.
-No había dicho algo tan enserio en mi vida jamás.
Hizo que lo mirara a los ojos y me besó la frente.
-Estoy enamorado de ti Allie. Estoy más que seguro -confesó.
Las lágrimas no se hicieron esperar. Mis mejillas se empaparon y la alegría que sentía no cabía en mi cuerpo. Moría por escuchar salir esas palabras de la boca de Chad. Moría por ser la mujer que lo ayude a tener una mejor vida. Moría por estar con él.
-Yo también estoy enamorada de ti. De eso no hay duda -lo abracé y nos transmitimos todo el amor que sentíamos el uno por el otro.
-¿Te vas a separar de él? -preguntó refiriéndose a Noah. Estaba tan feliz que me había olvidado de mi esposo. De Noah.
-No puedo seguir engañándolo -contesto.- Tendré que hablar con él.
-Te apoyaré en todo... todo -replicó Chad y me volvió a abrazar.

De regreso a casa, tenía a un Noah muy preocupado al otro lado de la línea, no dejaba de preguntarme a cada instante si me encontraba bien y con un simple "estoy bien" lo tranquilizaba. Decirle a Noah que pasé toda la tarde con Lauren lo tranquilizó aún más, pero es inevitable no sentir un poco de remordimiento por engañar a una persona tan maravillosa como lo es Noah.
Sé que el momento de decir la verdad ha llegado. Sé que a partir de ahora, mi vida dará un giro de 360 grados. Conocer a Chad ha sido lo mejor que me ha podido pasar en mi vida, haber conocido el verdadero amor estando casada ha sido difícil y complicado pero a veces la vida te da retos por vivir y para mí Chad ha sido el mejor reto de todos.