Un Placer Haberte Conocido

Capitulo 80

-¿Por qué tan felices señoritas? -pregunta Noah acercándose a mí para rodearme la cintura con sus largos brazos.
-Porque... Allie tiene que contarte una gran noticia -pronuncia Lauren emocionada cuando Noah se acerca a ella para saludarla.
Yo la fulmino con la mirada y Lauren me guiña el ojo riéndose de mí.
Noah me mira extraño y nos da una sonrisa nerviosa.
-¿Qué tienes que contarme cariño? -me toma de las manos y me mira fijamente a los ojos.
-Lo que pasa es... que... -comienzo a balbucear. Las palabras no me salen para contarle a Noah que estoy esperando un hijo de él.
-Allie, dímelo por favor. ¿Qué pasa? -dice Noah desesperado.
-Estoy... yo estoy... -me toco el vientre y agacho la mirada-. Estoy embarazada. Estoy esperando un hijo tuyo.
Alzo la mirada y el rostro de Noah me preocupa. Se ha quedado helado y siento con los ojos muy abiertos.
-Noah ¿estás bien? ¿Por qué no dices nada? -digo preocupada.
-¿Es cierto lo que me estás diciendo? -pregunta sorprendido.
-Claro que si Noah. Allie jamás jugaría con algo así -responde Lauren por mí.
Noah empieza a sonreír, me abraza y me alza para dar vueltas y yo soy un ligero grito de sorpresa.
-¡Vamos a ser papás! ¡Mi amor voy a ser papá! -dice Noah demasiado feliz.
Yo sonrío y lo abrazo.
-¡Sí Noah, vamos a ser papás¡ -exclamo también emocionada.
-¡Felicidades futuros padres! -dice Lauren y nos abraza a ambos al mismo tiempo-. Allie ya me confirmó que seré la madrina de su primer hijo o hija -pronuncia orgullosa y Noah se ríe por su comentario.
-No puedo creerlo aún. ¡Vamos a ser papás! Me has hecho el hombre más feliz de todo el mundo, gracias mi amor -me toma de las mejillas y me besa.
-Bueno chicos, los dejo para que celebren esta gran noticia -se despide primero de mí y luego de Noah-. Estoy muy feliz por ustedes, enserio.
-Gracias Lau. Estoy feliz que Allie ya te haya elegido como la madrina de nuestro bebe -dice Noah tomándome de la mano.
-No hay de qué. Allie me rogó para que sea la madrina y no pude negarme.
Yo me acerco a ella y doy un ligero golpe en el hombre. Ambas nos reímos y nos abrazamos. Lauren puede ser algo fastidiosa pero no sabría qué hacer si no la tuviera como mi mejor amiga, como mi hermana.
Cuando Lauren se fue, Noah no dejó de contarme lo emocionado y feliz que se siente por haber cumplido uno de sus sueños, ser papá. Me pone muy contenta de ver a mi esposo con una sonrisa enorme en los labios y con un brillo especial en los ojos.
-Sé que el tema de ser mamá no es algo fácil para ti pero quiero que sepas -se acerca a mí y acuna mi rostro entre sus manos- que siempre estaré agradecido contigo y con la vida por haberme dado una felicidad tan grande. Me esforzaré en ser el mejor padre para nuestro hijo y tú no debes temer a ser una mala madre porque jamás en la vida haces algo malo.
<<Si supieras lo mal que me he portado contigo desde que nos casamos>> digo para mis adentros.
Las palabras de Noah me hacen llorar. No creo aún que esté casada con un hombre tan maravilloso como él y que yo haya sido capaz de faltar a nuestro matrimonio y que aún siga enamorada de alguien más que no es él.
Jamás me lo perdonaré.
Noah empieza hablar muy emocionado sobre los nombres que quisiera ponerle a nuestro hijo o hija. Yo solo pongo una sonrisa en los labios fingiendo escucharlo atentamente mientras mis pensamientos vuelven con el hombre que sigue clavado en mi corazón y que no tiene intención de salir.
-Noah Louis me parece un nombre asombroso para nuestro hijo, ¿no lo crees amor? -siento la mirada de Noah en mí pero sigo distraída en mi mundo de tristeza y corazones rotos.
-¿Amor me escuchaste? ¡Allie! -alza un poco la voz Noah y me regresa al mundo real.
-Lo siento -digo nerviosa e inocente.
-Está bien amor no te preocupes. Aún estás procesando esta noticia tan maravillosa y por eso estás distraída pero lo importante es que ¡vamos a ser papás! -grita emocionado y me abraza.
-Lo sé -contesto sin emoción .

Noah descansa al lado mío en nuestra grande cama. Después de darle la noticia a su familia y a la mía ha terminado muy cansado.
Reviso mi celular después de varias horas y me sorprendo al ver varias llamadas de Chad.
<<¿Para qué sigue insistiendo?>>
No sé cómo haré para alejar a Chad de mi vida para siempre. Con la llegada de este bebe mi relación con Chad jamás volverá a ser la misma. Ya traicioné a Noah con mis actos y ahora no puedo hacerle lo mismo a mi hijo. Lo mejor será conversar con Chad y rogarle que deje atrás todo lo bonito que alguna vez tuvimos.
Dejo mi teléfono y termino de recostarme en la cama para dormir y empezar un nuevo día desde mañana; lejos de Chad.
Un cosquilleo en mi rostro me despierta y al abrir los ojos veo a Noah con una sonrisa en los labios y con una bandeja llena de comida.
-Buenos días cariño. No sabía que antojo tenías así que decidí prepárate todo lo que había en la cocina.
Coloca la bandeja delante de mí y me acaricia el cabello.
-Buenos días. Por ahora no tengo ningún antojo pero esto se ve delicioso, gracias -contesto y le beso la mejilla.
-Quisiera engreírte todo el día pero desafortunadamente la empresa no avanza si no estoy ahí -dice Noah haciendo pucheros.
-No te preocupes, puedo quedarme sola. Además no creo que te agrade sostener mi cabello mientras devuelvo todo este banquete.
-Si te sientes mal por favor no dudes en llamarme -pronuncia alarmado.
-Vete tranquilo. Estaré bien.
Noah se despide y se va. Miro la bandeja llena de comida y empiezo a comer lo primero que se me antoja.
A los cinco minutos unos golpes en la puerta interrumpen mi desayuno.
-Por estar preocupándose por mí se ha olvidado las llaves -digo saliendo de la cama camino hacia la puerta.
Mi corazón deja de latir cuando Chad entra a mi casa lleno de rabia.
-¿Es cierto que estás embarazada? -grita mirándome fijamente a los ojos y las lágrimas no se demoran en recorrer mis mejillas.
Lo que quería evitar ahora se ha vuelto una realidad.