World Of Ravens (Fény 2#)

Capítulo 61

[André]

Me quedo de piedra al escuchar lo que Thomas insinúa y no me agrada que Spector no intente desmentirlo, su cara seria y lúgubre me da a entender que su sobrino ha dado en el clavo. Regreso a mi asiento, seguido por todas las miradas pero no digo nada, me siento y trato de aclarar un poco mi mente, Victoria y nuestro hijo, Claudius, están bien aquí, tengo la esperanza de que Elian, Su Yeong y Miguel estén con mi pequeña Mila, así que debo de calmar a mi angustiado corazón, ella está bien. Me repito esa frase mentalmente, una y otra vez para convencerme de ello.

Iván y Thomas regresan a sus lugares, los cuatro líderes de la isla parecen confundidos, así que Thomas quien es el menos sorprendido de Iván y yo, da una breve presentación de todos los presentes, una vez acabado eso Yerik toma la palabra, hace preguntas referentes a Sibil, pero no es nada que no hayamos contado ya, aun así, dejamos que los cuatro líderes hagan las preguntas que quieran.

Aunque el único que se ha mantenido callado es Luke, solo escucha todo lo que aquí se dice, antes de cortar comunicación con los West, el chico se pone de pie y hace una pregunta, una que se me había borrado de momento de la mente, aclara su garganta y pregunta:

— ¿Ustedes saben cómo despertaremos a la reina Victoria? —arrugo el ceño, viéndolo bien, el chico luce diferente—. ¿Cómo lograre despertarla? Está claro que yo junto al hijo nonato de ella somos el Cuervo Blanco.

— ¿Como dices? —preguntan sorprendidos los hermanos, al unisón.

Tomo un suspiro y les cuento que hace unos días hicimos un Yapko para someternos a un sueño profundo y que con magia manipularan nuestras mentes para llegar al lugar donde esta Victoria, y como ya lo presentía yo acepto el regaño y los sermones por parte de los West. Al final, después de que se han calmado, se quedan serios y otra vez comparten esas miradas de complicidad, no sé si es propio de hermanos pero lo mismo hacia con Claudius, además algunas veces vi hacer lo mismo a Victoria con Iván o a Esmerald con el difunto Lowell.

Los West desaparecen de pantalla, al regresar Bastian trae royos de pergamino y Spector un enorme libro, este ultimo lo abre y nos enseña un dibujo, no se ve muy bien pero logro identificarlo como un bastón, al poder verlo con mayor claridad escucho gritos ahogados y murmullos por parte de los soldados se hacen presentes.

— El Oráculo de de Rodee —dice Spector—. Merlín dice que es muy poderoso, eso aunado a un libro muy antiguo hecho hace siglos.

— Se dice que es un libro escrito en latín, contiene los hechizos más poderosos de magia negra y blanca —Bastian toma el relevo para hablar—. Se dice que lo crearon ancestros de Merlín, del rey Hesper y adivinen... de la familia de hechiceros más oscura de todos los tiempos, los Saadi.

— Es el mismo libro que nos pidió Marek y Krähe, cuando pedimos el barco —dice Iván recordando el trato que hicimos con el dueño de aquel bar espantoso. Veo al capitán Rogers asentir, algo me dice que él también estaba al tanto del trato.

— El caso es —prosigue Bastian—. Que ese libro fue robado de las bóvedas celestes, custodiadas por los siete arcángeles. Nadie supo quien lo robo aunque piensan fue un Caído o Nefilim, después de eso nadie supo que paso, lo mismo con el Oráculo de Rodee. Sin ayuda de esas dos cosas... Victoria no despertara.

— No sé si es destino o mucha suerte —dice Luke, llamando la atención de todos—. Pero nosotros lo tenemos.

— ¡Luke! —le advierte Yerik y sutilmente niega, sin embargo Luke lo ignora y mira a todos los presentes para terminar mirándome a mí.

— Nosotros tenemos el Oráculo y el Libro, podemos despertar a Victoria.

Se desata la discusión a mí alrededor, entre Thomas, Iván y tres de los cuatro líderes, los West también comienzan a hablar y pedir explicaciones. Mientras yo me quedo sentado, sumido en mis pensamientos y en el hecho de asimilar lo que voy escuchando, y a la vez me siento sumamente aliviado. Quisiera pedir explicaciones de por qué los cuervos tienen las dos cosas que nosotros necesitaríamos, es demasiada coincidencia, aunque no voy a rebuscar más en eso.