El Gobernador Vampiro

Cuarto de música

Narra Dafne

-Desperté envuelta en los brazos de quien nunca imaginé, si en los músculosos brazos del gobernador vampiro, y para ser sincera me sentía muy feliz.

-Pequeña, despertaste..-lo escuché decir a mis espaldas, por lo que me gire para quedar frente a el, no me lo podía creer era tan perfecto y yo una insignificante humana, seguro para él lo que paso, no tiene ninguna importancia y me seguirá tratando como siempre.

- En que piensas tanto?-..me mira curioso.
-Yo quiero saber que pasara ahora conmigo gobernador, si ya no está Hector aquí.. y yo se que, lo que paso anoche no significa nada para usted-..le dije un poco triste.

-Seguirás aquí en mi castillo como hasta este momento, como mi invitada. Ahora que ve a tu habitación duchate y baja para que Eloisa te preparé algo para comer, nos vemos después-

No era la respuesta que quería escuchar, pero pudo haber sido peor así que, me levante con la sábana cubriendome hasta alcanzar la bata y ponermela- esta bien- le dije para luego salir de la habitación.

Antes ya lo había tuteado y llamado por su nombre pero claro, fue mientras teníamos relaciones, la verdad es que en este momento no me atrevía, se que no le gusta y es mejor no tentar a mi suerte, pensé.

Luego de hacer todo lo que me dijo Jack, salí al jardín..para ser sincera sentía un poco de dolor ahí abajo, pero era algo soportable.

-Hola pequeña zorrita..me extrañaste?..porque yo a ti si..-me tense al ver a Gaspar acercarse a mi.

-Vaya si que tienes suerte, tu amo se ha ido y encima pareces caerle bien al gobernador..créeme que lo segundo es casi imposible de lograr, no se como lo hiciste pero te aseguro que al final, el va a matarte-.

-Eso es algo que a ti no te importa-
-ja ja ja la fierecita saco las garras..deberías comportarte conmigo sabes, porque yo puedo hacer que tu vida aquí, sea..digamos que.. nada agradable.-

- Porque harías eso?..yo no te he hecho nada..-
-Si que lo has hecho..casi me matan por tu culpa, te parece poco..-
-Pero te lo merecías, tu ibas a violarme y a beber de mi sangre-
-Claro que lo iba a hacer, eres una esclava, es lo más lógico ya que es por eso que estas aquí, cielo.-

- Dejame en paz Gaspar o sino..-
-O sino que??..ja ja, a mi no me amenaces..recuerda que yo no tendré piedad de ti..-
- Sueltame- le dije mientras trataba de quitar sus brazos sobre mi..para el soltarse a reír..
- Pronto nos veremos, zorra- me dijo mientras en segundos desaparecía.

Me tambalie un poco, me sentía mareada y que me faltaba el aire...decidí entrar al castillo e iba en dirección hacia mi habitación, pero me dio curiosidad de averiguar que habían en los otros cuartos..a decir verdad, creo que nunca podría saber cuantos de ellos habían, porque eran demasiados.

Entre a varios en los que únicamente encontraba cómodas camas, amplios veladores y armarios. Hasta que encontré el mejor de todos..ya que en el, no habían camas como en los anteriores..sino instrumentos musicales, de todo tipo de toda clase y de todo tamaño..habían algunos aquí que ni siquiera sabía que existían, así que tomé el único instrumento que podía usar..la guitarra.

Empecé a cantar una canción mientras tocaba la guitarra..Había pasado tanto tiempo que no lo hacía, que ya había olvidado un poco como era esto.

-Lo haces espectacular- escuche a una voz femenina decir- quien eres tu?no te escuche entrar-
-Mi nombre es Amy, soy esclava del señor Hector..la puerta estaba entreabierta y yo..bueno la verdad es que,suelo escaparme y venir acá, me gusta tocar la flauta-

-Me gustaría tocar la guitarra..me enseñarias??- sonreí..
-Por supuesto pero solo si tu me enseñas a tocar la flauta..por cierto mi nombre es Dafne..mucho gusto-le dije, para luego acercarme a ella y estrechar su delgada mano.