Infancia

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Narra Dafne

Luego de ducharme y vestirme, a mi mente venían nuevamente los recuerdos de la discusión que tuve con Jack en la mañana, necesitaba hablar con el, puesto que no quería que las cosas estén mal entre nosotros.

Así que decidida y bastante nerviosa me acerqué a la habitación de Jack para golpear la puerta pero para mi sorpresa, el al parecer en ese momento se disponía a salir.

- A donde vas?- pregunté curiosa mientras que me miraba con fastidio.
- Tengo una reunión con los miembros de la corte- dijo seco para luego pasar por alado de mi, casi empujandome y asi dirigirse en dirección a la planta baja.

-A que hora vuelves?- le grité ya que en este momento de lejos pude observar que bajaba las gradas.

Lo vi girarse y levantar los hombros además de hacer una mueca con su boca,  para luego levantar ligeramente sus hombros dándome a entender así que, tal vez no sabía o no quería decirme a que hora regresaría.

Bajé para intentar siquiera despedirme de él, pero fue inútil porque al parecer ya no se encontraba en el castillo.

La verdad es que me sentía un poco deprimida porque no me gustaba que Jack este molesto conmigo.

- Hola cuñadita..- un voz conocida a mis espaldas me sobresalto hacindome pegar un pequeño saltito.

- Me asustaste- le dije poniéndo una mano en pecho.

Vi que una sonrisa maliciosa y juguetona aparecía en su rostro.

- Qué te sucede..?- preguntó mirándome y girando un poco su rostro a un costado.
- No..no es nada, debo irme- dije para continuar con mi camino hacia el jardín, pero de repente sentí que tomaba de mi mano para detenerme por lo que yo giré de inmediato mirandolo confusa.

-  Mira ya se que me porte mal contigo al comienzo pero de verdad me gustaría hacer las pases contigo- dijo bajando la mirada.

Vaya eso si no me lo esperaba en lo absoluto.

- Esta bien, no hay problema- dije soltandome de su agarre.
- Es más, que tal si te invito un trago en honor a eso, a que me has disculpado- dijo luciendo ilusionado.

-No creo que eso sea buena idea..además yo no bebo- le dije para darle la espalda y empezar a marcharme de donde él se encontraba.

- Se muchas cosas de Jack que podrían interesarte- lo escuché decir a lo lejos por lo que me detuve en seco y enseguida lo tuve frente a mí, con una amplia sonrisa.

- Sabia que eso funcionaria- dijo divertido.
- Esta bien- dije rodando los ojos.
- Qué tal si vamos a la cocina- dijo ilusionado como un niño que pide que jueguen con él.

- A la cocina?- pregunté confundida.
- Sí te prepárare un mojito- no puede evitar soltar una carcajada.
- Cómo es posible que sepas hacer uno de esos..?- dije aun riendo un poco.
- Ya sabes..tanto tiempo viendo entre humanos, uno tiene que aprender algo bueno de ellos no crees?- sonreí ante su comentario.

Luego de prepararme varios mojitos que gustosa tomé, nos dirigimos a la sala en donde unos elegantes muebles negros de cuero nos esperaban para que nosotros estemos muy cómodamente en ellos.

- Y bien que quieres saber de mi querido hermanito?- dijo tomando un poco de wisky de un vaso que tenía en sus manos mientras que yo bebía del mío que contenía aquél cóctel que antes él,preparó para mí.

- Dime porque te sorprendiste tanto cuando Jack me defendió ante tu ataque?- pregunté achinando un poco mis ojos.
- A Jack nunca le ha importado nadie...bueno se preocupa por los nuestros en general pero nunca lo he visto preocuparse por nadie en particular, mucho menos sino es sangre pura-
- Oh ya veo..-dije con una sonrisa forzada.
- Sí, desde pequeño su vida ha sido muy difícil, tuvo que llevar esa carga pesada de ser gobernador desde que nació-

Tomé el vaso enteró de mi mojito de un solo trago imaginando lo duro que debió haber sido para Jack no tener una infancia normal.

- Nuestros padres lo dejaron aquí mientras que a mi me llevaron con ellos a vivir en el mundo de los humanos, nunca entendí porque lo dejaron solo, pero decían que él debía acerce cargo de su responsabilidad sin ayuda de nadie ya que era ese su destino-

- Cómo pudieron hacerle eso..- dije incrédula.
- Quedó al cuidado de una esclava humana ya que no tenemos ningún otro familiar al ser nuestro padre hijo único y de nuestros familiares de parte de madre nadie quizo hacerce cargo de él.

Después de varios años regresé para saber cómo se encontraba pero ya no era el mismo niño alegre que yo recordaba cuando era pequeño, obviamente ya había crecido pero se  había convertido en ser despiado, frío y cruel...otro mojito?- pregunto sonriendo de lado levantando una ceja por lo que yo asinti con mi cabeza.

Imaginaba lo mal que pudo haberlo pasado Jack al ser abandonado.

- Por qué odia tanto a los humanos?-
pregunté para después tomar un poco del nuevo cóctel que me preparó Adam.

- Justo a eso iba, luego de averiguar un poco acerca de la infancia y adolescencia de Jack, descubrí que el sufrió maltratos y abusos por parte de la esclava humana que lo cuidaba- tape mi boca con mi mano debido a que no podía creer lo que había escuchado, ahora entendía porque Jack actuaba así, porque a él no le gustaba que lo tocasen, será que esa mujer se atrevió a abusar sexualmente él?

- Los primeros siglos de su joventud se que se dedicaba a torturar de formas muy atroces a esclavos humanos además que era un adicto a la sangre y al sexo- la sonrisa de Adam apareció debido a mi cara de incomodidad al escuchar su última frase.

- Ahora comprendo tantas cosas y que pasó con esa mujer?fue castigada?-
pregunté con gran impotencia.

- Solo desapareció y no se supo más de ella...cambiando de tema..muestrame algún talento que tu tengas y no me refiero a ninguna habilidad de vampiro, eh-
- Qué?- pregunté muy confundida.
- Sí..ya te mostré cual es la mía, hago cócteles muy buenos..- dijo con orgullo.
- Sí, es más sirveme otro por favor- dije dándole mi vaso vacío.
- Sus deseos son ordenes mi lady- dijo haciendo una leve reverencia.

Luego de tomar un vaso de esa bebida tan buena que preparaba Adam sentí un mareo que supongo debe ser producto de tantos de estos que había tomado.

- Ya ahora sí muestrame en que eres buena..cual es tu talento?- preguntó ancioso el vampiro que estaba al frente de mi.
- Yo no..no tengo ninguno, lo siento- dije levanto ligeramente los hombros
Su cara de decepción fue épica, pero para mi buena suerte al fondo vizualice un piano muy bien preservado, por lo que me acerqué a él evitando caer debido que caminaba como en zic zac, maldito alcohol,bufé por lo bajo.

El hermano de mi vampiro me miraba confundido viendo a donde me dirigía para luego comprender que yo iba directo a donde se encontraba el piano y entonces sin más, abrí la tapa para empezar a tocar la primera canción que se me vino a la mente en ese momento.

Adam lucia maravillado ante la torpe melodía que yo entonaba pero lo que en mí llamó la atención fue que alguien más estaba aquí, con nosotros.

- No sabía que tocabas tan bien el piano- dijo Jack con una mirada oscura y maliciosa que hizo que mi piel se erice..por lo que deje de tocar para empezar a mirarlo como una tonta...alguien por favor ponganme un babero...
- Hay muchas cosas que no sabes aún de mi, guapo- dije guiñandole un ojo..



El Gobernador VampiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora