Elijah

Parte 4 - Incovenientes

—Me parece perfecto el plan, pero olvidas algo... O mejor dicho, yo olvidé decirte algo y se qué esto se está yendo de las manos, pero yo quiero cooperar.— Tuerce su boca mientra se recuesta sobre el sillón.

Connor maldice. —¿Qué?— Exclama con pocas pulgas.

Kaleb muerde su labio inferior, bajando su mirada.

—Prometí llevar a Nina a almorzar por su cumpleaños, ya que ayer no pude estar con ella a la tarde.— Hace una Connor. —Sólo quiere verme y sabes cómo es Valentina.— Suspira moviendo su cabeza hacia un costado.

Connor lo observa de arriba hacia abajo, con tan solo un movimiento de sus ojos grises. —Espero que estés bromeando, realmente espero qué no te estés animando a tomarme el pelo de esa forma.— Su voz sale más ronca de lo normal.

Augusto infla su pecho, mirando todo a su alrededor.

Kol se mantiene más cerca de Connor.

Kaleb mueve sus manos entre sí demostrando lo nervioso que se encuentra en estos momentos. —Entiendo que necesitamos hacerlo ya, realmente lo entiendo, y se qué no me dejaste salir de tu casa para qué no haya filtraciones, para que yo pueda demostrar qué no miento.— Rasca su cabeza.

Aquello le está costando.

Mucho.

Y no tenía idea de los planes de Lucas, porque no el mismo no se los decía, sólo le daba ordenanzas de cómo manejarse, tan sólo para qué él plan no fallara.

Lucas y Kaleb sabían del potencial qué Connor tenía para prevenir estás situaciones, de todo el equipo qué tenía a su alrededor y ante todo, de la experiencia que lo predecía.

—Yo... Necesito ir con ella.— Titubea.

Connor infla su pecho pasando una mano por la comisura de sus labios. —No voy a perder el tiempo, no voy a darte tiempo Kaleb, ni a Lucas, esto hay qué hacerlo ahora.— Rueda los ojos y levanta sus manos.

Kaleb tiembla.

—No puedo volver a dejarla plantada, además de que es algo que Lucas sabía que yo iba a ser, y si no me apego a mi rutina va a sospechar de algo.— Traga saliva.

Hacía ya dos horas que tenían a medio armar toda la entradera para poder dar con Lucas.

Era toda una estrategia de Connor para ver cuánto le estaban mintiendo los hermanos...

Quería ponerlo en práctica cuanto antes para sacarse todas sus dudas. Y es por eso mismo que estaba jugando con ese pequeño tiempo en el que esperaba que ambos no se hubieran podido comunicar.

—Podes cenar con ella.— Suspira molesto. —¿No es suficiente?— Bromea y todos a su alrededor sueltan una carcajada.

El rubio baja la cabeza y acaricia su cabello con angustia. —Yo ... Sí ... Creo que podría ser suficiente.— Murmura y luego se disculpa alzando la mano al ver que su teléfono está sonando.

Connor coloca sus ojos en blanco y se da media vuelta hacia Kol, él mismo le guiña un ojo.

—¿Una jodida distracción?— Pregunta perspicaz.

Connor pasa una mano por su ceja.

Luego antes de poder responder, se escucha la voz de Valentina desde el otro lado de la línea.

Y todo su cuerpo se congela.

Deja de respirar.

Valentina se queja en el teléfono, cuándo Kaleb quiere cancelar su almuerzo, su voz se escucha distorsionada, pero no es porque su hermano tenga el teléfono pegado a su oreja, sino qué es porqué su mente distorsiona todo.