Elijah

Parte 23 - Apertura

Augusto corrobora el perímetro del nuevo club, mientras que Elijah ingresa seguido de Kol y un custodio nuevo...

Todo lo que ve a su alredor le gusta y está conforme.

Su hermano va detrás con una sonrisa plasmada en el rostro admirando cómo quedó el lugar y cómo la gente aclama por su hermano.

Él toma lugar en su vip luego de haber ido a dar una vuelta por las oficinas y chequear que todo estuviera como había ordenado.

—Carajos.— Estira las piernas sobre la mesa ratona que tiene delante.

—Cambia esa cara.— Su hermano se posiciona a su lado y saluda a la mesera que les deja la carta y una frapera con el whisky qué Connor toma frecuentemente.

—Detesto venir temprano los cócteles, la próxima directamente podemos hacer una rueda de prensa y ya.— Coloca sus ojos en blanco y prende un cigarrillo.

Alec sonríe y mira a toda la gente qué está llenando el lugar en menos tiempo de lo esperado.

—En menos de tres minutos tenés que dar tu discurso, no llegamos temprano, siempre llegamos sobre la hora, además, estaba seguro de que ibas a querer ir a chequear tu oficina y cómo estaba la administración.— Le recuerda rodeando los ojos.

Connor suelta el humo del cigarrillo y no le responde inmediatamente...

—Realmente quiero irme.— Traga saliva negando con la cabeza.

El ojiazul arquea sus cejas en su dirección. —Yo no me voy a quedar hasta tan tarde si querés te podés volver conmigo... Pero todos sabemos el motivo por el cuál viniste.— Acota risueño.

Connor lo observa queriéndose lo comer con la mirada, mientras qué él menor no hace más que sonreír, nuevamente, juguetón sirviéndose otra copa de champagne.

—¿Mañana volves?— Cuestióna necesitando cambiar de tema

Alec asiente y mira su reloj esperando a Nina, ya que si ella no aparece el humor de su hermano va a ser imposible de calmar y de tolerar.

—Si, tengo que recolectar unos datos que Augusto me pidió, y voy a hacer presencia en tus oficinas, no todos son vacaciones.— Sonríe irónico.

Elijah rueda los ojos.

—También son tuyas.— Sube sus hombros obvio, sin importarle quién tenga más propiedades.

—A mi me gusta el anonimato y haber en el servicio secreto mientras papá te educaba para esto.— Le guiña un ojo.

Connor se sirve de su bourbon y le ofrece un vaso a Alec, quién acepta gentilmente por más qué ya estuviera bebiendo champagne.

—Si no dormís en su casa quiero que vos y Tobey estén en mía, y no quiero ver a ese imbécil alejado de vos a menos que esté Valentina de por medio.— Demanda señalando a lo lejos al dichoso Tobey.

Alec asiente en silencio.

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—Hermano, es raro recibir una llamada tuya...— Sonríe extrañado. —Pero me alegra qué llames ¿Cómo estás?— Cuestiona.

Connor cierra los ojos y se remueve incomodo con su mano libre apoyada en su abdomen y una mueca de dolor en su rostro...

Las ventanillas de su camioneta blindada se están empezando a teñir de vapor, ya qué su respiración agitada no le permite hacer circular bien el aire...