—¡¡Alec, no lo se!!— Vuelve a responder por cuarta vez la rubia desde el sillón de su cómoda y, ahora, renovada habitación.
Le había costado horrores llamar a Alec.
Todavía seguía algo resentida con todo lo que había ocurrido y más que nada para con él, por todo lo que le había ocultado.
Y a pesar de que había cosas que no se podían cambiar, cómo el afecto que le tenía, o lo cómoda que se sentía hablando para con él, quería poner una cierta distancia.
Lamentablemente sentía una necesidad absoluta que no la dejaba quedarse tranquila ni concentrarse en su trabajo, ante el hecho de tener que decirle a otra persona que tuviera en común para con Connor, y explicarle cómo es que lo había visto y por qué ella misma se había quedado con dicha incertidumbre.
—¿Pero estas segura?— Chasquea la lengua.
Cierra los ojos.
Lo que Valentina le acababa de contar, no era una novedad para él.
El problema, en realidad, era qué no tenía ni la menor idea de cómo su hermano mayor podía llegar a reaccionar.
—Te digo que me dejo directamente acá, y que Nicolás ya estaba en el departamento con los demás guardias.— Levanta su mano y peina su flequillo.
Alec muerde su labio inferior.
Luego niega con la cabeza y suspira.
—No puede ser.— Se queja aterrado.
Ella infla su pecho, ahora la culpa volvía a ser una parte de su cuerpo. Más aún, mirando a su amigo ponerse de ese modo.
—Supuse por sus ojeras que no había dormido, pero no creo que el café y esos gramos que le metió fueran buena combinación...— Bufa y muerde su labio mirando a su amigo por la pantalla un tanto nerviosa.
Había estado al pendiente a todo momento de cómo es que el custodio de Connor, no se alejaba de ellos en ninguna oportunidad, incluso, cuándo había estado en su casa lo había visto pasarse por el mismo pasillo en el que se encontraba la habitación de Connor.
Dándole la pauta, de qué, probablemente, estuviera al tanto de cada cosa que le ocurría con mucho más detalle de lo normal.
Y de la misma forma sucedió en el centro médico y en lo poco que duró su estadía en el centro comercial.
—Estoy intentando localizarlo, gracias por haberme avisado.— Asegura, ahora, él preocupado.
Ella alza sus manos, aprieta sus labios y niega con la cabeza, sin saber más qué decir.
—Pero, tengo una duda.— Sonríe. —¿Por qué me estás llamando a mí para contarme esto?— Achina sus ojos.
—¿Es tu hermano, no?— Traga saliva, incómoda.
—Sip.— Responde burlón.
—¡Por algo te estoy llamando a vos y no estoy llamando a Kol, ya qué sería demasiado obvio que va a estar con él.— Rueda los ojos y bufa.
Comenzando a arrepentirse por haber llamado a su amigo y haberle contado la situación que tuvo con él minutos antes...
Alec sonríe.
—Se que me estás llamando a mí porque no querés hablar con Kol, Nina.— Se burla.
Conoce a la perfección al custodio de su hermano mayor y de la misma manera puede asegurar que es por demás frontal.
Qué es una persona que tiene una actitud muy marcada y puede reconocer perfectamente para el lado para el que van sus ideales.
Kol es una persona a la que no le va a importar tratar mal a quién tenga enfrente con tan sólo dejarle en claro lo que él piensa.
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Elijah
RomanceValentina, Nina para los amigos, lleva más de un año sin saber que perdió la memoria en un accidente automovilístico causado por sus dos hermanos, de lo cuál ella desconoce absolutamente. La vida de nuestra protagonista cuenta dos hermanos que se h...