MI GUARDIANA [Jelsa]

"Asunto"

Elsa me miro a los ojos y sonrió mostrando sus perfectos dientes blancos. Paso su mano derecha por mi mejilla y se detuvo en mi barbilla —No sé qué haría si te perdiera —dijo mientras su sonrisa se desvanecía lentamente.

—Nunca me perderás —aseguré.

— ¿Seguro?

Asentí y sonreí sutilmente. Cogí una de sus manos y la lleve a mi pecho, justo donde se encuentra el corazón y levante la otra mano —Lo prometo —juré.

Elsa sonrió y apretó la mano que sujetaba la suya cariñosamente. La llevo hacia su labios y la beso —No prometas algo que no podrás cumplir.

—Claro que lo cumpliré, cariño —dije —. Preferiría morir antes de estar lejos de ti. Bueno, otra vez supongo.

Elsa soltó una leve risilla y asintió.

***

Otro día, otro comienzo...

O al menos es lo que dicen las personas.

Para mi otro día es una copia barata del día anterior; o al menos este último tiempo así me parece. Mis amigos (o lo que queda de ellos) dicen que todo va a mejorar, pero me es muy difícil creerles después de todo lo que ha pasado.

Por otra parte, día a día me siento más unido a Elsa. Después de acabar con algunos de sus secretos y cosas que tenía en la cabeza, creo que ahora podemos hablar más abiertamente. No es que no lo hiciéramos antes, solo que... ahora ciento que no me guarda secretos.

— ¿Jack? —preguntó Norte mientras pasaba su mano por enfrente de mi rostro. Entorne los ojos y rápidamente me concentre en lo que estaba pasando.

—Perdón ¿Podrías repetir lo que dijiste? — dije un tanto apenado.

Norte negó con la cabeza y sonrió por lo bajo —Te pregunte: ¿Qué si tener dos trabajos no es algo pesado para ti?

—Un poco, pero no es tanto como me hubiera imaginado.

Santa asintió —Está bien. Cambiando de tema ¿Qué pasa entre tú y los demás chicos? He visto que están muy distantes desde hace semanas.

—Aun no logran asimilar o aceptar que estoy "equivocado"

— ¿Aún siguen con eso? — me encogí de hombros —Eso no puede continuar así.

—Díselo a ellos. Los único que entienden son Eugine e Hiccup y empiezo a creer que Kristoff; él es novio de Anna y creo que solo está con los demás por ella.

Tres toques en la puerta interrumpieron la conversación que Norte y yo sosteníamos. —Adelante —dijo Santa

La puerta se abrió lentamente y Elsa asomo la cabeza —Lo siento, no sabía que estabas ocupado... volveré luego.

— ¡No! Adelante. Creo que ya he terminado aquí —informó Norte mientras me miraba de reojo.

— ¿Seguro? —insistió Elsa.

—Sí. Jack, ya puedes irte. Creo que debes de ir a hacer tu trabajo ¿no es así?

—Oh. Claro. Tengo que hacer mi trabajo —dije mientras me levantaba de la silla.

Camine hacia la puerta y cuando pase al lado de Elsa sonreí sutilmente y ella hizo lo mismo. Cerré la puerta tras de mi cuando salí y sin saber bien porque me quede parado ahí mismo. Creo que estaría mal que escuchara lo que dicen, pero en verdad me mata la curiosidad. Pegue el oído a la puerta de madera y me dedique a escuchar lo mejor que puede lo que estaban diciendo ahí adentro, pero algo me toco la espalda haciendo que diera un brinco del susto.

— ¡Idiota, casi me matas del susto! —le regañe a Hiccup en voz baja.

—Perdón... —se disculpó y luego me miró con extrañeza al deducir lo que estaba haciendo — ¿estabas espiando a Norte?

—No —aclaré —. Estoy espiando a Elsa, eso es muy diferente.

El castaño giro los ojos y negó con la cabeza —Olvida eso, vamos. Eugine nos espera en la sala para algo que según él es divertido.

Me jalo del gorro de la sudadera y me llevo junto con él.

***

Solté una enorme carcajada junto con Eugine mientras Hiccup tiraba a la mesa una cuerda amarilla paja y se dejaba caer a uno de los sofás libres. Eugine reía y trataba de respirar. Cuando lo logro, se aclaró la garganta.

—Bien, mi turno —anuncio mi amigo moreno —. Esta es fácil —tomo una bocanada de aire —. Okay aquí va... ¡Por los dioses! ¿¡Cómo pudiste olvidar el hilo dental!? ¡Vas a echar a perder tus dientes!

— ¡Hada! —gritó Hiccup antes de que yo pudiera abrir la boca.

—Si —afirmo Eugine.

Escuche el crujir de la puerta y cuando me gire en esa dirección sonreí —Hola. —le dije.

—Hola —me respondió Elsa que miraba a los chicos reír sin parar — ¿Qué es lo que están haciendo?

—Nada muy importante —hice un ademan para restarle importancia —. Estábamos jugando algo que se le ocurrió a Eugine, ¿pero qué pasa?

—Hola, Elsita —le saludo Hiccup desde el suelo mientras se quitaba a Eugine de enzima suyo. Creo que se le aventó cuando no me di cuenta o algo por el estilo.

—Hola. Veo que se divierten mucho —comentó mi novia mientras llevaba las manos a su regazo y nos miraba con una sonrisa.

—Sí, ¿Por qué no te unes? — Sugirió Eugine.

Elsa abrió los ojos y negó con la cabeza —No, no podría. Ustedes continúen. Solo vine para hablar con Jack pero veo que está ocupado, así que lo buscare más tarde.

—Oh, en ese caso ya nos vamos —dijo Hiccup mientras jalaba a Eugine fuera de la sala.

—No, pero yo quiero oír —se quejó Eugine mientras trataba de zafarse del agarre de Hiccup. Mi amigo se retorcida como si fuese un gusano pero al final salió de la puerta de la sala a regañadientes dejándome a solas con mi novia

— ¿Qué querías decirme cariño? —le pregunté.

—No era nada importante. Solo quería decirte que Norte me pidió que te dijera que después de hacer tu trabajo fueras a verlo para terminar de hablar del "asunto" — hizo comillas con sus dedos en la última palabra.

— Oh, ya veo —miré el suelo y después mire el techo.

— ¿Y qué asunto?

—Es sobre los chicos, piensa que le hecho de que todos... bueno la mayoría me odien no es bueno y que podría provocar serios problemas.