Tiempo Hechizado

Misión: Un Lirio y una Petunia.

Capitulo 14: Misión: Un Lirio y una Petunia.

"Los hermanos sean unidos porque esa es la ley primera. Tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean, los devoran los de afuera." José Hernández. Martín Fierro.

La hermandad es el lazo más fuerte que he conocido, sin contar el paternal, obviamente.

Un hermano o hermana es aquel que te acompaña toda la vida, es quien te apoya en lo que sea, por más problemas que tengas. Un hermano es un regalo de la naturaleza, alguien siempre te va a querer. Porque por más peleas que tengan, saben que, cuando se necesiten, ahí van a estar.

Lo sé por experiencia propia, no importa cuánto me pelee con mis hermanos, ellos siempre saben cómo hacerme sonreír en mis momentos más oscuros. Y por ellos, daría todo lo que soy, todo lo que podría llegar a ser, porque lo que soy, lo soy por ellos y gracias a ellos.

Así, paso a contarles la historia de dos hermanas que supieron cómo reparar sus daños para reencontrarse.

Con las casas de los miembros de la Orden en la mira de los Mortífagos, la Casa de Seguridad se encontraba al límite de su capacidad, a las familias ya no les importaba dormir en una habitación, simplemente estaban contentos con tener un colchón o un sillón para poder descansar por las noches y algo en lo que ocuparse por las mañanas.

Había varios muggles familiares de magos, a quienes sus seres queridos habían enviado para protegerlos, todos lograban adaptarse bastante bien al ambiente mágico.

Todos, excepto Vernon y Petunia Dursley.

Lily ya no sabía qué hacer para borrar esa mirada amargada del rostro de su hermana y cuñado, pero sobretodo, ya no sabía cómo aguantar las palabras cargadas de odio de Vernon. Narcissa y Alice intentaban llevársela siempre lejos de la pareja, pero la pelirroja quería pasar tiempo con su hermana, necesitaba hablar con ella y decirle lo que le pasaría si seguía con Dursley, el futuro que le esperaba. Por esto, en la primera oportunidad que tuvo, una de las pocas veces que James pudo tomarse un tiempo para ir a visitarla, le pidió el libro.

-¿Para qué lo necesitas?- Preguntó él sentándose en la cama de su habitación, cerrando levemente los ojos debido al cansancio que lo agobiaba.

-No puedo aguantar más la forma en la que el cerdo de Dursley trata a mi hermana y a todos nosotros. No sabiendo lo que le hará. Necesito saber qué es lo que me recomienda hacer el libro.-Explicó viendo cómo James iba quedándose dormido lentamente.- Sé que estás cansado y que quieres dormir, solo dime dónde está el libro y te dejaré descansar tranquilo.- Susurró acariciando dulcemente sus cabellos. James se removió en su lugar, adentrando una mano en su túnica. -¿Enserio lo llevas todo el tiempo encima?-

-Harry me lo dio. Esto y la foto que nos sacamos todos juntos es lo único que tendremos de él hasta que nazca.-Dijo con sus ojos aún cerrados, entregándole el libro.- Piensa en lo que necesitas antes de abrirlo, funciona casi igual que la Sala de Menesteres.- Y sin decir más, se quedó dormido. Lily se levantó de la cama y salió de la habitación tratando de no hacer ruido, caminó hacia la cocina, el único lugar de la casa que no era ocupado para dormir, y se sentó en la pequeña silla junto a la ventana.

Cerrando los ojos, pensó tres veces en su pregunta "¿Qué hago para ayudar a mi hermana?", y abrió el libro de par en par.

-Es la letra de Harry.-Susurró emocionada acariciando las palabras, sus ojos se llenaron de lágrimas y no pudo hacer más que sonreír pensando en ese joven que sería su hijo. Con una gran sonrisa, leyó el título de la página. "¿Cómo arreglar una familia separada?", las instrucciones eran sencillas.