Tiempo Hechizado

Misión: Un anillo y una Comadreja

Capitulo 9: Misión: Un anillo y una Comadreja.

Hoy no tengo mucho que decir, no más que recordarles que con fe y estando juntos, todo es posible.

Incluso dejar de lado esas obsesiones que enceguecen tu alma.

Esperar a Dumbledore por una hora completa les había dado a los Merodeadores, tiempo suficiente como para ponerse al día. Severus tenía muchas cosas que contarles y ellos otras tantas a él. Habían hablado tanto por esa hora, que ya no sabían qué más decir, y se estaban volviendo locos por los nervios.

-¿Habrá entendido el mensaje?-Cuestionó James arrancando una flor que había crecido entre el cemento del piso.-Tal vez lo compliqué mucho con mis códigos clave.-Murmuró observando con intriga los colores de los pétalos.

-Estamos hablando de Albus Dumbledore.-Respondió Remus apoyado contra una no muy segura pared.- Si él no lo entendió, nadie hubiera podido.-

-Tal vez estaba ocupado y por eso está tardando tanto.-Agregó Severus viendo cómo Sirius hacía chispas con su varita.-No creo que estemos mucho tiempo más aquí.-

-Eso espero. Quiero volver a casa y sentarme en el sillón con Marlene.-Susurró Black bajando su varita.-No quiero desperdiciar ningún segundo con ella. –Explicó al ver los rostros burlones de sus amigos.

-Y pensar que estos dos tienen que esperar como catorce años para estar con sus "chicas"-James y Sirius se rieron, mientras Lupin y Snape rodaban los ojos.

-¿Quiénes son sus chicas?-Preguntó Albus entrando a la casa con una sonrisa, sonrojando a los futuros profesores de Hogwarts.

-Lunático se casará con mi sobrina y Quiroptero con la de la Profesora McGonagall.- Respondió Canuto sonrojándolos aún más, mientras Dumbledore reía.

-A Minerva le encantará oír eso.-Rió el director acercándose a ellos.-¿Puedo felicitarlos ahora o debo esperar a que llegue el momento?-Cuestionó mirándolos a través de sus lentes.

-Creo que lo mejor será esperar. No me siento cómodo pensando en que mi futura esposa aún es una niña.-Remus se removió en su lugar, con una mueca en su rostro que reafirmaba sus palabras.- Aquí está la caja.-Señaló con su mano hacia el pozo en el piso. Dumbledore asintió y se arrodilló frente a éste. Observó su interior por varios minutos, con actitud pensativa. Sus ojos vagaron por cada rincón de la caja, hasta que lanzó un largo suspiro.

-Estos hechizos de protección son muy poderosos. Su energía es fuerte y muy oscura. Deberé estudiar ésta magia antes de lanzar cualquier contramaleficio que pueda llegar a ponernos en peligro. Señor Lupin, ¿Podría ser tan amable de ir a mi despacho en Hogwarts y buscar algunos de mis libros?-Le preguntó alzando levente los ojos hacia él, quién asintió rápidamente, poniéndose de pie. Albus hizo aparecer un pergamino y una pluma, haciendo una pequeña lista. - Pídale ayuda a Minerva, ella suele ordenar mis libros a su antojo cuando los dejo amontanados sobre mi escritoria.- Confesó con una pequeña sonrisa avergonzada.

-Lo comprendo.- Sonrieron Severus y Remus renocociendo esa actitud en ellos mismos.

-Señor Snape, acompañe al Señor Lupin hasta Hogwarts, pero busque al Profesor Slughorn y pídale que le de estas pociones.- Siguió escribiendo en el mismo pergamino, mientras Severus asentía, espero a que terminara de escribir para desaparecerse junto a Remus.

–Bien, mientras esperamos a que vuelvan, podría contarnos por qué demoró tanto.- Dijo Cornamenta viendo como Dumbledore se sentaba en el piso, acomodándose sus lentes y le devolvía la mirada con seriedad.