Andrea observaba desde la ventana como Flavio se iba hacia su coche y se iba del rancho, Irina entró en casa nuevamente con una sonrisa de oreja a oreja.
Andrea: ¡Te gusta!-se sorprendió y tapó su cara-se te nota a leguas, hacia tanto tiempo que no te veía sonreír.
Irina: parece buen hombre ¿verdad?-la miró-¿Qué opinas?
Andrea: ya te dije lo que opino... Flavio es de ese tipo de hombres-suspiro.
Irina: ¿qué tipo de hombres?
Andrea: esos... con los que te casas y tienes hijos-miró una foto de Fabio y la tomó entre sus manos-...de los de toda la vida, así como mi Fabio-sonrió con los ojos aguados-disculpa, estaré en mi habitación.
Irina: ¿has ido a verla?-Andrea la miró con los ojos envueltos en lágrimas y afirmó.
Andrea: me dijo que la había matado...-Irina trago saliva-que lloraba y lloraba y que tenía que hacerlo...-soltó un llanto
Irina: tranquila...-la abrazó-ve a tu habitación, te subiré un té-Andrea afirmó y con pesadez subió las escaleras.
Entró en su habitación y suspiró, hacia 15 años que el amor de su vida se había ido dejando en ella un gran vacío que nada ni nadie podía rellenar, ¿Por qué a ella? Se preguntaba una y otra vez tratando de encontrar en su cabeza algún motivo por el cual la vida y Beatriz le habían arrebatado la felicidad que tanto tuvo.
Andrea: que feliz fui a tu lado, a pesar de todo-miró el cielo a través de la ventana-te echo tanto de menos mi amor...-tocó sus labios e inconscientemente recordó a Samuel-sus labios...
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Aurora caminaba por los campos de cultivo sin perder de vista la casa principal, buscaba con necesidad a su padrino que seguro estaba trabajando en la siembra del algodón, necesitaba un poco de conversación o se moriría entre el aburrimiento y la desesperación de Patricia por un frapuchino.
Aurora: ¡te encontré!-asustó a su padrino.
Samuel: cielo, ¿Qué haces por aquí?
Aurora: es que me aburro, no hay nada que hacer en el rancho.
Samuel: si quieres puedes ir al pueblo, ve con Juana.
Aurora: está metida en la cocina y lo prefiero ¡eh! Hace unas comidas riquísimas-soltó una risa.
Patricia: ¡estáis aquí!-Aurora entreabrió la boca sin creerse que estuviera allí en tacones-¡Ay!-tropezó y Samuel la sujeto.
Samuel: ¿era necesario venir en tacones, mi amor?-soltó una carcajada.
Patricia: es que vi a Aurora salir y no me dio tiempo a cambiarme, quería ver a donde iba.
Aurora: ¿y por qué?
Patricia: solo quiero compartir tiempo contigo... no sé, ¿podíamos dar un paseo? Eso sí-se señaló la ropa-si me dejas cambiarme-Samuel sonrió.
Aurora: está bien, vamos a que te cambies y daremos un paseo, prohibido hablar de frapuchinos te lo advierto.
Patricia: si... está bien-sonrió
Samuel: no vengáis tarde, aquí oscurece pronto.
Aurora y Patricia fueron nuevamente a casa, la primera esperó a que la segunda se cambiase por algo más cómodo y plano para poder pasear por ahí tranquilamente, bajo las escaleras y ambas salieron nuevamente de casa para hacer una pequeña caminara y conocer aquel lugar en el que vivían.
Patricia: oye Aurora... yo siempre quise mantener esta conversación contigo, pero nunca me atreví.
Aurora: tú dirás-dijo andando encima de unas pequeñas rocas.
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LA VIUDA
FanfictionUna dulce niña de 15 años llamada Andrea llega al rancho Alcázar en busca de trabajo, en su lugar, encuentra el amor en los ojos de Fabio, hijo de Ignacio Gallardo y Beatriz Alcázar, ese amor tan puro entre jóvenes desatará una serie de tragedias qu...