—Hola—digo al teléfono.
Ha estado sonado por un largo rato ya que mi vagancia no me permite levantarme del sillón donde descanso cómodamente, pero la molesta insistencia de quien sea que este llamando me obliga a hacerlo.
—Al fin atiendes—no logro distinguir la voz aun sigo un poco dormida.
— ¿Quién habla? —pregunto confundida.
—Joe—dice su voz al otro lado del teléfono.
— ¡Joe! ¿Cómo estás? —le pregunto un poco mas despierta.
—No muy bien—dice en tono triste pero puedo jurar que esta fingiendo.
— ¿Por qué? —digo siguiéndole el juego.
—Es que una amiga me prometió que nos volveríamos a ver pero ya estoy sintiendo que no es verdad—se le escapa una risita al final de la oración.
—Perdón es que estuve/estoy ocupada con los estudios—si básicamente esa es mi vida los días de semana y también sábado y domingo estudiar y estudiar.
—Está bien, lo entiendo pero mínimo pudiste haber llamado—no se te van a caer los dedos porque lo hagas—ríe.
—Lo siento—soy la peor de toda ya es la segunda vez que se lo prometo y no cumplo nada.
—No importa porque se como hare para que me lo recompenses—prepárense porque las ideas de DJ Danger no son nada buenas.
—No entiendo—digo cambiando mi celular de una oreja a otra.
—Mañana vamos a la playa y no te vas a negar—dice.
— ¿Vamos? ¿Tú y yo? —me restriego mis ojos y me despabilo un poco.
—Si—escucho que se ríe.
— ¿Solos? —vuelvo a preguntar.
— ¡Claro que no tonta! —me grita por el auricular del teléfono.
—No me trates así Joe, estoy algo cansada—le reprocho.
—Bueno entonces paso por tu casa cerca de las seis, estas lista.
Ya me duele la oreja Joe cuando se pega por el teléfono no hay quien lo pare aun no le confirmo nada y ya está hasta decide por mí.
15 minutos después en una "mini pelea telefónica" aun seguimos en lo mismo.
—Ya te dije que no lo sé Joe tengo que estudiar—le vuelvo a repetir.
—Justamente me parece buena idea que te relajes un poco con tus amigos ¿Qué es mejor que eso? —dice.
—Una larga siesta, tal vez.
—Claro que no te extraño mucho Valerie ya han pasado semanas desde que nos vimos.
—No lo sé—digo cansada rodando los ojos porque no me ve.
— ¿Qué? —ahora que mas va a inventar.
— ¡Holaaaa! —se escucha una suave pero emocionada vocecita del otro lado.
— ¿Alena? —digo no muy segura, espero no haberme equivocado.
—Siii—dice riendo.
— ¿Cómo estas pequeña? —digo ahora totalmente despierta.
—Bien.
—Me alegro—Alena me pone de tan buen humor.
— ¿Vas a venir mañana? —ahora entiendo en qué consiste la idea de Joe.
—No puedo hermosa—frunzo mi ceño.
— ¿Por qué? —su tono de voz cambia de alegre a decepcionado.
—Estoy muy ocupada estudiando.
—Pero es solo un ratito, puedes estudiar luego. Estudiar es aburrido, la playa es divertida—se ríe.
—Lo sé linda, pero no podre ir—digo.
— ¿Es que no me quieres? —pregunta tristemente.
—No, Alena no es nada de eso.
—Claro que sí, yo tenía razón ya me olvidaste—dice entre lo que creo son sollozos.
—No pequeña no es así yo te quiero mucho.
—Es mentira porque sino vendrías con nosotros a la playa—dice con voz llorosa.
—Me encantaría ir pero...
— ¡PERO NO ME QUIERES! —grita molesta.
—Alena, no digas esas cosas, no es verdad—ella sigue mascullando palabras que no llego a entender entre tanto llanto. Odio esto—escucha iré ¿sí?
— ¿En serio? —dice alegre.
— ¡Iraaaa lo logramos! —grita del otro lado del teléfono supongo que le habla a alguien.
— ¿Así que nos vemos mañana? —dice Joe.
— ¡¡Eres un mentiroso manipulador Joseph!! Sabes que quiero mucho a esa chica y la usas en mi contra ¿no te da vergüenza?
—En mi defensa, ella se ofreció—dice.
—Al menos me alegro de que ella no estuviera llorando de verdad—digo riendo.
—Bien paso por ti a las seis.
—Bueno.
—Me olvidaba si quieres pueden venir Julieta y Christian.
—Yo les aviso—digo ya boca arriba con el teléfono en altavoz sobre mi cama.
—Adiós—cuelga.
Corto la conversación y me dejo caer en el sillón. Estoy agotada.
Odio que Joe me haya manipulado así pero ya me vengare.
Por otro lado me alegra volver a ver a los chicos. Sera una divertida tarde en la playa.
La preciosa de Alena en multimedia🌸👱🏻♀️
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Cruzando nuestros caminos
RomanceEl equilibrio todo en nuestra vida funciona bien si se tiene esa dosis diaria de equilibrio imaginas una vida con estos ingredientes viajes, dormir poco, éxito, adulación, presión, necesidad constante de reinventarse, aplausos masivos y justo despué...