*Capìtulo 5* -EDITADO-

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-Oh por dios, Kim... -La miré sin poder creerlo, sosteniendo su teléfono no sé cómo, porque la emoción me ganaba- ¡Lo hiciste! ¡Eres una perra!

Kimi tronó los dedos.

-Sorpréndente -Sonrió victoriosa.

Ayer de camino a la residencia Kimi me contó, sin omitir ninguno detalle, todo sobre los mensajes y lo que tenía planeado hacer con el número del profesor Jimin. Al principio creí que era una broma, por eso está colaborando con su locura mientras me reía y la animaba con que era un buen plan. Pero resultó que no...

Kimberly realmente lo había hecho. Se tomó una foto de sus tetas y se la envió al profesor Jimin ¡Se la envió! ¡Sin miedo alguno!

¡Es una perra sorpréndente!

-Aja, no fuiste muy lista amiga -Señalé el papel en medio de sus virtudes- Tu letra... Puede reconocer tu letra y saber que eres tú, Kim.

-Esa es la idea, bebecita.

No sí.

-Si me descubre, mejor, se adelantan las cosas. No está molesto, de otro modo, no me respondería los mensajes. Sé que le está gustando tanto como a mí.

-Affs, Kimi, yo no estaría tan segura de esto. Es que... Bueno, ayer no estaba como de costumbre. Se veía...

-¿Serio? Obvio, ¿Acaso no notaste el bulto que tenía? Hasta yo siendo hombre me incomodo de tener todo el tiempo el webo parado.

-No tienes compasión de tu futuro esposo -Me burlé, haciendo mueca- Eres una mala mujer, te diré.

-Soy la indicada y perfecta para él. Con esto quiero que abra los ojos y se dé cuenta. Sé que está buscándome, pero al parecer no tiene ni la menor sospecha de su... Linda, tierna y buena niña Kimi -Hizo ojitos, pestañeando como toda una diva descarada. Le dí un leve empujón, riéndome de su manera de actuar- Como sea, Jimin es mío.

-De pana, ¿Cómo alguien puede creer que eres inocente y santita? Sólo él.

-Pero así me ama -sonrió- Y yo a él. Sigo siendo una virgencita, hasta el día en que él llegue y me desvirga de la manera más criminal y pornosa del planeta -Mordió sus labios, mirando al cielo- y será tan rico.

-Tiemblo, Kim.

-Tan hermoso y especial. Algo en las novelas y películas jamás visto.

-¿Ni en los fanfics de Wattpad?

-Obvio.

La puerta del salón se abrió y de inmediato empezaron a entrar los varones como si fuese guerra mundial Z. Se sentaron en desorden y luego las muchachas también los imitaron. De inmediato Kim y yo supimos de qué se trataba y corrimos también hacia nuestros asientos.

Arreglé mi cabello con rapidez y me senté derecha. Venía la clase de Jungkook.

Pero grande fue mi sorpresa -Por no decir decepción- cuando vi a la profesora Linibeth de Artística entrar al salón con nuestra carpeta de asistencia en mano. Significaba que ella nos daría clases ahora, y no Jungkook.

Suspiré por lo bajo, ¿Dónde estará? Me había hecho trenzas con la esperanza de que él me viera y dijera que se me veían lindas.

La profesora Linibeth dejó las cosas sobre el escritorio y nos observó a cada uno de nosotros, para después pararse al frente y decirnos con su voz decente y angelical...

-El grupito de Namjoon se me separa.

Miré a los muchachos, escuchándolos reprochar.

-Naguara, Pro'esora.

El profesor JeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora