El profesor Jeon

**Capìtulo 23**

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POV JIMIN.

Ah genial.

- Jeongyeon... Que sorpresa, me alegra verte.

Ella levanto ambas cejas, sonriendo irónicamente.

-¿Enserio? Bueno... -Hizo mueca- Seh, a mí también.

Mire a Rose en busca de una explicación, ella se hundió de hombros.

-Vine a buscar a mi querida hermana que esta pasada de copas, un guardia me llamo para venir por ella. ¿La has visto? –Pregunto Jeongyeon, Su cabello estaba totalmente corto esta vez.

No lo voy a negar, ella seguía hermosa, mucho más hermosa que antes cuando su cabello tocaba sus hombros. Pero ya no hace temblar mi corazón.

No después de lo que paso.

-Creo haberla visto en el baño de chicas –Dijo Rose, Jeongyeon Le agradeció y se fue en busca de su hermana. Rose me hizo mueca y yo la mire sin entender. Me tomo del brazo y me empujo- ¡Ve con ella!

-¿Qué? ¡No!

-No seas bobo, ve a ayudarla. Su hermana está casi moribunda en el baño de lo ebria que esta, no podrá cargarla. ¡Se un caballero!

Ke Webo.

Mate a Rose con la mirada y fui a acatar la orden, después de todo si tenía que ayudarla. Nayeon siempre fue una buena chica, me sorprende que este moribunda en el baño, cuando le ofrecíamos alguna bebida ella siempre rechazaba y decía que no le gustaba. ¿Ahora qué paso?

La gente cambia, y le pega bien feo.

Me pare a casi dos metros del baño de chicas y espere a que Jeongyeon saliera con su hermana. Comenzó a sonar una música lenta y las personas comenzaron a llenar la pista de baile, a lo lejos pude ver a Jungkook bailar con Rose. Muy juntitos.

No es que desconfíe de Jungkook, pero... No sé, no me gusta ver muy juntitos a esos dos.

- Jeongyeon.

La llame, ella volteo a verme, quizás sorprendida por hablarle. Mire que no podía cargar a Nayeon quien se encontraba tal parece que dormida y la ayude a cargarla, la coloque en mi hombro y le señale con la cabeza la salida. Caminamos por todo el estacionamiento hasta llegar al auto de Jeongyeon...

Su carro...

El carro que yo le di el día de su cumpleaños. Llevábamos dos años de relación.

Íbamos a casarnos...

Jeongyeon me miro de reojo un poco incomoda, yo la ignore y espere que abriera la puerta del auto para poder meter a Nayeon.

Cerré la puerta y ella coloco la alarma. Las luces del auto titilaron.

Ese maldito carro me había costado mucho conseguirlo. Mas por la muy hija de su madre que soñaba con tener o ese carro o nada. Y fui hasta el interior de la tierra para conseguirlo y hacerla feliz.

-Gracias, Jimin... -susurro- Por ayudarme...

Yo asentí. Acaricie el capo de aquel Volkswagen amarillo y sonreí. Era un bonito auto.

-Jimin...

Uno cuando cree estar perdidamente enamorado comete un montón de locuras y tonterías por esa persona. De solo recordar todas las bobadas que hice por ella quiero meterme una cachetada.

Jeongyeon me tomo del brazo y me hizo encararla. Yo la mire, su labio inferior comenzó a temblar, no sé si por el frio o por lo nerviosa que estaba.