The Big Breaking Off

Golondrinas, Gatos Y Mearme En Una Caja De Arena

Luego de salir de la escuela con únicamente un leve sermón por mi pelea, aún había algo que me preocupaba, así que fui con la única persona que podría ayudarme

-¿Qué haces aquí mocoso? Escuche que te volviste potenciador, felicidades por cierto.

Su nombre es Roy, el fue la última persona a la que me llevó mi larga lista de favores para ser seleccionado como potenciador.

-Solo quiero hacerte una pregunta sobre esto -dije mientras mostraba la tarjeta con varios signos de interrogación.

Roy tomó la tarjeta y le echó un vistazo; su expresión parecía sería

-Esto... Es basura -dijo mientras rompía la tarjeta con indiferencia.

-¿¡Pero que haces!? -grité alarmado, nunca espere que hiciera algo así

-Me deshago de las fallas, es parte de mi trabajo.

-¿Pero qué hay de los signos? Podría ser algo especial -refuté.

La expresión de Roy era de hartazgo mientras reía.

-Chico, esto no es ningún tipo de RPG o novela ligera, no por estar lleno de signos de interrogación, significa que es una habilidad superior, fuerte o algo parecido, solo es basura.

-Pero no tenías porque romperlo.

-Ah, maldita sea, te diré que, te daré este chip a cambio, no tiene nada de especial y de hecho estaba por tirarlo también, es una actualización a tu chip de identidad como potenciador. Escanea tu alrededor y te puede decir las características de otros potenciadores dentro de 60 metros y también la clase de los GEA en esa distancia; en resumen, no hace nada que las tarjetas o tu propia vista no hagan, es buena compensación ¿no?

Un objeto inútil por otro -respondió Roy mientras ponía un pequeño chip en su escritorio.

Dudé un momento antes de tomarlo con curiosidad.

-Parece algo caro.

-Tonterías, esta cosa no tiene ningún uso; de hecho la mayoría ya han sido destruidos y los investigadores despedidos, solo quedan 10 en existencia y están en este cajón -explicó Roy con un tono de burla.

-Bien -esa cosa no tenía usos prácticos, pero era mejor que irme con las manos vacías, así que lo acepté, llevándomelo junto con los trozos de mi tarjeta de habilidad.

Por suerte, el implante no dolió tanto ni fue tan costoso como el de potenciador, de hecho solo tuve que pagar 200 créditos.

Una vez "resueltos" todos mis asuntos, decidí usar mi primera tarjeta de habilidad para domar algún gea, es verdad que no sería muy útil afuera, pero tal vez podría servirme tener un ayudante en la ciudad o algo que pueda distraer a los GEA fuertes para poder acabarlos; quizás una montura que me ahorre los puntos de agilidad, así que salí al bosque tratando de pensar en que criatura sería buena.

-¡Malditos jabalíes! Ni loco los usaré, estoy harto de ustedes -dije mientras veía con odio al grupo de ellos y seguía mi camino.

En ese momento, pasó algo que no creí posible; un bebe de jabalí se separo del grupo, era pequeño y regordete, con los ojos mas grandes y brillantes que hubiera visto.

Comenzó a acercarse a mí, dejándome totalmente desconcertado mientras me miraba con ojos llenos de expectativa.

-¿Acaso quieres... ser mi compañero? -pregunté mientras seguíamos cruzando miradas -¡Ni creas! ... inútil -me negué mientras me retiraba lentamente mostrandole el dedo medio.