Nosotros Somos Los Anderson

La Ex...

Alex...

Han pasado ocho días desde que mi cabello es azul, debo reconocer que después de ver una fotografía del New York Times, en donde voy saliendo de revistas Anderson tomada de la mano de Oliver, en donde el pie de foto era " el cambio de look extremo de la señora Anderson, debemos admitir que Alexandra Anderson es una mujer muy hermosa y talentosa y cualquier cambio que se haga le sienta de maravilla, ha impuesto una nueva moda donde la llaman " la nueva barbie" tenemos informes de una fuente muy cercana que la marca "barbie" ha solicitado varias veces reunirse con la señora Anderson para que represente a la nueva muñeca que será de cabello azul... Estaremos muy pendientes de la nueva hazaña de los señores Anderson, esta pareja siempre da de que hablar. Lo pensé durante muchos días, no quería hacerlo, pero Oliver me convenció, así que firme un contrato donde seré la representación humana de la "barbie de cabello azul"

Para celebrar mi contrato Oliver me invito a cenar junto a Nat y David en uno de los restaurant más lujosos de Nueva York.

- señores Anderson - un chico no mayor de treinta, vestido como pingüino nos da la bienvenida y nos conduce a la mesa que Oliver reservó.

- es precioso Oliver - tomamos asiento y Oliver me sonríe.

- tu siempre demostrando que cagas billetes - oliver pone los ojos en blanco al escuchar a David.

- no tengo la culpa, que tu seas un idiota, y que no te guste gastar el dinero que ganas David - Nat y yo reímos y David mira mal a Oliver.

- tu me pagas mal - se encoge de hombros y finge lloriquear - eres un esclavista, creo que merezco un aumento, no sólo por mi trabajo, también  por aguantarte tantos años.

- David... En serio, a veces quisiera darte una caricia con un martillo en la cabeza - Nat suelta una carcajada, al escucharme amenazar a David.

- yo te ayudo Alex - Nat balbucea entre risas y David la mira entrecerrando sus pequeños ojos.

- debo tener cuidado de ustedes dos - nos señala - dan miedo.

Gracias a Dios decidí muy bien que ponerme, la gente aquí es muy bien vestida, así que puse sobre mi cuerpo un vestido negro de pequeños tirantes ajustado en el pecho pero suelto desde la cintura, me llega casi a las rodillas y tiene un lindo listón azul que combina con mi cabello que está suelto con mis rizos muy bien hechos, Oliver como siempre está guapísimo, con un traje gris, camisa blanca y corbata a juego, Nat esta en un lindo vestido azul ajustado y le queda de maravilla y David está en un traje negro, camisa blanca y sin corbata.

- ¿Oliver? - todos miramos en dirección a la voz femenina llamando a Oliver, es una mujer muy bonita debo admitir, delgada con muchas curvas, de cabello negro, ojos miel, bonitos dientes y con un vestido plateado que le queda muy bien - ¿Oliver Anderson? - Oliver la mira desconcertado y yo frunzo el ceño ¿quien es esta? David la mira con la boca abierta y se gana un codazo de Natalie.

- emmm si, soy yo y tu eres... - la chica ríe abiertamente mostrando su perfecta dentadura y se acerca a oliver, yo me pongo en modo "si te acercas a mi esposo te pongo la silla en la cabeza"

- soy yo, Kim - Oliver abre los ojos como platos y se pone algo nervioso - que gusto verte - Oliver se levanta de la silla y la idiota esa lo abraza.

- Kim - no dice nada más y yo trato de pensar quien pueda ser esta idiota - estas, estas muy cambiada - ella le sonríe y pone sus manos con unas largas uñas sobre los hombros de oliver.

- si bueno, ya no soy de cabello castaño - pestañea varias veces ¿le estas coqueteando a mi esposo perra? Pienso.

- ¿David? - Nat le habla a David - ¿quien es esa? - David se encoge de hombros.

- no tengo ni idea - Nat lo mira mal, no le cree, y yo tampoco, ellos saben todo el uno del otro.

- amm Kim - Oliver se suelta de uñas tipo "cruela" y nos mira - te presento a mi esposa - oliver me tiende su mano y yo la tomo, la expresión en el rostro de Kim es de desprecio, me mira de abajo a arriba y sonríe de lado levantando su ceja.

- ¿estas bromeando conmigo? - frunzo el ceño cuando me señala con su mano - ¿tu esposa?

- así es - hablo y me acerco más a oliver - un gusto, Alexandra Anderson - estiro mi mano hacia ella, frunce su ceño y la toma rápidamente.

- vaya - mira a Oliver - no pensé que tuvieras gustos tan peculiares, creo que te pegó duro haber terminado conmigo, Oliver - ¿pero que se cree esta hija de? ¡Esperen! dijo ¿terminaste conmigo?

- no cambias Kim, sigues siendo tan despreciable como hace algunos años - Oliver me toma por la cintura y me sonrie - y si, no te equivocas tengo gustos peculiares, Alex no es una mujer normal - ella sonrie - es... Maravillosa y me enamoré de ella precisamente por eso, no es igual a ninguna otra.

- tranquilo cariño - la tal Kim ya me está sacando de quicio - no lo dije por ofender, solo, no esperaba verte casado, con una mujer de pelo azul - suelta una risita la muy estúpida - aunque te queda divino - se divierte conmigo la muy zorra.

- ¡bueno, basta! - escucho a Nat que esta como tomate sentada junto a David, se que esta muy molesta, igual que yo, y la verdad no quiero montar un espectáculo aquí - Oliver, Alex - nos mira a ambos - ¿vamos a otro lugar? Aquí como que, no se reservan el derecho de admisión - señala a la tal Kim que mira a Nat con rabia.

- oh, no te preocupes querida - habla Kim batiendo su mano - puedes salir por la puerta de atrás, Oliver, te veo luego cariño - guiña un ojo a oliver y da media vuelta contonteando sus caderas, tengo tantas ganas de matarla, pero Oliver me calma.

- Alex - lo miro aun con mi ceño fruncido - no le prestes atención, ella no significa nada, ni es nadie para mi.

- ¿quien es ella? - señaló a la peli negra que se aleja de nosotros y saluda a otro chico de beso en la boca.

- ¿recuerdas la novia que te conté de la U? - asiento y es cuando recuerdo la conversación que tuvimos en la fiesta de Italia, cuando el me contó de una novia que era una... Bueno que le gustaba repartir mucho amor a todos - pues es ella, aunque tenía entendido por Christian que se había casado y vivía en Londres hace muchos años.

- ummm - lo miro - ¡pero te sabes toda su vida! - David suelta una risotada y yo lo miro mal, estoy tan enojada que me tiembla el ojo derecho.

- lo siento - David alza sus manos a modo de paz - por favor Alex, no me mates, aun tengo mucho por que vivir - Nat le da una palmada en la cabeza - ¡auch! ¡Natalie!

- David Smichtt has silencio por favor - suena a advertencia, así que David se queda callado.

- Alex, por favor amor - oliver trata de explicarme mientras me cruzo de brazos y levanto mi ceja - el me contó como chisme, ya sabes que son chismosos, pero no porque me interese, y me contaron mucho antes de conocerte.

- entiendo, cariño - le digo sarcástica, Oliver resopla frustrado - me quiero ir de aquí, ahora ¿entiendes?

- lo que tu quieras - Nat y David se levantan, aunque yo ya voy muy lejos, estoy cabreada, Oliver va tras de mi pero no se acerca, se que no es su culpa, pero no quiero arruinar más la noche, al cruzar por una de las mesas veo a Kim que me sonríe victoriosa, seguro se dio cuenta que me enoje con Oliver, levanta una copa de lo que parece vino y hace como si estuviera brindando conmigo, me guiña un ojo, así que yo sin pensarlo le saco el dedo medio, salimos al estacionamiento con Nat y David tras nosotros.

- ahora - habló cabreada - quiero una maldita hamburguesa y una malteada para aliviar la rabia que siento - Oliver asiente y cuando abre la puerta de su auto para mi, escucho de nuevo esa estúpida voz.

- ¡Oliver, Oliver! - veo a la estúpida de Kim caminar rápido hacia el auto, esto no puede ser...

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Oh mai ga como diría la niña Rosa (veo que se acercan problemas) ¿que pasará? ¿Que querrá Kim? ¿Qué hará Alex? Todo en el siguiente capitulo

Os amoooooo

Besitos de sapo saltarin 😘😘

Carolina Granobles