Nosotros Somos Los Anderson

¡Estúpida, Mi Pelo Idiota!

Oliver...

Yo sé, que Kim sé quiere morir hoy... No conoce a Alex, y, desde que nos encontramos en el restaurante, la ha estado provocando.

- Oliver... - Alex habla casi susurrando - te juro que hoy habrá un muerto - abro los ojos aterrado, sé qué ella sería capaz, Alex pestañea varias veces, si no la conociera diría que es la mujer más tierna del mundo, pero yo la conozco y sé, que puede llegar a ser peor que el mismísimo satanás, ahora con el pelo azul.

- no vas a matar a nadie, Alex - cada vez Kim está más cerca, suspiro, no quiero problemas con Alex, se que me castigaría y me dejaría sin super Alex hasta el fin de mis días, y yo sin super Alex no puedo vivir.

- Oliver... - Kim se posiciona frente a mi, aun estoy de pie junto a la puerta de Alex, aunque me sorprendió volver a ver a Kim, sigue siendo la misma persona sin sentimientos que conocí en algún momento, gracias a ella me convertí en la persona que Alex conoció en algún momento, ¿como pude estar enamorado de alguien como ella? Es tan distinta a Alex, por mi gran experiencia, estoy seguro de que ha pasado por el cirujano muchas veces - yo, lo siento Oliver pero no puedo dejarte ir, sin antes hablar contigo.

- no tengo nada que hablar contigo - sé que debí sonar rudo, pero me importa una mierda, por el rabillo del ojo veo a Alex, está cruzada de brazos y mira a Kim con gesto asesino - y ya me voy.

- por favor... Serán solo cinco minutos - doy pequeños golpecitos en la puerta con mis dedos, me estoy poniendo nervioso, no sé cual pueda ser la reacción de Alex, y Kim no está muy dispuesta a solo dejarme ir.

- habla - me cruzo de brazos, y espero que hable, Kim juega con sus dedos mirando sus manos, y con un anillo que sé, es de compromiso - ¿Kim? - llamo su atención, ella levanta la vista y me mira fijamente - ¿que es eso que quieres hablar conmigo?

- ¿podemos hablar a solas? - una pequeña risita sarcástica sale de la boca de Alex, Kim la mira ceñuda - digo, si a ti no te molesta, claro - Kim habla con Alex que solo la mira, veo que tiene un tick en el ojo.

- lo que necesites hablar - Kim me mira de nuevo - puedes hacerlo aquí, no tengo secretos con mi esposa.

- si así lo quieres - Kim sonrió de lado, y noté que Nat estaba de pie junto al auto de David cruzada de brazos, David estaba sonriente como siempre, maldito idiota, siempre tiene que estar burlándose de todo - solo quería que supieras que... Te amé Oliver, fuiste alguien muy importante para mi... Y... Si algún día decides dejar esta estupidez del matrimonio, búscame, se que también fui alguien muy importante para ti - abro la boca y frunzo el ceño ¿esta mujer está loca? Voy a contestar pero ella sigue hablando - me amaste, eso lo sé, y el primer amor nunca se olvida, y aunque ahora estas casado con... Ella - señala a Alex - muy en el fondo sabes, que puedo mover fibras sensibles contigo, fui tu primer todo Oliver, y eso, eso jamás se olvida - estoy en silencio, no se que decirle, ella piensa que puedo sentir algo de nuevo, pero no es así, yo amo a mi rubia que ahora es peli azul, veo como Alex se va levantando lentamente, como esas escenas en las películas a cámara lenta, bueno así, y se acerca a Kim que la mira y le sonríe, pero Alex está muy seria y temo por lo que pueda hacer.

- sabes... Kim - Alex suspira fuerte y pone sus dedos en el puente de su nariz, se que se está controlando, así que me hago junto a ella y pongo mis manos en sus hombros - tu, pudiste ser la primera para Oliver en todo, pero jamás le enseñaste que es el amor, personas como tú, no saben que es eso - Alex sonríe, y yo la dejo que siga hablando, Kim la mira con el ceño fruncido - ¿sabes? Pueda que yo no tenga las tetas tan grandes como tú, ni el culo como el tuyo, pero algo que tengo mucho más grande, es el cerebro, porque creo que, eso es lo único que tu no tienes, y, no voy a permitir, que una estúpida puta barata como tú, pase por encima mío.