Nosotros Somos Los Anderson

¿Antojado?

Alex....

Hace unos días, estoy  sintiéndome rara, mis pechos duelen y estoy muy sensible, lloró por todo, no lo entiendo, yo nunca he sido tan sensible, al contrario, creo que soy una especie rara, Oliver anda irritado con mi actitud, no he querido nada de su super Oliver y eso es raro en mi. Rosa dice que quizá " ya se me murió la concha" ella y sus términos raros, Natalie insiste en que nos volvimos monótonos y por eso ya no quiero tener relaciones con Oliver, siiiii no se asusten, aún amo a mi satanás Anderson, es solo... Que no se que mierda me pasa.

- ¿cariño? - la voz dulce y suave de oliver me saca de mis pensamientos, lo miro, tan sexy como siempre, ya está listo para irse a trabajar - ¿te parece si esta noche salimos a cenar? Quizá una hamburguesa mejore tu ánimo - frunzo mi entrecejo y lo miro.

- ¿mi ánimo? - Oliver asiente despacio y se sienta a mi lado en la cama - yo estoy bien Oliver, no entiendo porqué dices eso - no se en que momento pasa, pero una lágrima baja por mi mejilla, Oliver suspira y mira al techo.

- a esto me refiero Alex - lleva una de sus manos a mi mejilla y la acaricia limpiando mis lágrimas, su contacto me encanta pero cuando vamos a llegar al punto simplemente no puedo - estas muy sensible, lloras por todo, no me dices que es lo que está pasando, y sabes que me preocupo, que quiero saber todo lo que te pase, eres mi esposa y todo lo tuyo me interesa, así que... ¿Quieres decirme que pasa? - ¿que le puedo decir? Ni yo misma se que me pasa.

- Oliver... N no se que me pasa, me siento extraña, como si no fuera yo - Oliver frunce su entrecejo.

- ¿te sientes enferma? ¿Quieres que vayamos al médico? - niego y trato de sonreír.

- no, creo que es mi periodo debe estar por llegar - Oliver me sonríe con dulzura y eso me derrite, se acerca y me da un beso en la frente, hace unos días amaba su colonia, ahora por algún extraño motivo me hace dar nauseas, me retiro suavemente, el lo nota, deja caer su mano al colchón.

- bien... Me voy, me llamas si decides salir ¿de acuerdo? - asiento, Oliver se levanta y me mira una última vez, y sin más, sale de la habitación. Me recuesto y dejó salir un largo suspiro ¿que me pasa? Yo amo a Oliver, no me entiendo, " maldito periodo de mierda"  " Eva esto es tu culpa por tragarte la puta manzana y hacer que Dios nos castigará" me río de mis pensamientos, me levanto y siento un leve mareo ufff debí levantarme muy rápido, me ducho y mientras lo hago noto mis pechos un tanto hinchados, sip definitivamente me va a llegar Andrés, si ese que te llega cada mes, salgo del baño y me visto, bajo y Rosa ya tiene mi desayuno listo, pico algo no tengo mucha hambre.

- niña Alex - Rosa me habla - yo la quiero mucho, y veo que no está comiendo muy bien, eso es muy raro en usted.

- no se Rosa, no me siento bien, mi estómago no me recibe comida - pico algo más de fruta, pero no, no puedo.

- debería ir al doctor, yo se porque se lo digo - veo una sonrisa maliciosa en el rostro de Rosa, frunzo el ceño, Rosa y sus locuras.

- ¿sonríes por qué tengo que ir al médico? - me cruzo de brazos.

- no, pero me da felicidad saber lo que viene - no entiendo una mierda de lo que dice, Rosa se va tarareando una canción y me deja sola en la cocina, ¿lo que viene? Pffff mejor me voy a trabajar, si sigo poniendo atención a las cosas de Rosa, terminaré igual de loca que ella. Llego al trabajo a las nueve en punto y mi querida secretaria, Isa me recibe con mi café de siempre, le agradezco con una sonrisa.

- dime por favor mis reuniónes del día- me siento, Isa también lo hace, me dice mis reuniones y tareas del día, nos ponemos de acuerdo en algunos asuntos y terminamos nuestra reunión, el día pasa lento, a casi las tres decido llamar a mi esposo, todo el día he estado pensando en su invitación, y la verdad no es culpa de él, que el puto de Andrés este decidiendo en llegar, a joderme la vida, llevándose consigo a mi esposo.