Capítulo 6 I El fantasma de lo que fue.

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— ¿Lo conoce? —le susurró Kakashi.

<<¿Cómo olvidarlo?>> pensó.

El hombre frente a ella parecía no percatarse de su presencia aunque estaba prácticamente frente a él. Estaba muy ocupado mirando con odio a ambos Uchiha.
¿Qué había pasado? ¿Por qué estaba bajo arresto?
En su rostro, un corte y moreton lucían como premio y la sonrisa que alguna vez había amado ahora estaba llena de locura y oscuridad.

— Obito. —el azabache parecía salir de su trance y finalmente la miró.

— Rin. —su nombre le supo amargo en su boca y se llenó de rabia— Soy inocente, lo juró.

¿Qué?

— Comandante —Fugaku la llamó— La hemos traído aquí para identificar a este hombre, Obito Uchiha, ¿cierto?

Por supuesto que Fugaku no reconocía a su sobrino, ni siquiera ella lo había hecho en un principio, incluso la imagen actual de Obito resultaba turbia a lo que fue antes. La mirada dulce ya no estaba y la realidad es que una aura oscura lo rodeaba, el verlo ya era demasiado duro pero el saber que había sido corrompido era aún peor, ¿cómo pudo confiar en él? ¿Cómo pudo entregarle su corazón?

¿Cómo pudo?

--- El Comandante Uchiha es acusado de alta traición al pueblo de Konoha y a su Rey, su juramento a sido quebrado y pagará con creces.

— ¡Era necesario! —blasmo furioso— ¡Soy inocente! ¡Es necesario el sacrificio!

El horror se hizo presente en su rostro, ¿quién era el hombre frente a ella?

— Salgamos de aquí. —la voz del platino la regreso a la realidad, asintió pero era incapaz de moverse, él la tomó del codo dispuesto a llevársela lejos de la escena.

Ante el acto, él coló su brazo de entre los barrotes y tomó lo que aún creía, le pertenecía. Rodeó a Rin por el cuello.

— ¡¿A dónde crees que vas?! —gritó Obito, olía a sangre y sudor— Tú eres mía Rin, no lo olvides.

— Sueltala. —los rifles apuntaban a su cabeza pero el Uchiha ni se inmutó.

— ¿Por qué soltar lo que es mío?

De dos pasos, Kakashi cruzó la estancia y lo encaró, incluso a Obito le sacaba una cabeza.

— Sueltala. —gruño como un lobo.

Obito miro a Kakashi con dureza y poco a poco soltó una carcajada amarga.

— No volveré a estar bajo sus órdenes, Capitán. —y a pesar de lo que deseaba transmitir no salió la misma seguridad de antes en su voz.

--- No lo volveré a pedir, sueltala. ---frío como el hielo, Kakashi mantenía la calma.

— ¡Ya escuchaste al Capitán, obedece si no quieres un agujero en el esternón! —gritó Itachi.

— No le temo a los Uchiha, Itachi. Mucho menos a ti.

Aprovechando el momento de debilidad de Obito y motivada por la ira, Rin jaló del brazo que la mantenía presa, haciéndolo golpear contra los barrotes y sacándose de encima al hombre. Al voltear la vista, Obito estaba de pie con la mano sosteniendo su nariz, seguramente rota y la sangre cayendole por la barbilla. Y la mirada encendida por la ira.

— Te arrepentirás, Rin. —farfullo, acercándose peligrosamente a ella— ¡Te arrepentirás!

De nueva cuenta, trató de tomarla pero en ágil movimiento Kakashi la puso tras él, protegiéndola.

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