09» Jᴏsʜᴜᴀ

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Pedido por -tsukki💕

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Arreglé la falda de mi vestido por quinta vez en menos de tres minutos, creo que decir que estaba nerviosa era poco para mi verdadero estado

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Arreglé la falda de mi vestido por quinta vez en menos de tres minutos, creo que decir que estaba nerviosa era poco para mi verdadero estado.

Es que cómo no estarlo cuando el chico que te gusta desde primer año del colegio te invita a una cita.

─¡Deja de dar vueltas! ─me regañó mi mejor amiga.

Ella había venido desde temprano para ayudarme a elegir algo para la ocasión, le dije que solo iríamos a comer y luego a dar una vuelta, pero eso no la calmó.

─Lo siento, pero estoy tan nerviosa que hasta creo que vomitaré ─puse mis manos en mi estómago y me senté en mi cama, a su lado.

─Tranquila, Joshua es un gran chico... si lo haces de seguro él iría por medicina o sostendría tu cabello.

─Eso no me calma.

Y no lo hacía, ¡no quería vomitar al frente de él!

El timbre sonó y ambas nos levantamos como resorte, casi que corrimos hacia la puerta y a un metro de ella paré para arreglarme el cabello y checar, por milésima vez, mi ropa.

─¿Qué tal? ─susurré mientras daba una vuelta y terminaba en una pose rara, causando su risa.

─Perfecta ─alzó sus pulgares.

Di un último respiro antes de abrir la puerta y ver al chico más guapo con los que mis ojos se han podido deleitar.

─Hola.

─Hola, Joshua ─me quedé viéndolo como la tonta que soy.

─Te ves muy linda ─dijo con una sonrisa.

─Tú también te ves muy bien.

Ambos nos quedamos viendo fijamente al otro sin decir nada, solo sonriéndonos, hasta que una tos falsa nos interrumpió.

─Sí, todo muy lindo con las miradas de enamorados, pero creo que ahora tienen una cita, ¿no?

Jess, algún día te mataré.

─Sí, lo siento ─sonrió algo avergonzado y luego levantó un pequeño ramo de girasoles─. Descubrí que son tus favoritos.

─Gracias, me encantan ─los tomé y caminé hacia la cocina para ponerlos en agua.

─¡Lo tienes muerto por ti! ─sin duda no podía faltar su comentario.

─Haz silencio ─sentí el típico calor en mis mejillas, respiré hondo para que se me pase.

Una vez que estuve afuera y cerré la puerta él me ofreció su brazo, lo sostuve con mi mano y ambos caminamos hacia su auto. Abrió la puerta del copiloto y esperó a que me suba para cerrarla, dio la vuelta y se subió.

𝑺𝑬𝑽𝑬𝑵𝑻𝑬𝑬𝑵 𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔 ⸙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora