PLL: The Hunger games.

Día 8

¿Le parece apetecible la cena, Señorita Vanderwaal?-Mona asiente mientras come otro bocado del exquisito corte de carne frente a ella. La mujer es en cierto sentido muy parecida a los tributos de su arena (que han quedado a cargo de Wren y Jenna) siente el peligro observandola desde algún punto en la habitación, hilando menos fino tal vez, pero sabe que Cece a su derecha y Alex a su izquierda piensan cosas parecidas, ninguna de las chicas parece cómoda en aquella reunión... que no tiene un fin específico y así se lo hace saber al presidente Snow.

¿Que todavía no te he dicho por qué las hice venir?-el hombre ríe

El hecho de dejar MIS juegos en manos de otros, aunque sea por una sola noche, me parece poco profesional, señor-apremia la vigilante jefe-no sé que hago aquí, pensé que para usted era importante el trabajo que hacía en la arena.

Lo es-

¿Entonces porque sacarme de la arena y traerme aquí al capitolio?-inquiere la chica-traernos-se corrige-mis vigilantes y yo deberíamos estar en nuestra sala de mando ofreciéndole a Panem los mejores juegos de su historia...

Y volverá allí-dice el presidente-sólo... le he llamado para que me... preguntaba si recuerda nuestra conversación del otro día-ella enarca las cejas ¿Podía hablar de ello enfrente de las hermanas Drake? Lo preguntó con la mirada, él presidente asintió casi imperceptiblemente.

La recuerdo-dice sin más.

¿Lo ha comentado con sus vigilantes?-inquiere mirando a las chicas.

No pensé que estuviese permitido-dice sin más

No lo está-sonríe el hombre mirándo a las hermanas-pero les daré un resumen: mi equipo ha detectado... anomalías en uno de sus mandos-Alex carraspea ligeramente- ¿los investigó jefa Vaderwaal?

Por supuesto-dice ella-y como objeté en esa ocasión, debió ser simplemente un mal funcionamiento de rotores...

Pues mi equipo no lo cree así-Dice el hombre mientras bebe un poco más de su copa. Cece palidece, algo en esa reunión está terriblemente mal. Alex comienza a sudar-creen que se trata de alguna clase de favoritismo.

¿Favoritismo señor?-inquiere la vigilante en jefe sintiendo el estómago como de roca. ¿De que se trataba todo aquello?

Cosas simples-dice el presidente sin prestar mayor importancia-un poco más de raciones en un paracaídas, regalos caros a un bajo costo, alteración de ciertos de los elementos que utilizan en las noches contra los tributos para favorecer a alguien.

Eso es imposible-dice Mona sorprendida-yo nunca haría eso!

Usted no pero...-el hombre mira directamente a Cece que parece a punto de vomitar. Mona la mira impresionada ¿Podría haber Cece modificado algo para alguien, la rubia se aferra a la mesa, ¿Podría su mejor amiga haberla engañado bajo su fachada de tonta y manipular todo desde su control de segunda al mando? Mona quiere pararse y golpearla ¿lo ha hecho en serio?un segundo antes de hacerlo la mirada de Cece se encuentra con la de la vigilante jefe y Mona nota algo diferente: su amiga está pálida y sudorosa pero ella ha visto esa mirada antes, no es más que la exhorbitante cantidad de estrés que reposa sobre sus hombros. Alex se levanta de un solo movimiento sujetándose la garganta y haciendo en vano esfuerzos para respirar.

¡Alex!-Cece olvida su estado y se lanza a tiempo de atrapar el cuerpo de su hermana menor que se retuerce en sus brazos-Alex!-Mona mira a su vigilante convulsionarse en la elegante carpeta color vino, los ojos se le han vuelto hacia atrás y escupe una enorme cantidad de espumosa saliva por la boca y sangre por la nariz-¡ALEX!-oyendo los gritos y llantos de Cece, Mona se siente dentro de sus propios juegos.