Creo que nos llevaremos bien, siempre ando con hambre y sueño

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Capítulo 11•

Karol

Gracias Carolina por habernos avisado, podría estar en problemas pero sin embargo parece que los problemas los tiene ella, por alguna razón que desconozco.

No entiendo porque todo lo que pasa, el director culpa a mi amiga, caro. Ella es muy buena y respetuosa, si, sé que aveces es un poco rebelde pero todos aquí tienen un poco de rebeldía, que no lo nieguen.

Tengo que hablar con él. No es nada justo que por una cagada mía la pague Carolina.

Si, si, si, sé que no entienden porque les digo todo esto, aquí les va la explicación. El director habló en privado con Carolina unos minutos después de bajar de escenario. Le dijo que mañana se pase por la oficina que deben charlar, y obviamente no es de nada bueno.

En fin, me encuentro en esta fiesta que ya no la disfruto para nada. Lionel me dejó sola, Ruggero no sé dónde carajos se metió y Carolina está besándose con Agustín.

Un momento ¡Se están besando! Debo admitir que se ven hermosos juntos, pareciera como si fuesen hechos el uno para el otro. Muy cliché, lo sé, pero es lo que se me viene a la mente al verlos juntos.

—Hola ¿Karol?— dijo una voz masculina a mis espaldas dejando mis pensamientos a un lado.

Gire y me encontré con el chico de rulos, llamado ¿José? ¿Jo...? ¡Jorge! Si, Jorge.

—Hey, hola— dije sonreí.

—Veo que no la estás pasando muy bien— dijo tomando algo que no llego a decifrar que es exactamente.

—La verdad que no, estoy sola, tengo hambre y sueño— dije y el rió.

—Creo que nos llevaremos bien, siempre ando con hambre y sueño— dijo y ahora reí yo.

—Y tú, ¿Con quién viniste?— dije.

—Con Chiara, está en el baño— dijo y observamos como la rubia ya venía con nosotros.

—¡Hola!— saludó feliz, Chiara.

—¡Hola! Yo los dejo, estoy muy cansada— dije y me despedí de ellos.

Caminé hacia la puerta pero me detuve ya que alguien tomó de mi brazo.

—¿A dónde vas?— Preguntó Lionel no muy contento.

—Ya estoy aburrida, no tiene sentido quedarme si estoy SOLA— dije y me encogí de hombros.

—Pero, sabes que no puedes salir hasta que la fiesta acabe. Podrías tener problemas— dijo y yo reí.

—No te imaginas cuántos problemas tuve desde que llegué, uno más no hará daño— dije y me fuí. Él solo me observaba detenidamente y luego se fue en algún lugar del gran salón.

Llegué a mi habitación y decidí darme una ducha, abrí el grifo y las gotas de agua fría calleron sobre mi rostro y luego a mi cuerpo dando una sensación relajante.

Luego de unos diez minutos de ese baño placentero me puse el pijama, un short de color celeste y la remera de tirantes que hacía juego con él.

Me cepille los dientes y me tiré a la cama dejando que algunas sábanas que estaban allí vuelen por mi rostro.

Solté un suspiro y me acomodé un poco para así dormir de una buena vez. Quería olvidarme de todo, y eso significa que quiero olvidarme de la pelea que tuve con Ruggero ya que el dice que soy la culpable de que hoy no pudimos hacer, ya saben que.

Yo no le di mucha atención a sus palabras, sé que estaba enojado y dijo tal vez cosas que no deseaba, tampoco entiendo muy bien su enojo, no creo que sea para tanto.

Lo único que no quería que pasara, tuvo que pasar. Ahora estamos "peleados" y espero que no afecte a nuestra relación de amistad.

La puerta sonó justo cuando yo estaba conciliando el sueño y tuve que poner mucho esfuerzo para levantarme.

—Ruggero, si vienes a reclamar algo te invito a que te retires porque no estoy para hablar y menos pelear— dije con voz adormilada cuándo abrí la puerta.

—No, nada de eso. Solo quería pedirte perdón por esa pavada de hace rato ¿Me perdonas Minion Sevilla?— dijo y yo reí y asentí.

—Pero para mañana me consigues otro apodo, eh— dije y ahora el río y asintió.

—Nos vemos mañana— dijo y besó mi frente.

—Hasta mañana, fresita— dije y sonreí para después cerrar la puerta y tirarme a la cama.

No sé cuánto tiempo me dormí, solo se que desperté gracias a una persona, mejor dicho unas personas.

Agustín y Carolina están hablando alegremente mientras se dan cortos besos y caricias, que incómodo, yo estoy enfrente de ellos pero no saben que estoy despierta.

Me di vuelta en la cama para hací darle la espalda y buscar por algún lugar de mi cama mi celular. Y lo encontré.

Miré la hora y eran las cuatro con treinta y tres minutos. ¿Recién vienen de la fiesta?

Tocí falsamente y me levanté para ir al baño haciendo como que no los vi, al salir del baño Agustín ya no estaba y Carolina estaba "durmiendo".

—Se que estás despierta— dije y ella volteó.

—Nos viste ¿Verdad?— Preguntó ella con vergüenza.

—No es nada malo, solo se daban besos— dije y me encogí de hombros haciendo que ella sonría.

—No creas que acabamos de llegar de esa fiesta, solo que no podía dormir entonces el se ofreció a quedarse aquí hasta que yo duerma pero sólo provocaba mis ganas me besarlo— dijo y yo reí.

—Son muy lindos juntos, pero no quiero que salgas lastimada— dije sentandome a su lado.

—Tranquila, trataré de no hacerme tantas iluciones— dijo y yo asentí.

—Que descanses— dije mientras me acostaba en la cama.

—Tu también— dijo ella repitiendo mi acto.

♡•♡•♡•♡•

Hola!

Nuevo capítulo 💗

Se que es muy corto pero ya quería actualizar.

¿que les pareció?

Ah y inscribí a mi historia a los wattys 2018. Está bastante dificil pero bueh 😂

No se olviden de votar ⭐ para seguir con más capítulos 💕

Besooooos

-Abi

Amigos Con Beneficios ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora