Capítulo 2

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Kurt estaba pensando cómo hacer para ayudarlo. Desde que Blaine le pidió ese doloroso favor se la pasaba pensando cómo iba a hacer de él un chico "romántico". Después de mucho reflexionar, se dio cuenta que tendría una ardua tarea, le propondría todo lo que había pensado. Estaba decidido a ayudarlo, aunque se le rompiera el corazón... Otra vez con lo mismo Kurt, te decidiste a ayudarlo no te pongas ahora a pensar en corazones rotos.

- Grandísimo idiota - dijo en voz alta. Miró alrededor y agradeció que no hubiera nadie en su cuarto. Tengo que hacer de Blaine un perfecto enamorado. Tengo que lograr que él pueda expresar sus sentimientos sin sonrojos, cómo lo haré no tengo idea. Si ni yo puedo hacerlo -suspiro. Cómo podré lograr que él lo haga? Sí Kurt definitivamente eres un perfecto idiota - Ahora lo último que te falta es que te pongas de novio con Adam.

- No lo digas ni de broma - dijo una voz y Rachel entro rápidamente a la habitación. Kurt la miró y sonrió. Rachel era la mejor amiga del castaño, un poco irritable, pero buena chica y Kurt había notado que se veía más linda, se pinto el cabello y tenía una sonrisa de mujer enamorada. Enamorada y de que todo le salía bien.

- Si tu hermano te escucha no te la acabas

- Rachel- dijo algo rojo - No pensé que hablara...

- En voz alta? - él asintió - Si Kurt y en voz muy alta - rió

- Lo grité? Fue lo único que dije?

- Había algo más que decir?

- Sí, estaba pensando algo más...

- Se puede saber qué es? - Kurt la miró a los ojos y Rachel comprendió. Claro, Rachel sabia todo, todo lo que Kurt sentía y vivía, su gran amor...- Blaine, es él? - El chico asintió triste.- Qué fue esta vez?

-Yo... he decidido dejar atrás a Blaine- la castaña lo miró sin entender - Verás, yo he decidido, continuar mi vida, Blaine me pidió algo por lo que no puedo luchar.

- Habla claro cariño.

- Él me pidió que lo ayudara a ser más romántico - Rachel rió a carcajadas - No te rías!

- Pero - lo miro - por que te pediría algo tan absurdo?

- Sebastian, por quién más? - suspiró - Él quiere comprometerse con Sebastian y necesita ser romántico.

- Pero si Sebastian lo quiere tal como es...

- Exactamente yo le dije lo mismo! - grito golpeando la cama con el puño - Que si ese lo obligaba a cambiar, realmente no lo quería.

- Y él, qué contestó? -Kurt hizo una buena imitación de Blaine.

- Que tenía que cambiar porque necesitaba ser más romántico... "algunos hombres son más sensibles que otros, y Sebastian quiere que yo cambie..."

-Es en serio - dijo enojada y lo miró - y tú que le contestaste?

- Que si él le pedía eso, realmente era un...

- No! Le dijiste que lo ayudarías?

- Sí - bajo la mirada - no podía soportar esa mirada que él hace cuando quiere algo.

- Eres un idiota!

- Eso ya lo sé, pero - suspiro profundamente - yo le prometí que lo haría.

- Qué tienes en mente?

- Bueno él quiere una velada con todo - ella lo miró confundida-.

-  Cena, baile, declaración y beso - Rachel lo miró sonriendo - La cena no es problema, puede pedir reservación en algún restaurante de aquí. El baile... diablos! tendré que ponerme zapatos de hierro para enseñarle a bailar, digo para que cuando me pise no me rompa los dedos.

-Sí, es terrible bailando, le enseñaras algo movido?

- No - dijo riendo - Algo más lento, para que baile más apretado a la cara de zuricata- Rachel sonrió divertida.

- Y después de la cena y el baile?

- El beso - su rostro se sonrojó.

- Lo besarás?

- Qué? No! Como crees! - dijo mas rojo - Solo le diré cómo un chico quiere ser besado cuando alguien se le declara.

- Bueno, yo esperaba que Finn me rompiera la boca - rió

-Rachel -exclamo el ojiazul- Por Dios.

- Qué querías? Estuve casi 5 años esperando que el tonto me dijera que me amaba, casi me le tiró encima - Rieron - Yo no iba a esperar eso de cena, baile, declaración y beso.

- Bueno, pero tengo que lograrlo - dijo al final - sólo tengo dos semanas para hacer de Blaine un chico sensible y romántico.

- Si logras tú cometido te debo una cena, hacer que Blaine sea romántico es como lograr que Finn coma con la boca cerrada - rieron

- Respeta, que es mi hermano.

- Pero no por eso deja de ser algo cerdo al comer

- Sí, pero a ti no te importa como come cuando lo llevas a la sala privada.

- Qué sabes? - pregunto tensa.

- Mucho, más de lo que te imaginas. - se levantó - tengo hambre vamos al comedor ya es la hora de la cena -Rachel algo colorada, asintió y bajaron las escaleras. En un sofá cerca de las escaleras estaban Finn, Artie, Mike, Puck, Nick, Sam y Blaine.

Rachel bajó detrás de Kurt, cuando estaban llegando a la sala, la castaña miró al ojimiel y luego tomó del brazo a Kurt llevándolo a un rincón apartado.

- Todavía estas a tiempo... - él la miró extrañado y Rachel sonrió.

- A tiempo para... ? - preguntó confundido.

- A tiempo para atraparlo, tonto.

- No sé de qué hablas...

- De Blaine, abandonas la pelea?

- Qué pelea? Si ni siquiera me he presentado y ya he perdido. Rachel entiende, él lo ama y se va a comprometer.

- No seas tonto, tienes dos semanas para que se fije en ti - Kurt torció los ojos y trato de explicarle como si su amiga tuviera cinco años.

- Entiende, Blaine me pidió ser más romántico. Tengo que entrenarlo para que Sebastian lo disfrute - de repente se quedo callado y miro a su amiga como tratando de captar las palabras. Rachel sonreía y ella por fin entendió - tú dices...

- Por fin! Si que eres lento - dijo mientras se sentaban en una banca y bajo más la voz - tendrás 2 semanas para que Blaine esté a solas contigo, baile apretado a ti, lo beses y bueno uses todas tus armas para conquistarlo.

- Como si pudiera, lo he intentado casi desde que lo conozco Rachel y nada ha funcionado.

- Pero nunca tuviste la oportunidad que tienes ahora, cariño. Velo de este modo. Tendrás dos semanas a solas con él, sin el estorbo de un Sebastian, revoloteando y distrayendolo. Estará pendiente cien porciento de ti y tú tienes armas con que atraerlo. Vamos eres un Hummel - esto último lo dijo en voz alta. Sus amigos miraron hacia donde ellos estaban.

- Rachel, claro que es un Hummel -dijo Finn-  los dos se pusieron rojos.

- Dime que no escucharon toda la conversación - dijo Kurt casi en un susurro.

- No te preocupes por eso - se levanto - preocúpate por tener listo un plan, esos libros que te regalé en tu cumpleaños, aparte de esa ropa tan divina que tienes te servirán...- le tendió la mano para ayudarlo a levantarse - vamos al comedor, suelo tener buenas ideas cuando tengo el estómago lleno.

- Tú crees que puedo tener éxito?

- Todo depende de ti Kurt, todo depende de ti.

Hasta aquí el segundo capítulo, esperó que les haya gustado, sí fue así por favor regalénme un voto y un lindo comentario.

¡Mil gracias por leer!

Aprendiendo a ser Romántico (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora