Capítulo 8

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Dedicado a blainegay en verdad estoy muy agradecida contigo por leer la fic y por cada comentario que haces,significa mucho para mi el saber que hay una persona a la que le encanta tanto la historia y me da la seguridad para seguir adelante con ella, espero que te guste el capítulo.

Con cariño, Nat❤


- Crees que lo hago bien? - le susurró al oído.

- Perfecto! - dijo Kurt - no te detengas.

- Quizás si le doy pequeños besos en el cuello...

- Sí y mas ayudará si le acaricias la espalda también.

- Kurt... - dijo él algo colorado - son demasiadas cosas, o te beso, bailo o te acaricio la espalda.

- Haz una cosa a la vez pero hazlo! - dijo y sonó impaciente, Blaine sonrió y le dio un suave beso en el cuello mientras su mano recorría la espalda del chico explorándola. Kurt estaba en el paraíso, pero cuando Blaine atacó nuevamente su cuello con sus labios pareció salir del sueño y reaccionó - Bueno, qué hora es? - se separó bruscamente. Blaine respiro desconforme, pero se fijó la hora en su reloj.

- Son las diez y cuarenta.

- Bien... por hoy es suficiente - se acomodó el pelo mientras Blaine se pasaba nervioso las manos por su cabello, alborotándolo más

- Sí - respiró profundamente - vaya cómo pasa el tiempo cuando te diviertes.

- Blaine no es diversión es trabajo.

- Sí, es verdad - dijo algo apenado - pero la he pasado bien - lo miró - cuándo será la próxima clase?

- Había pensado que lo del baile me llevaría más tiempo pero aprendes rápido por lo que si nos vemos un día si y uno no, quizás...

- Dijiste todos los días - exclamó algo desesperado- está bien que mañana no bailemos, pero necesito que me ayudes quiero escribirle una carta a Seb - él tomó su abrigo con rabia, Blaine no lo notó - Qué me dices?

- Tengo otra opción? - él negó sonriente - Está bien pero mañana no es necesario que nos veamos aquí.

- Por qué no?

- Bueno porque una carta la podemos escribir en cualquier lado.

- Pero aquí estaríamos más cómodos y no estarían ni Finn ni Rachel molestándonos, tu sabes cómo se pone tú hermano cuando me acerco a ti.

- Está bien - dijo cansado - apaga las luces, si hubiera sabido que te ponías tan fastidioso no aceptaba.

- Tengo una maestro exigente - lo abrazó mientras se ponían el abrigo - sorprendentemente me he convertido en un perfecto alumno.

- Si que eres tonto, sabes? - dijo él riendo, Blaine lo abrazó y se acercó sensualmente a su oído.

- No tengo remedio, estoy enamorado- Kurt sintió que todo su cuerpo perdía la fuerza, que dulces y sensuales sonaban esas palabras de su boca. Pero no eran para él, Blaine no las decía por él. Suspiro, esto de ayudarlo sería lo más doloroso que viviría, si Blaine no caía en su trampa como pensaba.

Blaine esa noche se fue a su cuarto, se puso su pijama y se acostó, quería estar solo, que nadie lo moleste, debía pensar qué diablos había pasado esa noche en la lavandería y se convenció de que no había sucedido absolutamente nada, nada que alterara sus pensamientos. Miró hacia la mesita de noche y vio uno de los libros y se dijo Por qué no? Lo tomó y lo leyó completo, no era tan grueso apenas tenía veinte poemas eran buenos según su opinión. -Seguramente de aquí puedo sacar algunas ideas para la carta de Sebastian invitándolo a ir a la cita... como lo extraño. De repente se detuvo a leer el último poema el número 20.

"Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: la noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos...

- Que profundo - pensó, y continuó leyendo.

...El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso...

- Pero yo quiero a Seb y el me quiere - sonrió. Aún pensando que eso era una pérdida de tiempo siguió leyendo. Fuera de su cama, se escuchaban las voces de sus compañeros al entrar a la habitación, el apagó la luz y esperó a que se durmieran, después de un rato volvió a la lectura.

...En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido...

- Que estoy leyendo? Yo lo tengo y no lo he perdido. Definitivamente estos poetas son algo dramáticos y yo estoy completamente loco por estar leyendo esto - suspiró.

...Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío...

- Ósea que el verso cae y penetra el alma como el rocío es absorbido por el pasto y este se regocija cuando cae el rocío, por ende el verso regocija el alma? - suspiró ,pero cómo puede regocijarse si el poema habla de un amor perdido? Ah, no entiendo una mierda!

... Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.,
Mi alma no se contenta con haberle perdido...

- Quien? - Dio vuelta el libro - quién es el que canta? -Será mejor que no me mate analizando estas cosas, sólo me dedicaré a leerlos y disfrutarlos, pero cómo los puedes disfrutar si no los entiendes? Qué diablos! Dejaré que mi corazón o será mi cerebro el que diga si le gustó o no, Ay Kurt esto me pasa por pedirte ayuda...

... Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido...

- Pero ponte de acuerdo hombre!! - murmuró fastidiado - La quieres o no?

...Porque en noches como ésta
la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo."

- Ay Sebastian - suspiró- realmente te extraño tanto. Sólo así puedo entender lo que estoy haciendo. Dejó a un lado el libro para taparse y descansar. Apagó la lámpara y se quedó mirando el oscuro techo de su habitación recordando lo sucedido en el día, al día para el Fut y realmente no sé por qué, estuve todo el día pensando en lo que dijo Kurt, de repente una sonrisa tímida se formó en sus labios - Tiene la piel tan suave y definitivamente sus ojos son hermosos... Si Finn me escuchara me mataría- sonrió, y con esa estúpida sonrisa cerró los ojos y se durmió.

Espero que les haya gustado este primer capítulo del domingo de maratón, sí fue así no olviden votar.

Nos leemos en un rato con la segunda parte.

¡Mil gracias por leer!

Aprendiendo a ser Romántico (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora