Capítulo 23

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- No estás convencido del paso que vas a dar, lo veo en tus ojos - Blaine dejó de mirar al ojiazul para centrar su atención en el viejito - estás seguro de que no lo amas? – dijo Kevin dando una mirada rápida hacia Kurt y la volvió a fijar en él. Blaine lo miró con asombro sin saber que responder.

- No, no es eso es que no me gustan los compromisos formales y por supuesto que no amo a Kurt - dijo un poco molesto.

- Está bien - dijo Kevin - yo sólo pensé... - Blaine lo miró desafiante y él prefirió guardar silencio -  Entonces sólo hablamos de un regalo especial?

- Así es - Kevin se acercó a Kurt dejando a Blaine.

- Tú amigo es un idiota - dijo claramente.

- Cómo dice? – preguntó Kurt que babeaba por un collar, no le prestó atención.

- Qué tienes en mente? porque él - dijo señalando con su cabeza hacía Blaine - no tiene idea de nada – él rió.

- Este chico... – dijo con cara de asco y el Kevin sonrió divertido – derrocha virtudes – más sarcasmo – y tiene un sentido del humor y el status social que nadie le vería, pero que él está convencido de tener, me entiende?

- Sí... -dijo él y se acercó a su oído – Lo odias verdad?

- Con todas las fuerzas del mundo – respondió riendo - Pero que no me escuche mi amigo, él me mataría si hablo mal de su amado Sebastian– miraron a Blaine que estaba perdido mirando unos collares.

- Entonces - dijo aumentando su voz y Blaine se acercó a ellos – Si el chico es "Sofisticado"... – y guiñó un ojo a Kurt que sonrió divertido – Lo mejor será un reloj de oro con incrustaciones de diamante.

- En serio?

- Eso le va a dar más sofisticación a un caballero señor – dijo con seriedad, mostrándole un reloj alternado con pequeñísimas bolitas en oro blanco y se cerraba con un broche en forma de corazón del mismo metal, y que tenía engarzadas unas pequeñas esmeraldas – ve? Simple pero exquisito!

- Me encanta - dijo Kurt - si yo pudiera, me lo compraría ya.

- Pero a mí me gusta ese – dijo señalando un reloj con piedras para nada sofisticado y que tenía un broche simple con algunos diamantes, talla brillantes.

- Bueno... si te gusta... – dijo encogiéndose de hombros – lo llevamos.

- Y para usted joven?

- No., yo no tengo intenciones de comprar nada – rió sonrojado – yo no tengo dinero ni para entrar a la tienda.

- Pero si es un joven muy hermoso verdad? – y miró a Blaine.

- Yo... - y no supo que  decir - envuelvalo para regalo – dijo rojo de vergüenza.

- Bien - asintió.

- Blaine mira la hora que es faltan diez minutos para el mediodía, no te importa que te deje?

- Me disculpan –Ellos lo miraron – tengo algo que le gustará.

- Pero ya elegimos el reloj.

- Por qué no esperas? - le dijo Blaine - Es que tanto apuro tienes de ir a verte con ese Jeff? – le pregunto mas celoso que enojado.

- No claro... - dijo apenado – disculpa.

- Bien Kevin que nos decía? – el viejito los miró sonrientes pero se dirigió a Kurt.

- Déjeme decirle que en cuanto lo vi supe que a usted era especial – él sonrió – por lo que me atrevería a decir que esto le quedaría estupendo - le mostró un estuche de terciopelo rojo y lo abrió, dejando a Kurt sin aliento - qué le parece?

Aprendiendo a ser Romántico (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora