Capítulo 39. (Lejos)

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POV EVA

La primera vez que abro mis ojos, parece que nada de esto es cierto.

¿Lina?

Mis ojos se van acostumbrando a la luz y poco a poco mi cuerpo cede. Existe dolor por cada una de mis extremidades, mi mente también parece recién levantarse... los recuerdos son vanos, pero el ver a mi mejor amiga hace que crea y todo sea un sueño.

—Oye. Hola.

Mis labios están súper secos, justo en ese momento entra una enfermera. Lina habla con ella sobre mi estado y la chica me acerca un poco de agua, en un vaso.

—Que la beba por sorbos, muy despacio. Su estómago está vació y puede producirle vómito.

Lina inclina mi cama un poco más y acaricia mi cabello mientras lleva el líquido vital a mi boca.

—Grraccias... — Mi voz sale carrasposa. Ella me sonríe y sigue hidratándome por algunos minutos. Paso mi lengua por mis labios y una espesa lágrima sale de mí, mi amiga la nota y la limpia suavemente.

—Calma, Eva. Estás a salvo, no tienes nada que temer.

—Aalex..

—Ya está en prisión, también Ronald, Eva. Todos saben lo que paso.

Mis ojos se agrandan y ella sonríe.

>>Papá siempre supo que nada de lo que decían era verdad, te buscamos por años, Eva. Que bien te escondiste —bromea y yo río. Sus manos me ayudan a acomodarme y observo las heridas de mi cuerpo, mi mano sana se levanta y toco las vendas cerca de mi nariz.

>>Suertuda, muchas entrar a quirófano por vanidad. Ahora tienes una nariz perfecta. —Río con cuidado y ella menciona un "lo lamento", observo el yeso de mi brazo y siento las gasas de mi pierna.

>>¿Duele?

—Solo uunn poco.

El silencio reina en la habitación, mi amiga parece un poco cohibida.

—Oye, ¿todo bien?

—Solo quiero ir a casa.

—Chester vendrá y te llevará...

—No, Lina. Yo quiero ir a casa, a mí casa. —Las palabras se arrastran y algo en mí se rompe. Quería un espacio para mí, lo merecía. Era egoísta, pero había pasado huyendo por años, después lo encontré a él y fue mi error ocultarle cosas, pero también dolió el trato recibido. Dolía recordar a la persona que nunca conocí; ser asesinado. La humillación en el club, la duda por su paternidad... tenía mucho que pensar. ¿Era de verdad está vida la que quería? Chester, me daba todo...

Era una difícil decisión, pero supongo que los dos fallamos. Yo estaba mal por dentro, mi mente era un río de recuerdos. Sabía que quizá necesitaba un sicólogo, olvidar este mes debía ser difícil... sin embargo, él tiempo decidía todo.

—¿Piensas dejarme?

Mi corazón se acelera como nunca. Levanto mi rostro, sus ojos me miran, Lina tose y me exclama—: Iré por algo de café.

>>¿Piensas dejarme, vida?

Sonrío, mi mano inquita agarra la cobija.

—Creo qué...

—¿Es por el dinero?

¡¿Qué?!

>>¿Por qué nunca podré darte lo suficiente?

Mis ojos se agrandan, frunzo mi ceño con enojo.

>>Lo siento, vida...Yo, a veces digo las cosas por decir... No las pienso —menciona, su mano agarrando su cabello—. Y me arrepiento... de todo. —Sus ojos se topa con los míos. Mi mano toca mi brazo herido, hago una mueca de dolor, él ya está a mí lado. Sus dedos acarician mi rostro, puedo ver dolor en sus verdes pupilas.

CUIDANDO DE ELLA®  - (SAGA MC - ELLA#2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora