CUIDANDO DE ELLA® - (SAGA MC - ELLA#2)

Final

POV EVA

Respiro pausadamente mientras trato de retirar las grandes gotas de agua que se quieren formar en mi rostro. Aprieto la sábana de la cama y me estiro de una manera rara para que el horrible dolor pase.

Siento el gruñido de Chester a mí lado y trato de sonreír.

—No es nada, Chester. Calma. Es lo que algunas mujeres deben pasar. —Sus ojos verdes me examinan con dolencia. Sus manos limpian el sudor de mi rostro y sus dedos se posan en mi mejilla.

—¡Esto es una jodida mierda! ¡Sí me iban a decir que mi mujer tendría que sufrir tanto, hubiéramos adoptado!

Trato de intervenir diciéndole algo, pero el dolor se vuelve a extender. Muerdo mis labios mientras la contracción pasa y mi vientre se vuelve más duro.

La doctora entra junto a una de las enfermeras y me extiendo un poco más; yo estoy sentada al filo de la cama, con Chester a mí lado, su brazo en mi cuello y su mano sosteniendo la mía.

—Muy bien, Eva. Sube a la cama y alza la pelvis.

<<No quiero>>

Duele mucho.

Sosteniendo un sollozo, Chester me acomoda y sigo las instrucciones. Aprieto la mano de Chester cuando la doctora ingresa sus dedos en mí, y un jadeo de dolor sale.

—¡No puede hacer algo mejor! ¡He visto su mano estar dentro de mí mujer por horas! Sin embrago, ¿mi hija no sale, o sí?

—Señor. Mc Call.

—¡No puede hacer que jodidamente esto pare! ¡Lleva más de diez horas con contracciones!

—Está dilatando debidamente, una cesaría estropea mucho el cuerpo de una mujer. Ella está lista para un parto normal, su cuerpo también.

Agarro la mano de Chester cuando la contracción viene de nuevo, trato de ser fuerte por ella, pero este dolor es horrible.

—Señor. Mc Call, su esposa está lista para la epidural, no se preocupe. Estará bien.

—¡Al fin dice algo sabio!

Cierro mis ojos sintiendo el cansancio de mi cuerpo. Agnes y Troya entran otra vez; Chester me tapa y cubre mi cuerpo.

—Ahí estás, oye, todo estará bien —anima la rubia.

—¿Cómo te sientes? —pegunta Troya.

Hago una mueca de disgusto y el solo asiente.

—Viéndote así me alegra saber que ya pasé por eso. Te comprendo, Eva. ¡Es horrible! Al menos el tacto... ¡Dios!

—Agnes, silencio —regaña su hermano.

—Lo siento... es decir. Eres fuerte Eva, ya verás que todo vale la pena.

—Gracias...

La doctora entra junto a su equipo y pide que todos salgan, excepto Chester. El besa mi frente y me ayuda a poner en posición.

Nunca antes desee que me inyecten sino hasta ahora.

******

Sobo mi vientre mientras Eileen trenza mi cabello. Skiller pasea por la habitación y Chester sostiene mi mano.

—¿Cómo te sientes, vida?

—Bien —admito tranquila, mis ojos están cansados...

Su barba toca mi rostro y besa cada espacio libre, sonrío sin fuerza. Skiller nos mira y se acerca a mí.