Capítulo 51 (Final) Parte 2: Demasiadas sorpresas y pocas esperas.

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Mientras camino junto a Laria recibo un mensaje de parte de mi abuela. Dice que ha llegado al apartamento, el cual era mío antes de que fuera invadido por ella, mi madre y primeramente por mi tía. La primera de las razones por las que accedí al pedido de Sebastián, sobre quedarme en su casa fue por el nulo espacio que quedaba en el mío. 
- ¿De qué se supone que están disfrazadas tú y Rachel? – Pregunta la hermana de Sebastián cruzando uno de sus brazos con el mío.
- Pues ella es Paulie Bleeker y yo soy Juno MacGuff, somos los personajes de la película Juno. Rachel creyó que sería gracioso bajo las circunstancias de que la protagonista también está embarazada.
- ¡Era el vestuario perfecto! – Dijo Rachel apareciendo detrás de nosotras. – Además usualmente tú vas vestida en pareja con James, si es que teníamos la dicha de no trabajar en ese entonces. Y mi pareja siempre a sido Cass desde que ha comenzado a tener el uso de razón. Así que elegir un vestuario para nosotras me ha dado un poco de depresión. – se mete entre medio de nosotras y se sujeta de nuestros brazos. – Mi compañera de maldades y búsqueda de dulces me ha abandonado, ya no me necesita. – Eso último lo dice tan bajito que juraría que su voz se ha cortado por el dolor.
- Oh cariño no digas eso. – Digo intentado no reírme al igual que Laria.
-  Ella ha dicho que es la Lilo de su Stitch. Ahora ya no me necesitará para hacer sus maldades. – pasamos entre la gente y miro hacia atrás para ver cómo están las dos niñas. Las encuentro siendo sostenidas de las manos por Vincent y este les da vueltas haciendo que rían. - ¿Ahora con que excusa iré a buscar dulces? – Vuelvo a ponerle atención a la conversación y no me contengo en reírme, Rachel parece una niña.
- ¿Por eso la bolsa? Pensé que era para que las niñas pudieran coger mas dulces.
- Oh...claro por eso era. Siempre estoy pensando en las niñas. – Rachel tose como si intentara quitar alguna molestia de su garganta. - Bueno cambiemos el tema y dejen de acusarme con sus miradas y burlas internas. -  abraza la bolsa en forma de calabaza fuerte contra su pecho. – Mejor porqué no nos cuentas, ¿Cómo una adolescente como tú no está en una fiesta aprovechado esa vestimenta sexy y bailando con un chico de su edad o con sus amigas?  - La risa que estaba dejando salir Laria se detuvo, se aclaro la garganta y se encogió de hombros.
- Las fiestas no son lo mío. Al menos no he tenido buenas experiencias en ellas y solo tengo un mejor amigo. Pero hace unos días empezó la universidad por haber adelantado y me he quedado sola. – Percibo un tono raro en sus palabras.
- ¿Y tienes algún interesado detrás de tuyo? Digo muy seguro tienes miles y si te vamos a integrar en nuestro pequeño grupo, al menos una de nosotras debe tener suerte en eso. Porque yo solo soy pura mala fortuna, James es un puto y Adara...bueno Adara no creo tener que explicarlo. – Mi amiga intenta decir las palabras adecuadas y Laria la tranquiliza sonriendo.
- Es bueno saber que ahora tengo amigas, un problema resuelto y por el otro problema no, no tengo suerte en esa materia.

Con escuchar su tono y la mirada en ella se bien que es mejor cambiar de tema. Algo que logro con excito. Comenzamos una conversación de lo que desearía estudiar en la universidad y por lo que deja en claro no quiere estudiar en ninguna. Dice que en sus planes ya tiene todo resuelto. Terminará su último año y comenzará su carrera de modelo plus, palabra que dice odiar y la cuál hará lo posible por destruir de la faz de la tierra. Cosa que abre las puertas a una detallada conversación de como es que para las modelos de tallas pequeñas solo se les denominan modelos, mientras a las que tienen un poco mas de cuerpo les añaden plus como si tuvieran que especificar. Dice que si fueran justos dirían modelos de tallas pequeñas, para que así las dos tuvieran puntuaciones iguales.    Pues que al final y al cabo hacen el miso trabajo. En definitiva, me hace conocer un poco más de ella y ver lo apasionada que es con el tema. Dice que tiene a un amigo que le ha ofrecido trabajo para una línea de marca famosa, que no puede esperar para que sus sueños se cumplan.

Mientras más seguíamos caminando, las niñas obtenían más y más dulces algo por lo que Rachel se sentía excluida. Aunque no fue por mucho su tortura para cuando nuestras versiones de Lilo y Stitch junto a Vincent como su guardaespaldas, le imploraron que las ayudara a obtener mas dulces o como lo llamaba Cassandra a obtener más oro para su tesoro y así demostrárselo a su padre cuando lo viera en la mañana. Que sin ella no estaban teniendo lo suficiente. Juro que pude haber escuchado el orgullo de mi amiga recomponerse de inmediato. Tal vez Cass al fin había encontrado su mejor amiga, pero Rachel siempre será la figura materna que nada podría reemplazar. Algo que mi amiga debía comenzar a entender de una vez por todas. Su miedo más grande desde que sostuvo a Cass en sus brazos fue que en algún momento algo o alguien la remplazara, específicamente alguna novia que fuera más allá que a unas simples cenas con Luke. Para ella sería más fácil dejarlo ir a él que dejar ir a Cassandra. Así que sin esperase mucho, la perdimos. Se entretuvo en cumplir lo deseos de las niñas y yo seguí caminando en compañía de la hermana de Sebastián.

Sebastián (1.1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora