Capítulo 25.

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Mina consideraba que los días lluviosos eran agradables, siempre le causaban una sensación de paz y tranquilidad, pero al parecer su forma de pensar cambió en cuanto se percató que había dejado su paraguas en casa, y ya era muy tarde para buscarlo. Al bajarse del metro la lluvia estaba cayendo con más intensidad, no tuvo más opción que cubrirse con el abrigo que traía puesto y correr hasta llegar a la empresa para evitar mojarse, aunque esa idea no funcionó del todo.

Saludó a la chica de la recepción y subió por el ascensor hasta la oficina del departamento de publicidad, esta mañana recibió un mensaje de Nayeon diciendo que tenían que hablar de algo muy importante sobre la campaña, le pareció extraño pues según tenía entendido la sesión de fotos había sido suspendida temporalmente. Entró a la oficina y vio a Nayeon concentrada en la pantalla del ordenador, se aclaró la voz para llamar su atención.

—Buen día Nayeon.

—Buen día Mi...¿Qué diablos te pasó?—Nayeon se levantó de su asiento mientras miraba a Mina.

—Olvidé mi paraguas en casa y el resto de la historia es fácil de deducir.

—Si sigues así vas a atrapar un resfriado. Pediré que te traigan un café o un té, necesitas entrar en calor.

—Tranquila no hace falta, yo puedo ir a la cafetería. Pero antes necesito saber que es eso tan urgente de lo que tenemos que hablar.

—No es nada grave, te llamé porque hoy tendremos una sesión de fotos. Pero esta vez será de una manera distinta.

—¿Distinta?—Preguntó curiosa, la verdad no estaba entendiendo nada.

—Sí, resulta que la empresa ha lanzado una nueva línea de ropa para el verano. Entre ellos se encuentran los trajes de baño, entonces Tzuyu nos exigió que en las fotos de la campaña debe incluirse la nueva línea de ropa.

Mina se quedó en silencio tratando de procesar las palabras de Nayeon, ¿Acaso escuchó bien? Eso quiere decir que ¿Ella debía usar bikinis? No es que le parecieran feos, pero le resultaba muy vergonzoso el hecho de pensar que sus fotos vistiendo trajes de baño estarían por toda la ciudad.

La mayor se echó a reír a carcajadas por las expresiones en el rostro de Mina, quien la miró confundida.

—Tranquila, no pongas esa cara. Solo bromeaba, sé que estas cosas pueden hacerte sentir incómoda y lo que menos quiero es eso. En realidad te llamé porque Tzuyu quiere que estés presente para escoger las fotos que vamos a utilizar.

—Pensé que aún seguía en Osaka con Sana.

—Sí, pero supongo que ya debieron haber llegado a Corea. Entonces, ¿Vamos por un café? Anda, no quiero que te enfermes.

—Me iba a enfermar si la sesión en traje de baño terminaba siendo una realidad.—Nayeon se quedó mirando a un punto fijo mientras una sonrisa apareció en su rostro.

—¿No estarás imaginando como me vería en bikini? ¿Cierto?—Preguntó Mina, sacando a Nayeon de sus pensamientos.

La mayor se preguntaba si Mina era psíquica o es que ella no había sido lo suficientemente discreta.

—Eres bastante inteligente, aunque debo admitir que la idea de verte usando un bikini no me desagrada en lo absoluto.

—Que graciosa, voy a salir de aquí. Me estoy muriendo del frío.

—Puedo ayudarte a entrar en calor.—Mina la miró con un sonrojo en sus mejillas, Nayeon sonrió.

—No de esa manera pervertida, yo hablaba de ir a tomar un café.

Make Me Love YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora