Make Me Love You

Capítulo 36.

Dos semanas habían transcurrido aproximadamente, la campaña había sido liberada exitosamente, todo salió tal y como estaba planeado, de hecho las ventas aumentaron un 85% en comparación al año anterior, podría decirse que la empresa estaba alcanzando su punto más alto después de varios años, todo gracias al trabajo en equipo y a la buena administración que Tzuyu le está dando a la empresa.

Aunque todo marcha de maravilla en el aspecto laboral, su vida personal está comenzando a ser un verdadero desastre, su madre vendría a Corea dentro de unos días, eso significa que tendría que afrontar la realidad, decirle acerca de su relación con Sana, no es como si esperara a que su madre lo apruebe, ella jamás lo haría, la echaría de casa y si tuviera el poder de despojar a Tzuyu de su fortuna lo haría sin dudarlo, por esa razón debe mudarse a su nuevo apartamento antes de que ocurra tal desastre.

Pero no solo eso le preocupa, su relación con Sana también ha estado un poco distante durante estos días y no porque ambas así lo quisieran, llevaban casi una semana sin verse debido al trabajo, suena irónico pues trabajan en la misma empresa pero durante varios días Tzuyu ha tenido que viajar a otras ciudades por asuntos laborales, eso sin mencionar las reuniones con los proveedores. Todos los días hablaban por mensajes o vídeo llamada antes de irse a dormir, pero eso jamás podría compararse al hecho de estar junto a ella, verla a través de una pantalla solo hace que la extrañe más.

Nunca imaginó decir esto pero extrañaba las tonterías, los besos y los abrazos empalagosos de Sana, claro que no lo admitiría frente a la mayor.

Afortunadamente su tortura acabaría hoy, los viajes terminaron y ahora se quedará en Seúl para arreglar los asuntos de la mudanza, decidió llegar más temprano a la empresa para ponerse al día con el trabajo atrasado, Heechul le entregó los documentos pendientes por firmar, normalmente Sana se encarga de esas cosas pero aún no llegaba a la oficina.

Mientras terminaba de leer, escuchó un toque en la puerta.

—Siga.—Dijo sin quitar la vista de los documentos.

—Buen día Srta. Zhou.—La nombrada subió la mirada al escuchar la voz de Sana.

Su boca casi va al suelo al ver como está vestida, lleva una falda que hace resaltar sus lindas piernas y una blusa tipo ejecutiva, debió haber sido muy obvia pues una sonrisa de burla se asomó en el rostro de Sana al ver las expresiones de la menor, inmediatamente se acomodó mejor en su asiento.

Están en la oficina y debe mantener la compostura.

—Buen día Sana.—Respondió con tranquilidad, aunque esta se esfumó al ver a la Japonesa caminar sensualmente hacia su escritorio.

¿Qué ocurre con ella? Se sentía como una adolescente hormonal.

—¿Hay alguna novedad?

—Sí, debe firmar estas autorizaciones. La Srta. Sojung dijo que las necesita con urgencia.—Sana le entregó los papeles, Tzuyu los leyó rápidamente.

—Hay un error aquí.

—Eh, ¿En serio? ¿Cuál es?—La Japonesa se acercó hacia el asiento de Tzuyu para poder observar mejor el pedazo de papel.

La más alta se tenso al sentir la cercanía entre ambas, subió su mirada hacia el rostro de Sana, específicamente a sus labios color rojo, justo cuando iba a apartar la mirada sus ojos se encontraron.