EL LEGADO

29. La Humillación.

15 de Mayo de 2019.
Hora: 4:31pm.

Nos encontramos en la clase de Pociones. Jenna disfrutaba muchísimo más las clases cuando las Mazmorras no estaban congeladas por el invierno. Ya en primavera, y acercándose el verano, podían trabajar a gusto y con más entusiasmo en sus fascinantes pociones.

En esa clase el profesor Slughorn les había pedido realizar individualmente una Poción Infladora.

-Jenna: Son dos cucharadas de ortigas secas, Albus... (le susurraba a su amigo) En el mortero.

Jenna machacaba a su vez tres ojos de pez globo en el mortero tratando de conseguir un polvo no muy fino. Craig Bowker, quien se hallaba en la misma mesa que ellos, trataba de imitar lo que la niña hacía.

-Albus: Machacados. ¿Y ahora qué?

-Scorpius: Toma (le pasa un frasco con ojos de pez globo), machaca éstos también.

La cara de asco de Albus resultó ser muy graciosa y Scorpius tuvo que ahogar una carcajada.

Jenna, muy concentrada en su poción, agregó entonces dos porciones de las mezclas machacadas en su caldero y esperó al menos 20 segundos a que se calentara hasta alcanzar una temperatura media.

-Jenna: Albus, no tan fino el polvo, debes dejar algunos pedazos (volvía a susurrarle a su amigos. Mira hacia Craig) Justo así Bowker.

Felicitó al niño, el cual se ruborizó un poco y asintió. Scorpius ya estaba agitando su mezcla en su caldero al igual que Jenna. Albus iba un poco más atrasado.
En eso, el profesor Longbottom entra al aula de Pociones.

-P.Longbottom: Permiso, profesor...

-P.Slughorn: ¡Neville! ¡Muchacho! (contento de verlo) ¿Qué se te ofrece?

-P.Longbottom: Disculpe que interrumpa su clase, profesor. Pero, ¿podría acompañarme un momento? Tengo algunos problemas con un par de chicos de Slytherin.

-P.Slughorn: ¡Estos jóvenes! (dramatizando) Que remedio... Niños, continúen con sus pociones, vuelvo en un momento. Vigílalos Jenna, mi niña (palmeó el hombro de Jenna).

Ésta se puso nerviosa de repente.
El Profesor Slughorn acompaña al profesor Longbottom.

-P.Slughorn: Estos Slytherin me harán morir antes de tiempo.

Le escucharon decir segundos antes de cerrar la puerta.
Cada alumno comenzó a ver en los calderos de otros y ayudarse entre sí. Mientras la mezcla en los calderos de Scorpius y Jenna reposaban el tiempo indicado, observaban a Albus agitar su mezcla; y a continuación, pasando rápidamente su vista por el libro, tomó un trozo de bazo de murciélago y lo agregó a la mezcla.

-Jenna y Scorpius: ¡NO!

Sin darle tiempo a sus amigos de impedirlo la poción de Albus explotó. Su cara y la de Scorpius, quien se le echó casi encima en un intento de impedir que Albus agregara el ingrediente, quedaron bañadas con la mezcla de la poción y comenzaron a hincharse y crecer sin control. La cara entera de Albus se infló como un globo, cada vez más grande y la nariz y boca de Scorpius colgaban de su cara con más del doble de su tamaño.

Jenna ahogó una exclamación llevándose las manos a la boca. Todos los alumnos en el aula comenzaron a reírse y burlarse escandalosamente de ambos niños. Flora Zabini reía lo más chillona y odiosamente que podía y Yann Fredericks se había arrojado al suelo y se retorcía de la risa; Elletra por su parte negaba con la cabeza con una ceja alzada. Lysander era el único que no se reía. Albus trataba inútilmente de tapar su enorme cara con sus manos y Scorpius sostenía su nariz y sus labios como si eso evitara que se le desprendieran del rostro. Lysander fue quien decidió correr entonces hacia fuera en busca del profesor mientras Jenna, aterrada, se acercaba a sus amigos pensando en cómo podía ayudarlos.