69. Materializarse

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Salgo del cuarto, tiro el trapito al tacho con el que me limpie la sangre y me pongo unos lentes oscuros caminando por el pasillo como si nada. Voy de manera seductora hasta la recepción y me saco los anteojos negros para mirar al que atiende.

—Quiero cambiar de habitación —le informo y mientras espero su respuesta muerdo la varilla del lente.

Mira el carnet.

—¿No había un chico en esa habitación? ¿Rein Weber?

—Sí, me lo comí.

"Amamos esa doble personalidad".

—¿Disculpa? —responde confundido el muchacho.

—Mira cariño, hubo un desperfecto en la habitación y la quiero cambiar, revisa el carné, acredita claramente que yo la alquile.

—Oh perdone, error mío.

—No te preocupes —Le guiño el ojo y cuando me da las llaves comienzo a caminar.

El celular del hombre suena y le llega la mala suerte.

—¿Qué? ¿Despedido? ¿Por qué jefe? ¿Qué hice mal?

"Cruzarse con Nyx".

"Ja, ja, idiota".

Esperemos que desde ahora, Blake y la señorita vieja, hayan aprendido la lección. Eso les pasa por estúpidos ¿A quién se le ocurre entrar a una habitación dónde se acumuló el poder de las voces? En otras palabras, energía negativa.

"Lo bueno de esto es que obtuvimos más información".

¿Un experimento para agarrar partículas? ¿Eso no es materializarse?

"Correcto".

—¿Y cómo harán eso? —Abro la puerta de la nueva habitación.

—¿Hacer qué? —Veo a Emmet en la ventana y me sobresalto, entonces él sonríe —Ah, no hablabas conmigo.

Es Nyx #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora