Respiro en profundidad mientras descanso en la camilla del hospital, entonces de repente percibo lo que tengo en frente. Voy a babear, definitivamente. Abro los ojos y rápido agarro el chocolate, para comérmelo.
—Sé lo mucho que te gustan —Me sobresalto al oír la voz de Emmet y dejo de mordisquear el riquísimo dulce.
—¡No es cierto! —Giro mi vista a la ventana dónde está sentado.
Su rostro frío me observa fijamente.
—Eso dile a tu deliciosa boca, aunque esperaba un gracias.
Sonrío.
—Esa palabra no existe en mi vocabulario, y si la digo debe ser más falsa de lo puedas imaginar, o para obtener algún beneficio propio claro está —le explico aunque ya debería saberlo —. Cuestión, ¿Qué haces aquí? ¿No se supone que mandaste a tus amiguitos a cuidarme?
—Sigo buscando a Blake —Mira hacia un costado —pero ya que pasaba cerca, deseaba verte —Vuelve a observarme.
Bufo.
—Pues ya me viste, ahora vete. Tus amiguitos están afuera, puedes saludarlos y decirles que se vayan. Sobre todo al adivino ese —refiriéndome a Ace —que me estuvo mirando todo el día de forma rara, más de lo normal.
Se baja de la ventana y camina hasta pararse delante de la camilla, sin abandonar su mirada fija en mí.
—Deja de echarme —Apoya la mano en la sábana y se acerca a mi rostro —¿Tan enojado estás conmigo?
—¿Quién dice que estoy enfadado? —Ladeo la cabeza.
—Porque te olvidé, sigues enojado —específica.
Me río.
—Que sueños divertidos tienes, vas a tener que tratar eso.
—Parece que no bastó con tirarme de un precipicio para salvarte —insiste.
—¿Cuando vas a entender que no quiero nada contigo ni con nadie? —digo seriamente y le aclaro —Así que olvídate de tus fantasias, porque no van a pasar —Sonrío ampliamente.
Se hace una pausa mientras me sigue mirando.
"Ya parece hipnotizado el imbécil".
—No te creo —expresa de repente —. Sé que no lo comprendes, pero ya lo vas a saber.
"Este no entiende ¿eh?"
Frunzo el ceño.
—No hay nada que descubrir ¿Sabés? Tú solo estás equivocado —Hago un círculo con el dedo —. Loco, se te perdió un tornillo, ve a buscarlo —Me río.
Sonríe y me sobresalto.
—Sí, creo que sí, varios por ti.
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Es Nyx #3
ParanormalÉl es ella, la oscuridad de la noche. ¿Escuchas las voces? Él las oyó detenidamente. Esperó paciente a que aquellas personas mínimo se disculparán, pero no sucedió, así que él decidió escucharlas a ellas, cuando no quedaba ni una pizca más de esper...