Capítulo 35.

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Estábamos en mitad de esa cuesta poco iluminada, soportando el duro frío del invierno. Harry estaba parado delante de mí, esperando mi gran respuesta a por qué le he odiado durante tanto tiempo.

- Recuerdas cuando éramos pequeños -comencé ha hablar e hice una breve pausa recordándolo- éramos los mejores amigos. Siempre jugábamos juntos, de hecho, prometistes que siempre lo haríamos y que SIEMPRE seríamos los mejores amigos. Cuando entramos al colegio, todo era perfecto hasta que te fuistes con Louis dejándome de lado -le miré tristemente a lo ojos- Claro, yo al principio pensaba que sería algo temporal, que no olvidarías tal promesa. Pero aparecieron Liam y Zayn, entonces ya si que no tenías tiempo ni para saludarme -me puse la chaqueta- Yo empecé a ir con Eleanor, Elizabeth y Niall, total, como tú ni si quiera me ibas a hacer caso -me encogí de hombros- Pero digamos que eso no me importó. Llegamos a primaria y lo primero que hicistes, fue comenzar a excluirme ¡No querías nada que ver conmigo! Y-yo ¡Pensaba que era un problema mío! Mis amigos me hicieron creer lo contrario, aunque yo no quería creer que fuera tuyo el problema.

- _____.... -interrumpió pero negué con la cabeza.

Era mi turno y me iba a escuchar hasta el final.

- Estábamos en cuarto y empezastes con los insultos. Te burlabas de mí a todas horas y yo lo único que podía hacer, era llorar cada vez que lo recordaba. Cuando mi madre se iba a dormir, yo lloraba en el regazo de mi abuela, ella era mi único consuelo -nis ojos estaban casi al límite de estallar- Cuando ella murió ¡Ni te dignastes a decirme lo siento! ¡En ese momento te necesitaba Harry y no estabas! ¿Acaso no te dabas cuenta? -las lágrimas comenzaban a brotar de mis ojos, haciendo que mis mejillas se congelaran poco a poco- Yo te perdonaba todo porque eras mi mejor amigo, confiaba en tu promesa y te quería demasiado como para odiarte, hasta que llegué a un punto. En el instituto, me teñí el pelo -levanté un mechón de mi cabellera- lo primero que se te debió de pasar por la cabeza fue ¿Por qué no insultarla? Si es algo ya rutinario, me sentiré mejor viéndola sufrir. Puedo decirle fea, cabeza fuego y muchas más cosas ¡Qué más da! ¡A ella no le importará! -exclamé con una sonrisa cínica- Después todas y cada una de tus novias. ¡Me dan asco! ¿Por qué permitías que se metieran conmigo? -pregunté dolida y decepcionada- Ellas eran mejores que yo y por eso podían joderme, ¿no? ¿Y cuando tuve yo novio? También lo criticabas sin razón. Y eso hace que me pregunte: ¿Por qué se mete tanto conmigo si no le importo una mierda? ¿Por qué me está haciendo esto? -le miré y paré para secarme las lágrimas que ya se hacían pesadas en mis mejillas- Y la única respuesta es porque fui tonta. ¿Cómo fui tan tonta de creer a un estúpido niño? Un inútil que solo sirve para follarse a las chicas y cuando se cansa dejarlas tiradas como a la mierda -escupí cada una de esas palaabras como si fueran veneno.

- Calla... -intervino cabizbajo.

- ¿Por qué confíe en alguien como tú? Seguro que si no te hubiera guardado rencor también te me hubieras follado y dejado tirada como una puta más...

- ¡Calla joder! -gritó esta vez y pude ver sus ojos cristalizados.

- ¡Me gustabas Harry! Y tú solo te has reído de mí todo este tiempo -grité notando como mi garganta raspaba. Llevaba un gran nudo que me quebraba la voz y las lágrimas volvían a deslizarse por mis mejillas cuesta a bajo.

- ¡¿Enserio me crees capaz de poder utilizarte como a una puta zorra?! ¡No tienes ni puta idea de nada! -se acercó a mí y puso sus manos en mis brazos, sacudiéndome- Joder _____. El primer día Louis me preguntó por tí y me dió consejos y que le habían leído en no sé dónde -señaló un punto muerto- No te saludaba porque estaba celoso y no quería que lo notases. Te ignoraba porque siempre acabábamos hablando de lo estupendo que estaba siendo el rubio contigo. Lo convencí para que viniese con nosotros y así dejases de hablar de él -paró y llenó sus pulmones de aire- Zayn me dijo que si me burlaba de tí coml él hacía con Elizabeth lograría llamar tu atención. ¡Entonces no sabía como ligar! ¡Era un niño! ¡Todos hacían eso! -alzó sus brazos desesperado- Cuando murió tu abuela, sabía que si iba no me ibas a querer ver y por eso te envié flores en anónimo con ayuda de mi madre. En el instituto me daba igual lo que dijesen mis novias, como ya dije ¡Quería llamar tu atención! ¡Estas hermosa con ese pelo! ¡¿Cómo puedes creerte todas esas gilipolleces?! El único que se dió cuenta fue Logan. Claro, él es a comparación mía un príncipe y yo quedo como el mujeriego cabrón. Pero entonces tú no tenías ni idea de ningún motivo y dudo con lo cabezona que eres que lo quieras reconocer.

Del odio al amor solo hay un paso (Harry y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora