Stay with me

Capítulo 31

Newt se escabulló de la sala en cuanto escuchó que querían hacer un trato con CRUEL respecto a Beca. Pensó que Beca solo era importante dentro del laberinto, pero al parecer había más. Mucho más.

Buscó a Beca como si todo fuera bien, intentaba aparentaba estar tranquilo para que nadie sospechara nada. La encontró hablando con un hombre con el que no parecía tener ningún problema, así que se acercó a ellos.

–Ey, ¿podemos hablar solos?– Le preguntó cogiéndole la mano.

–¿Pasa algo, hermano?– Preguntó el otro hombre cruzadose de brazos y apoyándose contra la pared.

–George es de confianza, Newt. ¿No podemos hablar aquí?

–Preferiría que no.

–Vale, enseguida vuelvo.– Le dijo a George.

–Sin prisa, hermana.

Newt tiró de Beca y la llevó con él, pero por el camino, se encontraron a Sky, con una mochila al hombro dispuesta para marcharse.

–¿A dónde vas, Sky?– Dijo Beca con una sonrisa.

–Que te lo explique tu novio.– Dijo y se marchó sería.

–¿Qué mosca le ha picado?

–Ahora te lo explico, pero vamos.

Newt siguió tirando de la mano de Beca hasta encontrar un lugar tranquilo y allí es donde entró, y una vez allí, se aseguró de que sus amigos no les hubieran visto para poder estar tranquilos un rato. Con todo aquello del Destello, les había oído decir más de una vez que no debían dejarle solo, pero él, lo primero que quería era estar tranquilo, y eso requería estar solo a veces.

–Newt, ¿que pasa? Me estará asustando.

–Sky trabaja para CRUEL.

–¿Qué?

–Trabaja para ellos, ¡Minho la escuchó hablar de he iba a volver con ellos!

–¿Entonces Sky se iba a...?

–Si. Y no solo ella, Tommy también trabajó con CRUEL antes de entrar en el laberinto.

–Pero eso no tiene sentido. Si trabajaba para ellos, ¿por qué le enviaron al laberinto?

–¡No lo sé! Pero aquí ya nada es lo que parece. ¡Incluso han hablado de entregarte a cambio de un trato!

–¿Cómo un trato? Vince jamás diría eso. Él está aquí para protegernos.

–Eso dicen todos. Pero sigues teniendo algo especial, ¿no lo ves? Todo el mundo te trata como si fueras de cristal.

–Newt, ¿por qué no te calmas un poco?– Dijo cogiéndole de las manos.– Creo que estás un poco nervioso y no deberías...

–No, no puedo calmarme si estamos en un lugar con agentes dobles de CRUEL y quieren entregarte.

–Por favor, Newt...

–¿Y si te encuentran? ¿Y si te hacen algo? Yo... no soportaría perderte de nuevo.

–Newt escucha.– Dijo tajante mirándole a los ojos.– ¿Recuerdas cuando me borraron la memoria y gracias a ti la recuperé?– Newt asintió preocupado.– Bien, pues, recuperé más memoria de la que esperaba.

–¿Beca, qué...?

–Yo también trabajaba para CRUEL.

Newt soltó las manos de Beca y se echó un par de pasos hacia atrás sin dejar de mirarla asombrado hasta que se chocó con la pared y se apoyó en ella.

–¿Pensabas contármelo?

–Pues claro que sí.– Dijo ella acercándose un poco.

–¿Cuándo?

–No lo sé, yo...

–¡¡Cuándo!!– Gritó él agarrándola de la camiseta y poniéndola contra la pared.– ¡¡Cuándo pensabas contármelo!!

–¡No lo sé!

–¡Confiaba en ti!

Beca agarró a Newt de los antebrazos y después le golpeó en el tobillo haciéndole perder el equilibrio, tirándole al suelo, quedándose encima de él y agarrándole de la camiseta.

–No vuelvas a hacer eso, nunca.– Le miró enfadada.– ¡Lo siento, vale! ¡Quería contártelo pero no sabía como!

Él estaba dispuesto a volver a gritar, pero entonces miró una de las muñecas de Beca que le agarraban con firmeza y vio que por encima del pañuelo que llevaba en ella, asomaban unas venas negras. Se quedó sin palabras mientras ella seguía hecha una fiera encima de él.

–Beca...– Dijo sin dejar de mirarle la muñeca.

En cuanto ella se dio cuenta le soltó y se miró la muñeca asustada. Después se la agarró con la otra mano preocupada y casi sin respirar.

–¿Que te pasa?

Beca no contesto, se levantó y se marchó corriendo. Newt se quedó paralizado en el suelo por unos segundos, pero luego se levantó y fue corriendo tras ella. Al salir, vio a los chicos a un lado y a Beca corriendo delante de él. Ella entró en su cuarto seguida de Sidney y seguidamente, George y otro hombre se pusieron delante de la puerta a modo de escoltas y cuando Newt quiso entrar con las chicas, se lo impidieron.

–Lo siento, pero ahora no puede entrar nadie.

–¡Pero le ha pasado algo a Beca! ¡Tengo que hablar con ella!

–He dicho que no entra nadie, hermano.– Dijo George apartando la chaqueta con la mano y apoyándola en la pistola que llevaba en el cinturón.

–Vale, vale...– Intervino Thomas acercándose a Newt y agarrándole del brazo.– Nos vamos.

Thomas sacó a Newt de allí y le llevó de nuevo con los chicos sin que él dejara de mirar la puerta. En cuanto estuvieron todos juntos, Newt les contó todo lo que pasó sin dejar de sentirse culpable por todo aquello. Estuvieron un rato esperando frente a la puerta del cuarto de Beca esperando noticias hasta que Sidney salió sola. Todos los chicos se levantaron corriendo de donde estaban sentados y fueron hasta ella corriendo.

–¿Qué le ha pasado a Beca? ¿Está bien? ¿Por qué tenia las venas así? ¡Que es lo que le pasa!

–Newt cálmate.

–¡No puedo!

–¡Basta!– Gritó Sidney dando una palmada y todos se callaron.– Beca está bien. O lo estará.

–¿Pero que le ha pasado?

Sidney se tomó un momento para calmarse y pensar bien lo que estaba a punto de decir y como lo iba a decir.

–Newt, Beca tampoco es inmune.